Archivo de enero, 2020

28 DE ENERO DEL 2020: EL 167 NATALICIO DE JOSE MARTI Y LAS PRIMERAS LECTURAS DEL NIÑO Y ADOLESCENTE CUBANO, ENTRE 1853 y 1865, RESPECTIVAMENTE…

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Por JOSAN CABALLERO.

Cuando se estudia a José Martí, como renovador de la literatura infantil en Hispanoamérica, esta valoración no puede excluir el examen de la tradición que le sirve de base, ni el marco sociopolítico y cultural en donde van a revelarse las normas preceptivas imperantes, las condicionantes genéricas y las exigencias del escritor en torno a la práctica artística concreta.

Con esas premisas metodológicas, se ha tratado de reconstruir las primicias de la cultura martiana, a partir de las referencias a los textos didácticos que se utilizan por entonces en colegios e institutos de segunda enseñanza de la Isla, y del acercamiento a los libros y publicaciones periódicas que lee ese niño de La Edad de Oro durante su infancia y adolescencia. De este modo, se establecen las primeras claves de su contacto directo con una literatura al servicio de la educación patriótica de la niñez cubana, en pugna abierta con los designios de la enseñanza metropolitana.

Luego de esta etapa formativa, la investigación se interna en la década más fructífera de José Martí dentro de la serie literaria infantil nacional. Desde 1879, en sus funciones de colaborador de La Niñez, periódico que dirige Fernando Urzáis, hasta 1889, como redactor de La Edad de Oro, se puede observar cómo se ha ido perfilando el concepto martiano acerca del papel que debe desempeñar la literatura en la instrucción de los niños y jóvenes de “Nuestra América”, aspecto que se hace programático en su revista de Nueva York, en donde confluyen el padre (ya revelado en el poemario de 1882) y el maestro, no sólo en lo docente, sino también en lo artístico y formativo.

No basta decir que son Ismaelillo y La Edad de Oro modelos para la literatura infantil del continente. El excepcional valor, además del cuerpo literario conformado, estriba en su nacimiento dentro de un contexto cultural y político resistente al surgimiento de obras originales y desautomatizadoras que, como las de José Martí, persiguen la descolonización ética y estética de los niños de América, y vienen a cubrir, en este sector poblacional, una necesidad creciente de conocimiento y deleite.

El interés de la presente investigación es demostrar como “ese hombre de La Edad de Oro” transgrede la norma, desde el niño que la antecede, adelantándose un siglo a lo que ha de ser más tarde, especialmente en Cuba, después del triunfo revolucionario de 1959, una verdadera serie literaria, auspiciada y promovida por un proceso también renovador en lo social-político y en lo cultural.

Cuando José Julián Martí Pérez nace, el 28 de enero de 1853, ha comenzado a manifestarse ya, en el panorama cultural cubano, el movimiento restaurador del Buen Gusto, que tiene en la segunda generación romántica a la portadora de las cualidades ideoestéticas necesarias para el cambio de signo revelador de un nuevo estadio literario, y en la Revista de la Habana (1853-1857), que dirigen Rafael María de Mendive y José de Jesús Quintiliano García, su principal órgano difusor.

Además de las conquistas formales y la corrección de los excesos de la oleada anterior, este grupo de poetas renovadores, entre los que se encuentra el maestro y protector de José Martí en el colegio San Pablo, consigue llevar a un alto grado la expresión de lo cubano y su interiorización, en un discurso caracterizado por la mesura, la perfección del verso y la comunicación íntima del sujeto lírico con el paisaje insular. Igualmente, con la creación de los restauradores el Buen Gusto, la poesía para niños y jóvenes de entonces se muestra abierta al influjo de otras literaturas, como seña de la independencia gradual de la retórica romántica metropolitana. De ese modo, el desarrollo de la serie trae consigo la pérdida de un localismo paralizante y el reclamo de las fronteras más vastas para la expresión artística.

Pero quien se adentre en el proceso formativo de la serie literaria infantil cubana, durante el período de constitución progresiva de la nacionalidad, ha de observar cómo, en los años iniciales de la segunda mitad del siglo XIX, ya se evidencia el auge de una literatura que cumple con una función específica dentro de la vida social, donde ocupa un lugar revelante en la preparación del horizonte ideológico y estético de las sucesivas generaciones de cubanos que, como José Martí, emprenden —en la esfera de la política y la cultura— la definitiva liberación del dominio cultural español y la necesaria consecución de la identidad nacional.

A través del largo período constitutivo de la serie para la infancia de la Isla, anterior al natalicio de ese niño de La Edad de Oro, los escritores han ido recreando géneros, motivos y asuntos tomados de la tradición literaria criolla, por la existencia de determinada densidad cultural que permite establecer una intratextualidad propia en las letras cubanas de ese momento, cuya resonancia no desatiende José Martí cuando se permite renovar el discurso romántico que le precede. Ello denota su reconocimiento de pertenencia a una literatura nacional, y del rico acervo de la cultura española que le sirve de savia reproductora.

INTRATEXTUALIDAD EDUCACTIVA Y GENEROS LITERARIOS

Por otra parte, de acuerdo con la plataforma programática de los encargados de diseñar los textos didácticos que luego se instrumentan, sobre todo, en los colegios privados de la Isla, desde la década del cincuenta es posible apreciar una verdadera especialización en la literatura para la enseñanza de los niños y jóvenes cubanos, que atiende, tanto a la graduación de los conocimientos según los distintos niveles de aprendizaje de la lectura, como a la formación integral de los educandos, con vistas a su utilidad y desenvolvimientos sociales. Un aspecto importante dentro de los presupuestos epocales, para la escritura de los libros de texto, es la aplicación consecuente del sistema explicativo en su fundamento teórico-práctico, que introduce José de la Luz y Caballero en las escuelas primarias de la década del treinta.

Cuando se estudie la diversidad de materiales educactivos que recibe el sector poblacional medio al que pertenece ese niño de La Edad de Oro, enseguida aparecen los cuadernos que instruyen a los escolares en las buenas costumbres y reglas de urbanidad, al igual que otros dedicados a divulgar la doctrina cristiana, a tenor de los valores establecidos y los intereses de la clase dominante. Sin embargo, a diferencia de los volúmenes difundidos en la Isla por la metrópoli, las mejores muestras de este tipo de literatura religiosa escrita en Cuba son mucho más amenas: se integran la poesía y la narración para ofrecer escenas de la historia sagrada, y se procura diseñar un discurso que motive la lectura.

Los libros de lectura, basados en los principios metodológicos del sistema explicativo, son los portadores, durante la etapa, de nuevas propiedades que posibilitan la evolución de la serie hacia un estadio superior, pues ellas contribuyen a quebrantar las normas prevalecientes en la literatura didáctica de la década anterior.

La narrativa, género jerarquizado en dichos volúmenes, emplea el método costumbrista en la búsqueda de una relación identificadora entre el niño y su entorno, para lo cual el escritor, en textos breves, concebidos de ese modo, con el fin de mantener la atención infantil, generalmente ofrece una información variada y amena sobre temas diversos. Libra así al discurso de los diálogos aleccionadores y del exceso de didactismo, propios de esa literatura hasta entonces.

Desde el punto de vista lingüístico, los cuadros de costumbres, que son leídos en estos libros por niños como José Martí, empiezan a nutrirse de cubanismos y de expresiones del habla popular, en un afán por fijar un código típicamente criollo, que se distinga de los giros castizos y del lenguaje peninsular.

El estilo narrativo se define por su limpieza sintáctica y abundantes descripciones, por un tono lírico coloquial, así como por recursos poéticos afines con el universo infantil, siempre con un vocabulario adecuado a las edades del destinatario. Como se ve, esta especialización del discurso literario para la infancia se ha ido despojando paulatinamente de la concepción del niño como un proyecto de hombre, capaz de alcanzar un conocimiento enciclopédico.

Desde el punto de vista estructural, el signo evolutivo básico radica en la conformación de un relato que, sin franquear del todo los límites de la estampa, adelanta elementos de la acción y la trama, anunciadores de algunos rasgos constitutivos del cuento como género futuro de la literatura nacional.

Otro cambio significativo se opera en la concepción de los diálogos. El método heurístico, heredado e la fórmula tradicional de preguntas y respuestas, propio del catecismo, se desautomatiza con la creación de verdades “conversaciones” que, por un lado, concatenan las distintas viñetas, a partir de motivos finales de un diálogo, introductorio del asunto a tratar en el siguiente; y, por otro, cuando la acción se brinda a través del coloquio, la voz del adulto funciona como un narrador, y el niño se convierte en personaje activo de la anécdota, con lo cual se conforma un “cuento” breve, que tiene su origen en una situación trivial y se transforma en un texto de perdurables valores humanos y artísticos. Así, el discurso conserva cierta unidad composicional que colabora con el carácter estético de la narración.

EL NIÑO MARTI, LOS COLEGIOS CUBANOS Y SU VIAJE A ESPAÑA

A fines de la década del cincuenta, cuando José Martí se estrena, en el curso 1859-1860. como alumno de un colegio habanero, ubicado en el barrio de Santa Clara, donde su padre se desempeña como celador, el diseño de los libros de lectura denota, no sólo la remodelación del principio dosificador de la información y el conocimiento, de acuerdo con los niveles de recepción según la edad, sino también el valor que ya se le otorga al texto en tanto discurso artístico. En ello participa la ganancia de una conciencia productiva que unifica la capacidad pedagógica del maestro con la estrictamente literaria.

Durante los años en que ese niño de La Edad de Oro asiste a la escuela primaria ya el libro de lectura, principal portador de la serie infantil cubana, ha atravesado por un proceso evolutivo que va, desde la absolutización —en los inicios— de su carácter utilitario, al servicio de una enseñanza dogmática y regida por los presupuestos didáctico-moralizantes, hasta la concepción de un texto integral que jerarquiza la función estética de la obra de arte, para la consecución de una lectura placentera, adecuada al horizonte de expectación y experiencia vital del pequeño lector, lo cual asegura la realización de la capacidad polivalente del hecho literario.

Ahora bien en junio de 1857, dos años antes de asistir a su escuela de barrio, el niño de La Edad de Oro se traslada con sus familiares a España, donde radican hasta junio de 1859, debido a una repentina enfermedad de su padre don Mariano. Poco se conoce de esta primera etapa de su infancia, sin embargo, el investigador Juan Losada extrae de ella algunos aspectos de sumo interés, en su libro Martí, joven revolucionario (1969), que deben entrarse a considerar de inmediato:

Cuando Martí viaja a en 1857, con sus padres, a Valencia, cuenta con cuatro años de edad, que es precisamente el momento en que se inicia por los niños una nueva actividad intelectual de su desarrollo, En el niño se desencadena una brusca y activa curiosidad por las palabras. Ya no le basta con las palabras que otras personas le suministran. Ahora, las demanda activamente. El vocabulario crece ampliamente. El niño entra en la edad de las preguntas. Exige información sobre cada cosa nueva. Precisamente en Martí, este proceso se activa inusitadamente, al correlacionarse con su viaje a España. Los preparativos del viaje, el prolongado crucero del barco, el imponente océano Atlántico, los contrastantes paisajes españoles, la ciudad en la que viven por dos años, las costumbres y normas de vida del lugar, el regreso, estimulan a Martí, no sólo el desenvolvimiento del habla, sino que condicionan activamente su atención y su percepción.2

Es probable que el primer contacto de ese niño de La Edad de Oro con la literatura didáctica infantil que se produce en la Isla por entonces tenga lugar entre los ocho y nueve años,3 en el colegio San Anacleto, sito en la calzada de la Reina, número 59, que dirige Rafael Sixto Casado y Alayeto desde el 13 de setiembre de 1857, y al que asiste José Martí, en sus inicios como estudiante, durante el curso escolar de 1861 a 1862. aunque su matrícula puede ser de un año antes, a juzgar por la cesantía que recibe su padre el 24 de octubre de 1860, quien pierde el cargo de celador del barrio de Santa Clara, por haber violentado algunos requisitos de su empleo,4 según demuestra Emilio Roig de Leuchsenring, en su documentado ensayo Martí en España, que se publica en 1938. Seguramente ésa es una de las razones por las cuales el niño se traslada rápidamente a otro colegio, a instancias de sus familiares.

Este cambio posibilita la apertura y el enriquecimiento de su experiencia vital y cognoscitiva, al ampliarse el universo de sus lecturas y relaciones sociales, más allá del estrecho marco en el que se ha venido desenvolviendo el pequeño, entre su escuela anterior y el hogar, con unos padres “honrados aunque de poca inteligencia e instrucción”,5 tomando en cuenta los criterios de su amigo y condiscípulo Fermín Valdés Domínguez, recogidos en su testimonio Ofrenda de hermano.

Cuando José Martí comienza la enseñanza elemental, todavía rige en el país el “Plan General de Instrucción Pública para las Islas de Cuba y Puerto Rico”, que, a pesar de ser redactado en 1842, se aprueba por real Orden del 27 de octubre de 1844, y se instrumenta en 1846, luego de producirse la centralización educacional, a través de la cual la metrópoli consolida su dominio ideológico, sobre todo, en las escuelas gratuitas. La puesta en práctica de esa medida coactiva tiene como resultante el cese en sus funciones de la sección de Educación de la Sociedad Económica de Amigos el País, la que se sustituye por la Junta de Inspección de Estudios, integrada por doce miembros fieles a la Corona española.

Contradictoriamente, la centralización de la enseñanza acentúa la labor patriótica de los colegios privados, muchos de ellos encabezados, en sus elencos, por prominentes figuras de la intelectualidad cubana más progresista, que fungen como educadores en distintos puntos de la Isla, a partir de los últimos años de la década del cuarenta: José de la Luz y Caballero, Juan Clemente Zenea y Anselmo Suárez y Romero (La Habana); Antonio Guiteras, Cirilo Villaverde y Eusebio Guiteras (Matanzas); Gaspar Betancourt Cisneros (Puerto Príncipe); José María Izaguirre (Bayamo); Juan Bautista Sagarra (Santiago de Cuba). Estos escritores antes mencionados proveen, en su mayoría, los textos que se van a aplicar en las escuelas nacionales. Gracias a su quehacer se observa un punto de giro en el plano ideotemático y composicional de los libros que conforman la literatura instrumental cubana de la segunda mitad del siglo XIX.

EL PRIMER PERIODICO INFANTIL CUBANO Y EL NIÑO MARTI

Antes de finalizar la década del cincuenta, en 1858, empieza a editarse el Álbum de los Niños, primer periódico infantil insular, dirigido por Manuel Zapatero, español radicado en la Isla, quien lo publica por entregas, todos los sábados, de 5 a 6 de la tarde, en la imprenta La Habanera, ubicada en la calle de Aguacate no. 62, con el objetivo de que sirva como opción literaria para la infancia criolla, en los ratos libres del fin de semana.

Esta revista de pequeño formato y con 16 páginas sale regularmente durante cuatro años, y, desde su primer número, el director explica ¡A los niños de ambos sexos” los propósitos de su empresa y las características generales de su publicación, con el fin de establecer una comunicación diáfana, un diálogo amistoso entre el redactor y los suscriptores del periódico:

El Álbum de los Niños vendrá a formar un libro anual, que será como el eco de la más pura amistad para todos y para cada uno de vosotros: por eso es que, estando yo precisado a dirigiros los artículos que mi pobre trabajo produzca, será con el nombre de “Vuestro amigo”, elegido por mí con el deseo de que me lo deis, así como el placer con que espero que acogeréis con la franca y candorosa gratitud de vuestros corazones los sentimientos del mío.6

El plan temático y genérico de esta publicación que concibe Manuel Zapatero para la infancia cubana es bastante amplio, pero sus propuestas ideoestéticas no rebasan todavía el conjunto de valores socialmente establecidos, si se analizan los materiales incluidos en sus 154 entregas, hasta el 4 de mayo de 1861, fecha de su último número.

Abundan en las páginas de su Álbum…, las estampas costumbristas, las narraciones didáctico-moralizantes y las reglas de urbanidad, fábulas y poesía de variada índole, adivinanzas y pasatiempos, pequeñas biografías de niños y hombres célebres, diálogos aleccionadores entre un padre y su hijo, versiones de algunos cuentos de hadas escritos por Charles Perrault (“El sombrerito rojo”, del 5 de enero, y “Los tres deseos”, del 4 de mayo de 1861, respectivamente), artículos de divulgación científica y cosmografía, lecciones de historia sagrada y mitología, trabajos de expresión literaria infantil, traducidos de revistas francesas como Le Journal des Enfants, y otros originales, que son enviados por los directores de algunos colegios de la capital.

Y he aquí uno de los datos más curiosos e interesantes de la mencionada publicación que dirige Manuel Zapatero. Desde el número 8, correspondiente al segundo semestre de 1859, el editor, interesado en promover la lectura de su periódico y con vistas a ganar un mayor número de suscriptores, estimula el surgimiento en sus páginas de una nueva sección, “Emulación al estudio y premio a la aplicación”, en donde “aparecerán periódicamente los nombres de los niños que sobresalgan por sus esfuerzos en cada clase”;7 y enseguida empiezan incluirse en el Álbum… los listados que envían algunas escuelas de la capital, suscritas por esa fecha al periódico de Zapatero.

A este pequeño grupo de centro docentes se suma el colegio San Anacleto, cuando su director Rafael Sixto Casado permite la divulgación, desde el número 19, relativo al primer semestre de 1860, del “Cuadro calificativo de los alumnos distinguidos por su aplicación y buena conducta en el mes de abril anterior”, y a partir de entonces es muy común encontrar en las páginas de la revista infantil las referencias a algún hecho particular ocurrido en esa escuela primaria o los logros individuales de su estudiantado, durante los ejercicios académicos que en él tienen lugar cada año.

Por otro lado, se establece tal compenetración entre el redactor del Álbum de los Niños y los colegios suscritos al mismo, que el propio Manuel Zapatero asiste a los exámenes de fin de curso, y llega a comentar, gozoso de los resultados que observa en ellos, en uno de los trabajos que dedica “A los niños, nuestros queridos lectores”, correspondientes al número 26 del segundo semestre de 1860:

Yo no necesito recordar más, que lo que he presenciado en el Colegio de San Anacleto, y estoy persuadido que en este como en el otro y en cualquiera de los que tan dignamente están dirigidos en esta capital, hay de que rebose el agradecimiento en el corazón de cada niño, que así se mira compensado de sus esfuerzos; de los mismos que han de llevarle al mayor bien de esta vida. ¿Quién de ellos no se siente henchido de ese entusiasmo creador a que aludió un benemérito y entendido profesor, a quien con tanta complacencia oí el colegio citado? Sí, amiguitos míos, ancha y gloriosa es la senda que os presenta en este siglo, tanto como él ofrece al que quiere, al que es dócil en la blanda e ilustrada marcha de la enseñanza actual, al que capaz es de sentir los estímulos de la emulación y del entusiasmo, que tan bien podeis seguir, de profesores como el que he citado y en cuyo sentir, sino tan bien lo sabe explicar, está perfectamente de acuerdo.

Vuestro Amigo.8

Como puede verse, este periódico circula entre los pequeños y los educadores cubanos, ávidos de hallar lecturas amenas para las horas y los días de asueto. Aunque su publicación se extiende sólo hasta el 4 de mayo de 1861, con seguridad, José Martí entra en contacto con algunas entregas del atractivo semanario habanero, cuyo emblema se consigna en el grabado anunciador de cada volumen semestral: “Amor a Dios, a nuestros semejantes y al trabajo.” El criterio anterior llega avalado por el hecho de que la revista se distribuye en el propio colegio donde comienza a estudiar, en 1861, el niño de La Edad de Oro, además de tomar en consideración que en los años en que éste se matricula en la citada escuela primaria, la misma cuenta ya dentro de su mobiliario con una biblioteca escogida con más de 850 títulos, y en la cual puede hallarse una colección parcial o completa de los seis tomos del Álbum de los Niños, encuadernada con las entregas de cada semestre.

Conviene agregar que la publicación es recomendada por la Junta de Inspección de Estudios, según se consigna en el número correspondiente al sábado 7 de julio de 1860:

COMISIÓN PROVINCIAL DE INSTRUCCIÓN PRIMARIA

El Excmo. Sr. Gobernador Superior, Vice-Real Protector, de conformidad con el dictamen de la Excelentísima Inspección de Estudios, se ha servido disponer que por esta Comisión se recomiende a los directores de Colegios y Escuelas de instrucción primaria, el “Álbum de los Niños”, publicado por el Sr. D. Manuel Zapatero, como texto útil auxiliar de que pueden valerse para la enseñanza en el ramo de lectura, para servir también de premio y recompensa a los alumnos que lo mereciesen. Y en virtud de acuerdo de la Comisión Provincial, en Junta ordinaria celebrada el día de ayer, para general inteligencia de los expuestos directores, se publica por este medio. Habana y Abril 17 de 1860.-Dr. Juan Francisco Chaple, Vocal Secretario

(Copiado de la Gaceta Oficial, n.53)9

Es muy probable también que el conocido periódico, ya en forma de libro, se instrumente por esos días en las clases de Lectura, o que sirva de obsequio a los alumnos que obtienen banda y diploma dentro de la distribución de premios realizada después de la conclusión de los exámenes generales del colegio San Anacleto, entre los que se encuentra el pequeño José Martí, quien resulta premiado en el curso escolar 1862-1863.

Todo esto puede haberse quedado en el marco de las conjeturas del investigador, de no hallarse la siguiente viñeta, escrita “por su Amigo”, y aparecida en el tomo segundo del Álbum de los Niños, formando parte de la entrega 23, de 1859:

CARIDAD DE UN NIÑO

Paseaba una señora con su hijo, niño de cinco años de edad, y en el paseo se encontraron con un mendigo, que parecía muy triste y enfermo, y andaba descalzo. Dejó el niño adelantar a su madre, sentóse, y quitándose sus zapatitos se los presentó al mendigo diciéndole “Buen hombre, tome V. Mis zapatos para que no ande con los pies en el suelo” ¡Ojalá hubiera muchos niños que estuvieran siempre dispuestos a dar alguna cosa a los pobres!10

¿Tiene conocimiento José Martí de este breve y aleccionador pasaje, localizado en las páginas de la primera publicación periódica infantil cubana? Seguramente. Pero su importancia no radica en la evidente semejanza que se establece entre la viñeta citada con anterioridad y el núcleo del conflicto desarrollado en “Los zapaticos de rosa”, sino en la censura implícita que se revela en ese cuento poético, concebido por Martí para el tercer número de su revista mensual La Edad de Oro, en donde el redactor critica la caridad de las familias ricas, como una de las virtudes teologales que se le inculcan al niño americano, dentro de un código estructurado a partir de conductas prestablecidas, en torno al deber ser del hombre en una sociedad clasista, regida por presupuestos religiosos cristianos, que sólo pretenden la conservación del status quo y la permanencia de la plataforma ideológica de la clase dominante.

Cuando el redactor de La Edad de Oro extrae de la tradición literaria insular uno de los motivos más recurrentes en la literatura infantil decimonónica, no busca recrearlo a través de otra anécdota similar, sino que se permite esta cercanía temática, con el objetivo de promover una nueva lectura, la revisión generacional e ideológica de una de las posturas burguesas más repudiables desde el punto de vista social y humano. No en balde, el escritor de la revista opone las conductas infantiles de Bebé (la bondad) y Pilar (la caridad), para mostrar, en un evidente contrapunteo de actitudes, cuáles son las verdaderas virtudes del hombre en relación con sus semejantes. De ese modo, José Martí va conformando en la infancia cubana un distinto código ético-social, que pugna con los valores instituidos por el régimen colonial, desde que defiende sólidos criterios acerca del desenvolvimiento libre y solidario del ser humano en la sociedad, en contra de todo principio de falsa moral, sumisión y obediencia política.

MATERIAS Y LIBROS ESTUDIADOS O LEIDOS POR EL NIÑO MARTI

En La enseñanza popular en Cuba desde el descubrimiento hasta nuestros días (1926), Santiago García Spring menciona las materias que se imparten en los colegios primarios entre 1846 y 1862, cuya distribución es como sigue: Religión Cristiana, Moral, Lectura, Escritura, Aritmética y Nociones de Gramática Castellana.11 Sin embargo, aunque el investigador reconoce la sistematización de estas asignaturas correspondientes al plan aprobado por real Orden de octubre de 1844, también apunta que “en muchas escuelas elementales se enseñó Geografía, Dibujo y Aritmética, más allá de la extensión citada, según la capacidad y entusiasmo de los maestros.”12

Esto coincide en líneas generales con las materias relacionadas por Emilio Roig de Leuchsenring, cuando explica las razones por las cuales el pequeño José Martí interrumpe sus estudios elementales, en abril de 1862, para residir por un tiempo en el Partido Judicial de Hanábana, en Matanzas, donde su padre ha de ocupar el cargo de capitán juez pedáneo:

…don Mariano no ideó para su hijo más porvenir que el oscuro y mezquino empleo de escribiente en la celaduría que él desempeñaba; de ahí que a los diez años, sabiendo ya escribir correctamente y con nociones de gramática, aritmética, geografía, historia y literatura, lo retiró del Colegio San Anacleto, de Rafael Sixto Casado, donde se educaba y lo llevó a su lado, a la celaduría del barrio.13

Al regresar a La Habana, en diciembre, hace unos tres meses que se ha estrenado el curso escolar de 1862-1863, en su colegio de la calzada de la Reina, número 59, pero José Martí, quien está próximo a cumplir los diez años, consigue, no sin esmero, igualar sus conocimientos con los de sus condiscípulos, y se coloca entre los primeros expedientes de su clase.

Por ese tiempo entra en vigor en la Isla el real decreto de 1863, que tiene su base en la “Ley de Instrucción Pública de 1857”, promulgada en España por Claudio Moyano, a cargo del Ministerio de Fomento, el cual se apoya a su vez en los planes educacionales franceses.

Esta medida es promovida en Cuba a instancias del ministro de Ultramar don José Gutiérrez de la Concha, quien posibilita, a partir del 15 de julio de 1863, la fundación de los institutos de La Habana, Matanzas, Puerto Príncipe y Santiago de Cuba.

Según el nuevo régimen de estudios, la primera enseñanza se divide en elemental, que contempla las materias Doctrina Cristiana y nociones de Historia Sagrada, acomodadas a los niños; Lectura; principios de Gramática Castellana, con ejercicios de Ortografía; principios de Aritmética, con el sistema legal de medidas, pesas y monedas; breves nociones de Agricultura, Industria y Comercio; y en superior, con las asignaturas siguientes: Principios de Geometría; Dibujo Lineal y de Agrimensura; rudimentos de Historia y Geografía, especialmente de España; nociones generales de Física y de Historia Natural, acomodadas a las necesidades más comunes de la vida, además de una prudente ampliación de las materias ya anunciadas en la elemental.

Entre 1863 y 1864, durante el último curso escolar que matricula el niño José Martí en el colegio San Anacleto, como parte de sus estudios elementales, traba amistad con Fermín Valdés Domínguez. Según Juan Losada, en ocasiones, los muchachos “se enfrascaban en ardientes discusiones, ya que Valdés Domínguez es partidario de los esclavistas sudeños de los Estados Unidos y, Martí, por el contrario, defiende el Norte industrial. La guerra de Secesión lleva ya 3 años de continuados combates, pues ha comenzado en 1860.”14

El propio autor de la investigación Martí, joven revolucionario es el encargado de aportar el dato de que, por esta fecha, el niño de La Edad de Oro ha realizado ya una lectura detallada e inteligente de la novela antiesclavista norteamericana La cabaña del tío Tom, o La vida entre los humildes, que su autora Harriet Beecher-Stowe, publica en 1852. Es probable que el pequeño alumno de San Anacleto tenga noticias del otro libro sobre el mismo tema, Una clave para la cabaña del tío Tom, editado por la escritora antes mencionada un año después de la salida del primero.

Luego, Juan Losada aclara cómo el cambio que se opera en los interese de lectura del niño José Martí constituye la mayor evidencia de su inclinación consciente y paulatina hacia los contenidos realistas y el plano ideotemático de las obras literarias de ese género, con vistas a ser valorada convenientemente e incorporados enseguida a su experiencia vital y cognoscitiva:

El interés de Martí por esta novela nos muestra que sus preferencias en las lecturas se orientan hacia aquellas que ofrecen sucesos reales. A esta edad, esto es natural, ya que el muchacho presta una atención preferente al contenido de la lectura, quedando relegada a un plano secundario la forma literaria. Los problemas tratados y desarrollados en la novela “La cabaña del tío Tom” vienen a ampliar y reforzar en un plano imaginativo y cognoscitivo las experiencias vividas por Martí en el Hanábana.15

En cuanto a los libros, el “Plan de Estudios correspondiente a 1863” establece que las distintas asignaturas se han de aprender en los textos señalados por el Gobierno. En el citado reglamento, también se recoge que la Religión es necesario enseñarla por el Catecismo de la Diócesis, y la Gramática de la Real Academia constituye el volumen obligatorio de ese ramo.

La Capitanía General, por su parte, publica sistemáticamente, en los principales periódicos de la capital, la relación de textos didácticos recomendados por la Junta de Instrucción de Estudios, o considerados como “forzosos” para aplicarse en la enseñanza de las diferentes materias en los colegios públicos y privados de Cuba.

LA ESCUELA ELEMENTAL CUBANA Y EL NIÑO JOSE MARTI

Al no contarse con un listado de los libros que se incluyen en los planes lectivos de las escuelas elementales donde estudia José Martí entre 1859 y 1864, se han analizado entonces las sucesivas recomendaciones de la Junta Superior de Instrucción Pública con respecto a los volúmenes que deben incluir los maestros primarios criollos en sus clases, así como los folletos relativos a los Elencos y Exámenes de centros docentes como El Salvador (La Habana) y La Empresa (Matanzas) —verdaderos pilares de la educación en ese tiempo—, por contener una distribución detallada y explicada de los materiales empleados durante cada año escolar.

A partir del criterio seguido en este caso, cuya base radica en el examen comparativo de ambos listados con los que aprueba la citada junta instructiva, se puede concluir que, en líneas generales, coinciden el currículo de asignaturas y los libros indicados en el plan lectivo de cada clase. Por ende, es de suponer que esos mismos cuadernos se estén utilizando también en el colegio San Anacleto, donde estudia José Martí desde 1861 y hasta 1864, aunque no deba pasarse por alto la facultad que tiene Rafael Sixto Casado, como director de ese centro estudiantil, de incluirlos todos o hacer enmiendas y otras adiciones, lo cual sale ya del límite de lo posible, no contando —como ocurre— con documentos que prueben la veracidad de estas suposiciones.

Se han escogido sólo los textos correspondientes a las materias de Religión y Lectura, por constituir el núcleo fundamental para la enseñanza de la Literatura en las escuelas primarias, en donde se aplica consecuentemente el método explicativo dentro del aprendizaje de la lectura.

Por lo mismo, han de considerarse los libros publicados en esa fecha por las imprentas cubanas que rápidamente comienzan a usarse en los colegios insulares e inciden en el modelado de la conciencia y el horizonte de expectación de los niños y adolescentes criollos.

LAS CLASES Y LOS LIBROS EN LA ENSEÑANZA CUBANA DE 1853 A 1869

He aquí la relación de los textos leídos por la infancia de la Isla entre 1853 y 1869, en las cinco clases correspondientes a la enseñanza primaria:

Clase Primera

Religión

Catecismo, preparado pro Eusebio Guiteras.

Historia Sagrada, de Tomás de Iriarte. Desde la creación hasta Jesucristo.

 

Lectura

Cartilla, de Eusebio Guiteras.

Librito de los cuentos y las conversaciones, de Cirilo Villaverde. Los niños aprenden el significado de las palabras y componen con letras de cartón oraciones fáciles, haciendo de ellas un ligero análisis gramatical.

Miscelánea infantil, de Juan Bautista Sagarra. Dos primeros libros de la serie de Mándevil.

Primer libro de lectura, de Eusebio Guiteras.

 

Clase Segunda

Religión

Catecismo, de Jerónimo de Ripalda. Oraciones explicadas.

Historia Sagrada, de Tomás e Iriarte. Hasta la salida de los israelitas de Egipto y la división de las tribus.

Génesis.

 

Lectura

Catecismo, del abate Claudio Fleury. Los niños dan cuenta de alguna parte del texto y el significado de las palabras.

Libro de los niños, de Francisco Martínez de la Rosa.

Salterio de la infancia, de Juan Bautista Sagarra y Blez.

Continuación de la Miscelánea Infanti, de Juan Bautista Sagarra.

Tardes en familia, de Pío Campuzano.

Libro segundo de lectura, de Eusebio Guiteras.

 

Clase Tercera

Religión

Catecismo y exposición breve de la Doctrina Cristiana, de Jerónimo de Ripalda.

Historia Sagrada, de Tomás de Iriarte. Hasta Salomón y el gobierno de los reyes.

Cuadro de la vida de Jesucristo y conformidad con el Evangelio, traducción del francés por José Manuel de Aguirre.

Los libros poéticos de la Santa Biblia, traducidos al verso castellano por T. J. González Carvajal.

 

Lectura

Historia Sagrada, de Tomás de Iriarte.

Educación de la infancia, de Pedro Blanchard. Los niños explican lo que leen y el significado de las palabras.

Dioscórides el huérfano o historia de un joven herrero, de Juan Bautista Sagarra y Blez.

El pasatiempo, de Juan Bautista Sagarra.

El aguinaldo de las niñas de Santiago de Cuba, de Juan Bautista Sagarra.

Libro tercero de lectura, de Eusebio Guiteras.

Tres cuentecitos o sean las virtudes teologales, de Juan Bautista Sagarra.

Fábulas morales, de Francisco Javier Balmaseda.

Colección de artículos, de Anselmo Suárez y Romero.

 

Clase Cuarta

Religión

Catecismo explicado de la doctrina cristiana, de Santiago José García Mazo.

La Santa Biblia, traducida al español de la Vulgata latina, por el padre Scio.

Historia Sagrada, de Tomás de Iriarte.

Catecismo de la doctrina cristiana, o compendio del catecismo grande, del padre Amado Pouget.

Los santos Evangelios, traducción de fray Anselmo Petite.

Libro de los Proverbios.

Catecismo y exposición breve de la Doctrina Cristiana, de Gerónimod e Ripalda.

Catecismo histórico o compendio de la Historia Sagrada y de la Doctrina Cristiana, para instrucción de los niños, con preguntas y respuestas, del abate Claudio Fleury.

Breve resumen de los libros históricos del viejo y nuevo Testamento, de José Serrano.

 

Lectura

Fábulas en verso castellano, de Félix María Samaniego.

Álbum del Yucayo, de Francisco Javier de la Cruz y Salvador Condaminas.

Catecismo explicado de la Doctrina Cristiana, de Santiago José García Mazo.

Historia de la Isla de Cuba, de José María de la Torre. Los niños estudian los principales acontecimientos y personas notables.

Fábulas literarias, de Tomás de Iriarte.

Historia Sagrada, de Tomás de Iriarte.

El padre y sus hijos, de Juan Bautista Sagarra.

Dioscórides el huérfano o historia de un joven herrero, de Juan Bautista Sagarra.

Tres cuentecitos o sean las virtudes teologales, de Juan Bautista Sagarra.

Historia de España, de Tomás de Iriarte.

 

Clase Quinta

Religión

Los santos Evangelios, traducción de fray Anselmo Petite. Principales parábolas. Los niños dan razón de la parte dogmática e histórica.

Historia Sagrada, de Tomás de Iriarte.

Catecismo explicado de la Doctrina Cristiana, o compendio del catecismo grande, del padre Amado Pouget.

La Santa Biblia, traducida al español de la Vulgata latina, por el padre Scio.

 

Lectura

En cualquier libro de prosa o verso, seleccionado al efecto. Los niños explican bien el sentido de las palabras y frases.

Historia de España, de Tomás de Iriarte.

Manual de urbanidad y buenas maneras, de Manuel Antonio Carreño. Es el texto fijo.

Historia de la Isla de Cuba, de José María de la Torre.

Historia de Roma, de José María de la Torre.

Como puede apreciarse, la mayoría de los textos son importados por la metrópoli o reimpresos en la Isla, pues con ello asegura el predominio colonial dentro de la educación cubana. Por ende, el didactismo y el afán pedagógico no sólo están encaminado a la enseñanza de la lectura y otros aspectos del saber, sino también a criterios de conducta social, de acuerdo con los intereses de la burguesía criolla, por un lado, y de la Corona, por el otro. La doctrina del catolicismo, de igual manera que la historia, se encaminan a la conservación de una conciencia ideológica en concordancia con los valores hegemónicos. De ahí se desprende la prioritaria función axiológica preceptiva de la literatura instrumental en estos años.

Sin embargo, con la agudización de las contradicciones entre criollos y peninsulares, una parte de la intelectualidad cubana siente la urgencia de perfilar definitivamente un sistema de valores en oposición a las determinaciones metropolitanas. En ese grupo se encuentran algunos maestros de avanzada, quienes imparten sus clases o están vinculados de forma directa con escuelas privadas del país, y llegan, por tanto, a escribir libros de lectura con una proyección nacionalista, encaminada a la búsqueda de temáticas y asuntos típicos de la realidad insular, y a la actualización de los niños y jóvenes en los conocimientos científicos y culturales más desarrollados del momento.

Por los años en que nace José Martí ya se ha perfilado un tronco literario instrumental propio, que, a pesar de mostrar todavía su filiación a los procedimientos canónicos de la norma española y de no haber rebasado los principios de la enseñanza religiosa oficial, ni los presupuestos didáctico-moralizantes al uso, exhibe indicios de un resquebrajamiento desde los puntos de vista lingüístico, temático y composicional, sobre todo, en el método de las preguntas y respuestas heredado del catecismo, y en los asuntos típicamente nacionales, debido al interés manifiesto de sus autores por la naturaleza insular y por elementos caracterizados de lo cubano.

BASES DEL PROCESO IDEOESTETICO Y DESCOLONIZADOR MARTIANO

De esa manera, han sido esbozadas las bases de un auténtico proceso descolonizador, vinculado a las tentativas que también, en el orden de la cultura, se llevan a cabo en el resto del continente. Si en América Latina este movimiento nacionalista viene precedido por la liberación política y económica de España, en Cuba ocurre a la inversa: la descolonización evidente, en el campo ideostético, prepara las condiciones subjetivas para el choque frontal con el aparato de gobierno y las fuerzas represivas de la metrópoli. Esto demuestra una vez más el carácter activo de la cultura en la vida social.

José Martí pertenece precisamente a la primera generación formada en los textos didácticos de creación nacional, que surgen como una necesidad productiva y estética lógica de la escuela cubana, y más aún, de la serie literaria infantil, como consecuencia de una educación patriótica, que se convierte en el factor fundamental de la determinación de las dos tendencias existentes por entonces en los centros estudiantiles del país: una oficial, impuesta por España, cuya finalidad es “hacer almas y brazos dóciles”, enseñar para la esclavitud colonial; y otra, al margen de la cultura metropolitana y contrapuesta a ella, que pretende “hacer almas y brazos libres”, mirar hacia la identidad propia, según lo define Emma Pérez Téllez en su Historia de la Pedagogía en Cuba, de 1945.

LIBROS DE LECTURA DE ESCRITORES CUBANOS LEIDOS POR MARTI

La lista de textos citada con anterioridad se torna altamente significativa, por cuanto en ella también aparecen reflejados los libros de lectura pertenecientes a los escritores más destacados de esta modalidad genérica dentro del panorama de la literatura instrumental del siglo XIX: Juan Bautista Sagarra, Cirilo Villaverde, Francisco Javier de la Cruz y Salvador Condaminas, José María de la Torre, Eusebio Guiteras, Francisco Javier Balmaseda y Anselmo Suárez y Romero, entre otros.

A los efectos del desarrollo de la serie literaria infantil criolla, la labor de Juan Bautista Sagarra adquiere notable importancia desde el punto de vista creativo y editorial, si se toman en consideración que es él quien inicia y alienta todo un movimiento a favor de la bibliografía didáctica nacional, cuando funda la “Librería de los Niños Cubanos”, serie de cuadernitos de lectura que viene a cubrir la carencia de auténticos textos graduados, capaces de contemplar las necesidades de ampliación del horizonte cognoscitivo y estético de la niñez insular, a propósito de lo que unos años antes comenta Domingo del Monte, en su informe de 1837 a la sección de Educación de la Sociedad Patriótica de la Habana.16

IMPORTANCIA DE JOSE DE LA LUZ Y CABALLERO CON SAGARRA Y BLEZ

Si José de la Luz y Caballero renueva los métodos educativos, Sagarra, proporciona a la infancia y juventud de la Isla, dentro de las limitaciones epocales, las lecturas adecuadas para su formación. Es por eso que el director del colegio El Salvador, en un discurso pronunciado ante sus discípulos, con motivo del acto por el fin de curso, en diciembre de 1859, llega a reconocer públicamente:

A veces —y disimúleseme que lo diga— se me cita como al más entusiasta de la enseñanza; justicia es decir que en Santiago de Cuba hay una antorcha que alumbra con rayos más luminosos: hablo, señores de mi querido amigo Juan Bautista Sagarra, “la lumbrera de Santiago de Cuba”; me congratulo de decirlo aquí, ante tanta concurrencia, porque al hablarse en Cuba de instrucción, debe ir unido este nombre al de Sagarra.17

Probablemente, los orígenes del quehacer literario de Juan Bautista Sagarra, para la niñez insular, deben hallarse en el nombramiento que le hace la metrópoli, el 22 de setiembre de 1833, a través de la Diputación Patriótica, para que desempeñe las funciones de revisor de las obras, libros y folletos que se introduzcan en Santiago de Cuba por esa época. Oportunidad que propicia la actualización del escritor en los textos más sobresalientes del período en otras latitudes, mientras el mismo observa, con pasmosa incertidumbre la carencia de cuadernos destinados a los pequeños criollos. Se da entonces a la tarea de prepararlos.

La “Librería de los Niños Cubanos” es el primer intento en castellano de crear una colección de obras dirigidas a divulgar entre los muchachos la historia y el acervo cultural y científico de los pueblos. Los antecedentes foráneos inmediatos en este sentido son los siguientes: en Inglaterra, Librería Juvenil (1750), de John Newberry; en Alemania, Biblioteca Infantil, concebida por Joachim Heinrich Campe, muy conocido en la Isla por la versión española de El Robinson de los jóvenes (1799), realizada por el fabulista Tomás de Iriarte; y en Francia, la Biblioteca de las Aldeas (1780), de Arnaud Berquin.

Entre 1839 y 1864, respectivamente, Juan Bautista Sagarra. Edita y reedita los diecisiete volúmenes que conforman su “Librería”, diez de los cuales son adoptados como textos de lectura en las escuelas insulares.18 Un buen número de estos materiales están dedicados a la difusión de la doctrina cristiana, mediante la adaptación de leyendas bíblicas, oraciones y relatos que ilustran las virtudes teologales, especialmente concebidos para la recepción infantil. En la búsqueda de instrucción y deleite, el pedagogo —ahora convertido en escritor— parte del presupuesto de que el niño es un proyecto de hombre, el cual mejora su condición moral, religiosa y su conocimiento del mundo a través de las enseñanzas que le ofrece la literatura.

La novedad de este plan didáctico de Sagarra estriba no sólo en la variedad y dosificación de los temas y asuntos abordados por el educador santiaguero, aun cuando ellos no trasciendan las normas morales y cristianas de la época, sino también en el uso gradual y la promoción del sistema explicativo como metódica operacional para el aprendizaje de la lectura en los pequeños que estudian en los textos escritos por el criollo, tales como:

Aguinaldo para las niñas de Santiago de Cuba

Miscelánea infantil (No. 2 de la “Librería de los Niños Cubanos”)

Salterio de la infancia

Continuación de la Miscelánea infantil

Dioscórides el huérfano, o historia de un joven herrero

El pasatiempo (No. 4 de la “Librería de los Niños Cubanos”)

Tres cuentecitos o sean las virtudes teologales

El padre y sus hijos (No. 7 de la “Librería de los Niños Cubanos”)

Se ha visto que es amplia la gama temática y las propuestas estéticas y genéricas del maestro oriental. De ese modo, para el primer nivel infantil, Sagarra conforma los Silabarios de ambos sexos, con un sistema de combinaciones muy apropiado para el aprendizaje de la lectura en corto tiempo. Luego, los Aguinaldos, que contienen fábulas y poesías didácticas, pensamientos y un cuestionario general, que sustituye el procedimiento heredado del catecismo, el mecanismo automatizado de las preguntas y las respuestas al uso, con vistas a facilitar las ventajas del método explicativo. Las Misceláneas presentan un mayor grado de complejidad e incluyen textos breves y sencillos de temáticas diferentes, pequeñas historias y versiones de motivos bíblicos. Los diálogos de El padre y sus hijos ofrecen, en forma de capítulos, valiosa información sobre la naturaleza, la astronomía, la física y la mecánica, junto a un estudio como bases de la virtud y la utilidad del hombre. La noveleta Dioscórides el huérfano o historia de un joven herrero (acogida desde 1851 por el colegio El Salvador, que dirige José de la Luz y Caballero, y luego La Empresa, de Matanzas, y otros centros docentes de la Isla) se dedica a ilustrar los postulados éticos y pedagógicos pretendidos por Sagarra en toda la colección. El pasatiempo afianza la función lúdicra del texto, con el propósito de servir a la recreación del pequeño en los ratos libres o al placer estético, con la inclusión de fábulas, poesías, cuentos, artículos y pensamientos de variada índole. Vale destacar que algunas composiciones se escriben expresamente para este libro, como el poema “A Dios”, de la holguinera Adelaida de Mármol.

Mención aparte merece la primera noveleta juvenil cubana, Dioscórides el huérfano…, con la cual Juan Bautista Sagarra se plantea inspirar el amor al trabajo y a la instrucción. En esa obra de 249 páginas, el creador santiaguero apela a los sentimientos del lector adolescente, quien puede seguir con simpatía las peripecias de un protagonista capaz de vencer las barreras sociales, para adquirir un oficio, mediante la educación. El asunto folletinesco, propio de la literatura romántica, ilustra una tesis altruista: el hombre por la instrucción y el trabajo, puede salvarse de la corrupción y convertirse en un ser útil a la sociedad, postulado pragmático expuesto también en Los clamores del tío Domingo, de 1855, libro concebido por el escritor oriental para la enseñanza del pueblo en general (“Hombres y mujeres, ancianos y jóvenes…, a vosotros me dirijo”),19 dentro de los principios de la moral y la cívica de la burguesía criolla de su tiempo, en cuyo prólogo se expresa:

No os diré: todos los hombres son iguales; porque esto es mentira, y porque no son las quimeras las que se aprovechan, sino las realidades. Pero en cambio, os diré cómo conseguiréis la verdadera y posible igualdad. La verdadera y posible igualdad la conseguiréis con el trabajo, la instrucción y la virtud.

El trabajo es la condición indispensable del hombre.20

Las tres ediciones que alcanza la novela Dioscórides el huérfano o historia de un joven herrero, entre 1851 y 1858, dan prueba de su aceptación por parte de un público juvenil que vive en un mundo férreamente jerarquizado.

La obra de Juan Bautista Sagarra y Blez abre veinticinco años de vida literaria interrumpida, dedicada por entero a la enseñanza de la niñez. Este afán de ampliar el horizonte ético y cognoscitivo de sus lectores constituye el proyecto más abarcador y encomiable del período analizado, labor que emprende el pedagogo santiaguero a través de la redacción de textos que observan los principios estructurales básicos para una correcta recepción según las edades y niveles instructivos correspondientes. Por todo ello, la “Librería de los Niños Cubanos”, al margen de sus determinaciones circunstanciales, es el primer eslabón de un proceso de independencia cultural de la metrópoli española, que alcanza un clímax con la expresión literaria de uno de los niños que se forma bajo el signo de esas lecturas escolares: José Martí, el hombre de La Edad de Oro.

EL SISTEMA EXPLICATIVO, JOSE MARIA DE LA TORRE Y “EL ROBINSON CUBANO”

Otro representante de esta línea de textos que ilustra el sistema explicativo es José María de la Torre. El autor, además de innumerables cuadernos de geografía e historia, prepara tres selecciones de lectura con gran acogida de público: El libro de las niñas…, de 1852, El libro de los niños de la Isla de Cuba y El libro de las poesías y otras composiciones… (1856), las cuales están ordenadas con extractos de obras de escritores clásicos y contemporáneos, que resultan de gran utilidad para una instrucción apegada aún a las normas y modelos peninsulares.

Los textos del geógrafo, historiado, estadista, catedrático y arqueólogo alcanzan la mayor tirada de ejemplares y reediciones de un escritor para niños en todo el siglo XIX —lugar que comparte con el matancero Eusebio Guiteras—, sin embargo, durante esos primeros años de su labor didáctica, el autor no ha perfeccionado su método todavía, por lo que se evidencia una deficiente elaboración del material en sus obras destinadas a la enseñanza de los pequeños, no hallada, por ejemplo, en su libro más importante, El Robinson cubano (1863), donde el maestro compila y resume una serie de volúmenes graduados suyos, muy conocidos por entonces en las escuelas insulares, entre los que se encuentran la Cartilla y silabario bajo un nuevo sistema, y otros, como las selecciones arriba mencionadas.

En el año del nuevo plan de estudios, sale en las imprentas de la capital El Robinson cubano o libro cuarto de lectura, publicado por José María de la Torre bajo el subtítulo de “Obra elemental de educación para los niños y para el pueblo”. Enseguida se adopta como texto en los colegios nacionales como el de San Anacleto.

El asunto del náufrago solitario, de la vida ajena a la sociedad, de la exaltación del individuo y su existencia natural, ha sido acogido con anterioridad por los lectores de los siglos XVIII y XIX, luego de la difusión del original del inglés Daniel Defoe. Después del Robinson Crusoe muchos náufragos rivalizan en la literatura de la época, como es de esperar, por la enorme popularidad que despierta ese asunto foráneo.

La obra de Defoe es reelaborada en Alemania por el pedagogo Joachim Heinrich Campe, quien reduce, en 1779, el texto el novelista británico al Robinson der jüngere (El Robinson de los jóvenes), una historia moral de estructura dialogada, muy propia para la educación de los menores.

La adaptación de Campe es, a su vez, objeto de traducción al castellano por el fabulista Tomás de Iriarte, y aprobada dentro de la Península por el mismo tribunal de fe que, en 1756, censura “por fundamentales razones” la edición original inglesa.

El conocido asunto se introduce en Cuba, cuando la imprenta La Fortuna entrega a la infancia criolla el cuaderno diseñado por José María de la Torre, quien enfatiza en el prólogo que entre su libro y el de Campe sólo existe una analogía y no se trata de una imitación, pues “a lo que parece el ingenioso Campe (…) se propuso hacer ver los recursos que la necesidad obliga a crear al hombre, al paso que mi propósito es que resplandezcan las ventajas de la instrucción sobre la ignorancia.”21 De inmediato, el autor enumera los principales fines de su volumen:

Proporcionar un libro más de lectura, útil y agradable, con aplicación al país.

Inculcar los más sanos principios de religión, moral y sociabilidad, por medio de un ejemplo práctico, de textos de libros sagrados o de pensamientos de autores clásicos, puestos por epígrafes a cada capítulo o intercalados en el cuerpo de la obra.

Inclinar a los niños al estudio de las ciencias y de las artes, mostrándoselas al efecto por el lado más agradable, cual es el de sus aplicaciones, y despojándolas de todo aparato, (…) y nunca a manera de una pedagógica lección didáctica.22

Por otro lado, la estructura de la obrita de José María de la Torre es sugerente y su escritor la modifica externamente en las ediciones de 1864, 1873, y 1884.

En el libro de Joachim Heinrich Campe se presenta a una familia que vive en una casa de campo cerca de Hamburgo. Allí el padre dialoga con sus hijos cada tarde y les va mostrando la historia del conocido náufrago, junto a dosificadas reflexiones éticas y conocimientos generales.

La analogía es evidente: en El Robinson cubano la acción se desarrolla en una quinta señorial del Cerro, durante el siglo XIX, en un ambiente criollo. Al atardecer, los niños y el resto de sus familiares escuchan los cuentos del padre sobre las hazañas de Robinson, además de explicaciones científicas y literarias, consejos morales y principios religiosos. Se hace notable cómo en el cuaderno abundan detalles de La Habana y otros lugares del país, información sobre la vida de los pequeños, las relaciones con sus progenitores y la utilización del tiempo libre.

La edición de 1863 consta de veinticinco capítulos o tardes. En 1873, aparecen sólo veintitrés, pues se han suprimido, por la censura metropolitana, aquellos dedicados a los “cimarrones”, y se incluye un tema para dictado en el apéndice. Todo el contenido está acompañado por ilustraciones de carruajes de la época, lugares e industrias.

El carácter de El Robinson cubano no va más allá del estilo moralizante y pedagógico del momento en que surge. No obstante, a pesar de su similitud con la obra de Campe, su peculiaridad estriba en la atención prestada por José María de la Torre al entorno sociocultural de la Cuba decimonónica, su aplicación a las condiciones reales y ambientales del país, de acuerdo con los postulados de la burguesía criolla.

CIRILO VILLAVERDE Y “EL LIBRITO DE LOS CUENTOS Y LAS CONVERSACIONES”

Bajo idéntico signo ideoestético se presenta El librito de los cuentos y las conversaciones (1847), de Cirilo Villaverde, obra que alcanza dos ediciones ese mismo año y otra una década después.

Esta colección culmina un período de plenitud creadora del autor de Cecilia Valdés, que se viene desarrollando desde 1837, fecha en que se desempeña como maestro en el colegio Buenavista, hasta trasladarse a Matanzas, para trabajar en La Empresa, de 1839 a 1842. Cuando escribe El librito de los cuentos labora como profesor en el Real Cubano, de la capital.

La trayectoria que sucintamente se ha descrito revela algunos elementos de interés. Desde el punto de vista de la literatura infantil, Villaverde no sólo está al tanto de las ideas pedagógicas más avanzadas de la época, sino que su condición de maestro activo lo capacita para determinar las características particulares de su discurso, tomando en cuenta un tipo de lector específico. En el mismo título de la obra se precisa que está dirigida a niños de siete a diez años, en plena edad imaginativa. Este cuaderno puede haberlo leído, seguramente, José Martí cuando comienza a asistir al colegio San Anacleto, a juzgar por el ciclo vital y el nivel a que se destina El librito de los cuentos y las conversaciones, editado por tercera vez en 1857.

Por otra parte, el tiempo que pasa Villaverde en contacto con el grupo de Domingo del Monte le permite actualizarse dentro de las coordenadas culturales del período: el desarrollo de una narrativa social, de raigambre costumbrista en la asunción de tipos, asuntos y ambientes cubanos, pero que adopta una tonalidad romántica afín con las corrientes europeas.

El conjunto de lecturas que brinda Villaverde se distingue por su marcado acento nacional, tanto en la presencia de elementos de la flora, la fauna y el paisaje cubanos, como en el vocabulario, los hábitos y modos de vida infantiles. El autor sólo se detiene en lo foráneo para ampliar los conocimientos del pequeño, con vistas a enriquecer su información, como en el caso de “El cisne”.

El librito de los cuentos y las conversaciones se inicia con cinco estampas, notables por su brevedad y sencillez argumental, que tienen la función de facilitar la aplicación consecuente del método explicativo en los primeros momentos del aprendizaje de la lectura. Una de las viñetas más sobresalientes es ésta:

I

La niña melindrosa

Dedicado a Celina.

Mariquita da que reír a todas sus amigas. Un ratoncito que corra por junto a ella, le hace temblar de horror: una abeja que se pose en su vestido, la pone en un grito. Si una mosca vuela a su cabeza, o zumba en sus oídos, llama a toda la casa en su socorro como si le acometiera un perro.23

Conjuntamente con un marcado propósito reproductor de la realidad inmediata, los textos cubren otra zona de interés propia de ese tipo de literatura: la enseñanza de buenas costumbres y principios morales, dentro de los presupuestos cristianos dominantes. Además de las estampas, el volumen está integrado por otros materiales didácticos elaborados a manera de “conversaciones” (preguntas del niño y respuestas del adulto, según la norma al uso), entre las que Villaverde intercala poemas de asuntos cubanos, religiosos o moralizadores, tales como “La fuga de la tórtola”, de José Jacinto Milanés; “La corrida de patos”, de Ramón de Palma; “El sunsún” (sic), de José Silverio Jorrín; “Maternidad”, de Miguel Teurbe Tolón, entre otros.

Dentro de la incipiente narrativa infantil del período, los relatos del autor de La peineta calada se destacan por su capacidad comunicativa con el destinatario escogido previamente. En general, sus “cuentos” están protagonizados por niños de ambos sexos que muestran virtudes y defectos, a través de una anécdota sencilla y breve, expuesta con cierta ternura y aliento poético, aunque resultan maniqueos por su finalidad didáctico-moralizante; y algunos portan una visión paternalista de la niñez. Pero donde el escritor hace gala de sus mejores cualidades como narrador de la serie es en las “conversaciones”, viñetas que tienen el objetivo de transmitir conocimientos acerca de los más variados temas del mundo físico: el sol, la luna, los truenos y relámpagos, el campo, la pesca, los mamíferos, los reptiles, las aves, y entre ellas, las trepadoras y las de rapiña. Este afán naturalista de Villaverde se ve atenuado a veces por sus convicciones religiosas, aunque eso no hace mermar el contenido atractivo de cada uno de los textos.

El lenguaje empleado en esta sección del libro es digno de resaltar por los recursos poéticos cercanos al universo infantil: la luna “la vemos semejante a media torta de casabe”,24 y las “hutías” son “como ratas grandes”. Las oraciones resultan cortas, conformadas con una sintaxis sencilla y un vocabulario de acuerdo con el léxico de los niveles a que se destina el cuaderno. Los diálogos son ágiles y amenos, aunque no faltan las preguntas (propias de esta edad de los porqués), que funcionan como mera incitación de la respuesta adulta.

Hay ocasiones, incluso, en que las interrogaciones devienen apoyatura para crear un ritmo característico de la poesía. Por ejemplo, cuando un niño pide un “racimo de arroz” —según como se ve, y se ve explica de acuerdo con su edad—, la persona mayor agrega que este cereal se da en espigas, que racimos echan la palma real, el coco y el plátano; ello despierta la curiosidad del pequeño, quien a partir de entonces empieza a preguntar:

¿I el maíz?

El maíz echa mazorca.

¿I el garbanzo?

El garbanzo echa vaina.

¿I el boniato?4

El boniato echa raíz.

¿I el caimito?

El caimito echa fruta.

¿I el clavel?

El clavel echa flor.26

Como es evidente, el propósito instructivo recae en el conocimiento de la naturaleza familiar al lector, dentro de un texto que rebosa cubanía. Resalta en el pasaje citado anteriormente, el uso de cierto humor, al igual que en el cuento XVIII, “El charlatán”, donde puede leerse:

I

Estupendo i maravilloso espectáculo

Los perros sabios

Última noche en que estos asombrosos animales se presentarán a hacer prueba de su rara habilidad ante el respetable público de la Habana. Los perros sabios sacarán las cuentas que les pidan i harán otras gracias i suertes que dejarán asombrados á cuantos tengan la dicha de verlos.

Entrada general una peseta

los niños un real.27

La variedad con que se presenta el mundo vegetal, también se encuentra en la descripción de los animales, en particular de las aves. Allí, significativamente, el tocororo recibe una especial atención:

Pero las más lindas de nuestras aves trepadoras son sin disputa los tocororos. ¿No han visto ustedes nunca un tocororo? No es grande, tiene la cabeza azul, los ojos colorados, lo mismo que el cuello i el vientre, el pecho blanco, i el lomo i las alas por arriba verde tornasolado, i la cola i lo demás del cuerpo pintado de los mismos i otros variados colores, todos muy brillantes i bellos. Sin embargo, las costumbres, el canto i el aspecto de este hermoso pájaro tienen un aire tan melancólico que da tristeza oirle i verle en el campo. Los indios le llamaban Guatiní i decían que lloraba por la mañana para que viniera el sol, i por la tarde porque se iba. Efectivamente, el tocororo diciendo: tocororó, tocororó se pasa las horas i los días enteros posado en las ramas más ocultas de los árboles, o en los bejucos, con el cuello recogido, y las plumas erizadas (…)28

A la cubanía del lenguaje se une, en ese fragmento, la alusión a la leyenda aborigen, manera de ratificar una identidad nacional que, de ningún modo, significa evasión del presente, como suele ocurrir en la poesía nativista de los contemporáneos de Villaverde.

Esta asunción de la realidad de su tiempo se verifica al final de una de las “conversaciones” que transcurren durante un paseo por el campo, cuando uno de los personajes infantiles creados por Cirilo Villaverde pregunta: “¿Qué hacen tantos negros con su machete i su garabato? Van á cortar todas las matas de arroz?”29

El narrador adulto explica entonces:

—Escardan las yerbas que crecen dentro del arrozal i perjudican á la buena sazón de las espigas. Con el machete corto, que dicen de calabozo, rozan las yerbas, con el garabato de madera las arrastran i amontonan para quemarlas después. A la operación de rozar las yerbas, dicen en el campo chapear, palabra que no se sabe de qué lengua es originaria.30

Luego de la “intervención” didáctica del adulto, Villaverde aprovecha el punto de vista ingenuo del niño y pone en boca de su pequeño personaje el siguiente parlamento: “Los pobres negros sudan a mares: sin duda por el calor se han quitado la camisa”. La posible censura de la Junta de Inspección de Estudios no puede obviarse.

Sin embargo, la iniquidad de la esclavitud no es soslayada por el autor de Cecilia Valdés, aun cuando lo haga como en sordina. Desde antes, en la estampa VII, “El niño inconsiderado”, muestra al pequeño esclavo llamado Pablo, quien actúa, a pesar de tener la razón, en contra de su voluntad, por temor a que su “amito” blanco lo castigue. Seguramente, estos son los pasajes que más resonancia dejan en ese hombre de La Edad de Oro, que por esos días en que lee El librito de los cuentos y las conversaciones entra en contacto directo con las arbitrariedades coloniales y el trato inhumano que reciben los negros esclavos del Partido de Hanábana, adonde se ha ido a vivir José Martí con su padre, por espacio de nueve meses. Razón por la cual posteriormente es capaz de reaccionar contra todo principio de explotación, sumisión y de ocultamiento de la verdad.

La estructura de las “conversaciones” del cuaderno de Villaverde permite la concatenación de las distintas viñetas, a partir de motivos finales de una, que introducen el asunto de la otra. De este modo, el discurso conserva una coherencia interna y unidad composicional, que colabora en favor del carácter estético de la narración, a diferencia de las habituales preguntas y respuestas del catecismo, su modelo inicial. Villaverde provoca una desautomatización del método didáctico empleado tradicionalmente y, por esa vía, llega a concebir un largo relato, fraccionado en capítulos, en que el diálogo convencional o el coloquio cobran una dimensión más literaria.

“La bijirita”, estampa XXIII del librito, constituye un valioso ejemplo de lo anterior: la acción se ofrece a través de los diálogos, la voz del adulto funciona como un narrador, y el niño se convierte en personaje activo de la anécdota. En esa especie de “cuento” breve la madre está caracterizada con cierta ironía, a partir de su actitud imperativa hacia las dos hijas:

—Rosa, sacude tus zapatos en el quicio de la puerta, no sea que ensucies la sala con el lodo que se ha pegado a las suelas.

Entra ahora. Si sientes frío en los pies, lávalos con aguardiente, i enjúgatelos con un paño seco. La humedad es dañosa. Ana, cierra los postigos, que entra por ahí un vientecillo algo frío.32

Con pocos recursos, sin grandilocuencia verbal, esta escena cotidiana tiene un giro debido a la aparición de una bijirita que revolotea buscando una salida al exterior. La madre y las niñas le dan de comer, y una de ellas intenta atraparla, pero el adulto interviene para transmitir la enseñanza:

—No, hija, no. A los pájaros no les gusta que los encierren. Lo que á ellos les gusta es volar en el aire, picar las fruticas, coger insectos en el campo, saltar por las yerbas i cantar meciéndose en la copa de los árboles.33

Un lector actual tal vez no repare en las connotaciones de este relato dialogado, y sólo perciba su sentido recto; sin embargo, es presumible que, en la represiva década del cuarenta y en las siguientes del siglo pasado, la bijirita34 constituya un símbolo indirecto de las ansias de libertad del cubano, como lo es la tórtola para Milanés, poema que precede a la viñeta de Villaverde, ambos incluidos en El librito de los cuentos y las conversaciones. Todo ello refuerza la intención marcadamente política del autor de ese texto educativo.

La labor del novelista pinareño en favor de la infancia y la juventud criollas no concluye con la tercera edición de este volumen en 1857. En ese mismo año aparecen sus dos traducciones para niños de la Isla: Autobiografía de David Copperfield, de Charles Dickens, así como El tamborcito o amor filial, cuaderno de lectura escrito originalmente en alemán, y que Villaverde vierte del inglés al español.

Desde el punto de vista de la evolución de la serie literaria infantil, los textos que presenta El librito… resultan el embrión más terminado de la narrativa que se va a desarrollar a fines del siglo XIX, con los cuentos de La Edad de Oro (1889), de José Martí, y en Lecturas de Pacuas (1899), de Esteban Borrero Echevarría.

Al valorar la producción literaria de los escritores de la serie, debe considerarse que la literatura instrumental del período se nutre tanto de las creaciones cuyo destinatario manifiesto es el niño o el adolescente (materiales incluidos o no en los libros de lectura), como de aquellos que, aun cuando no son concebidos con ese fin, reciben la apropiación de maestros y alumnos. Tal es el caso de “La fuga de la tórtola”, de José Jacinto Milanés, insertada en El librito de los cuentos y las conversaciones, de Cirilo Villaverde.

Aunque esa pieza no ha sido escrita para este tipo de receptor, el delicado y peculiar lirismo, la referencia concreta a un contexto cercano, el uso de una anécdota cotidiana, el tono íntimo y, sobre todo, la cubanización externa del habla poética, que llega a apelar incluso a ciertos giros coloquiales, vienen a satisfacer necesidades existentes en este período de transición hacia una literatura nacional.

Tradicionalmente, la crítica ha considerado que detrás de «La fuga de la tórtola» se encierran las ansias de libertad, en una alusión velada a la situación en la Isla, o la melancolía por el amor perdido. Sin embargo, el interlocutor infantil pone énfasis en el sentido recto, en el asunto asequible a su propio mundo y su relación con la naturaleza; no hay lugar para la polisemia, sino para la anagnórisis de sentimientos y experiencias particulares. En ello colaboran el lenguaje ingenuo y el natural lirismo, apoyados en la musicalidad de los dos quintetos decasílabos y el estribillo final que compone cada estrofa:

Tórtola mía! sin estar presa

Hecha a mi cama y hecha a mi mesa,

A un beso ahora y otro después,

Por qué te has ido? ¿Qué fuga es esa,

Cimarronzuela de rojos pies?

Ver hojas verdes sólo te incita?

El fresco arroyo tu pico invita?

Te llama el aire que susurró?—

¡Ay de mi tórtola, mi tortolita,

Que al monte ha ido i allá quedó!35

Desde el comienzo, con un apóstrofe, se crea el clima de intimidad que va a definir el discurso general de esta canción-letrilla compuesta en tres unidades y cuyo soporte es una figura patética (la interrogación), con la cual se provoca un movimiento interno en la lectura y se afirma el carácter coloquial de un tono poético que rezuma ternura y cierto desamparo.

Unido a lo anterior, el lenguaje utilizado por el poeta no construye una barrera entre la composición y la sensibilidad del lector infantil. La simplicidad de los enunciados, la utilización de epítetos (“hojas verdes”, “fresco arroyo”…), los delicados diminutivos, además del uso de cubanismos (“cimarronzuela”, “tórtola”, “jubo”, “manigual”…) desarrollan un código expresivo cercano al que posee este tipo de receptor. Incluso, las metáforas más audaces como “cimarronzuela de rojos pies” no impiden la comunicación inmediata, por su obvio referente dentro del poema.

Desde el punto de vista del desarrollo de la serie literaria infantil, José Jacinto Milanés pone en circulación un asunto ya tratado por autores como Félix Fernández de Veranes y Manuel de Zequeira,36 pero que, a partir de “La fuga de la tórtola”, va a ser retomado una y otra vez por poetas como Eusebio Guiteras, José María de Cárdenas, Luisa Pérez de Zambrana y José Martí. Por otro lado, a los elementos apuntados se suma el desplazamiento semántico de algunos términos que tienen un sentido peyorativo en la época (cimarronzuela), para adquirir un nuevo valor, reforzado aquí por el diminutivo. Ese recurso lo actualiza luego Martí, en textos de Ismaelillo y de La Edad de Oro, con lo cual hace honor a sus lecturas de infancia y a una tradición lírica nacional.

LAS FABULAS MORALES DE FRANCISCO JAVIER BALMASEDA

En la literatura infantil del siglo XIX, resulta imposible obviar Fábulas morales, de Francisco Javier Balmaseda, libro cuya edición príncipe data de 1858, y que contiene treinta y seis piezas del género, acompañadas por ocho grabados, en donde se reproducen, sutil y humorísticamente, escenarios, situaciones y personajes de la obra.

Integra Balmaseda, junto a Rafael Otero y otros creadores, el grupo encargado de estabilizar y criollizar la fábula como genérica cubanísima. En efecto, estos poetas recrean los viejos asuntos legados por la tradición, y enriquecen su producción literaria con nuevos motivos, a los que les imprimen una gracia, naturalidad, armonía y estilo personales.

Entre 1858 y 1893, el autor de Fábulas morales consigue dieciséis ediciones distintas de ese libro durante el siglo XIX, escrito para ser leído en las escuelas y aprobado como “texto forzoso” por la Capitanía General de la Isla, el 23 de junio de 1863, a petición de una comisión examinadora que, en su informe de recomendación, sostiene:

Nada es tan difícil en la literatura como las fábulas, y la misma sencillez, la misma naturalidad y el mismo candor distintivo que exigen, es un obstáculo insuperable para llegar, no al bellísimo modelo que nos legó el genio de Lafontaine; pero ni aun el de sus felices imitadores nuestros célebres compatriotas Iriarte y Samaniego. He aquí por qué son tan dignos de aprecio los escritores que se dedican á este género de literatura que desdeñan algunos por insípido, sin tener en cuenta que en esa misma llaneza del estilo está la dificultad, porque se corre el riesgo de que alzando el tono se peque en hinchado, y que bajándolo toque en humilde y trivial, De ambos extremos ha huido el apreciable escritor D. Francisco Javier Balmaseda en su presente colección de Fábulas: la facilidad del estilo, el tinte local con que las ha vestido, y la concisión y la belleza del pensamiento moral que cada una encierra, las hacen acreedoras á una recomendación especial, y prescindiendo de los arranques y adornos líricos esparcidos en algunas de las Fábulas podrían entrar sin ningún inconveniente á ocupar un lugar muy distinguido entre las mejores que sirven de texto en los colegios; por todo lo cual, la Sección primera las cree de suma utilidad y dignas por todos títulos de recomendarse su lectura y circulación en los institutos de enseñanza, para provechoso entretenimiento de la juventud. Y de conformidad con el informe que antecede, lo traslado a V. S. a fin de que por esa Comisión se recomiende la obra como útil auxiliar de la instrucción primaria.37

Los elementos de la flora y la fauna insulares, en esta etapa convulsa, caracterizada por la más férrea censura colonial, son una afirmación del sentimiento patriótico y constituyen un factor de identidad cultural. Si a ello se une el manifiesto sentido de cubana que anima Balmaseda a concebir sus poesías didácticas, su acendrado nacionalismo, puede agregarse entonces que Fábulas morales representa un índice de progreso en la ruptura de la norma española vigente, sobre todo, por el tratamiento de los temas y la criollización de fórmulas estróficas extraídas de la tradición hispánica.

En el prólogo a su edición de 1863, el escritor explicita sus objetivos estéticos y didácticos:

Las fábulas morales parecen inventadas de profeso para instruir á los niños: el atractivo de la rima, ó la armonía del verso; la novedad que siempre les ofrece ver hablando y raciocinando los animales, lo ligero del plan, y hasta lo jovial y sencillo del estilo; todo contribuye á despertar su curiosidad, á fijar su atención y á incitarlos á aprender agradablemente y sin advertirlo, verdades muy importantes. No hay un niño que nos las recite en la escuela, ó en el hogar doméstico, lo cual demuestra su natural inclinación a este género de producciones.38

Al referirse al gran servicio que las fábulas prestan a la enseñanza en general, concluye el autor remediano:

La semilla que penetra en lo hondo del surco siempre produce abundante fruto; así una buena máxima, ó una prudente advertencia, aprendida en la infancia, nos sirve de guía, jamás la olvidamos, y muchas veces nos da la voz de alarma en medio del peligro.39

Por su parte, aunque Francisco Javier Balmaseda no aspira a presentar sus composiciones como modelos del género fabulístico, el poeta las publica porque, según él, ante el vacío existente, “los hombres tenemos el deber de servir a la sociedad en lo que podamos: no basta no hacer el mal, es preciso esforzarse por hacer el bien, aun cuando nuestros esfuerzos sean infructuosos”,40 uno de los preceptos nacionalistas y humanistas que luego va a primar en la redacción de artículos biográficos como “Tres héroes”, de La Edad de Oro.

El escritor cubano defiende criterios que mucho le deben al magisterio de José de la Luz y Caballero, en torno a la naturaleza de la enseñanza y el método más efectivo para el aprendizaje de la lectura, a partir y con la ayuda de las fábulas:

Observarémos que hay algunos que creen cumplir su deber enseñando lectura, escritura, aritmética y algún otro ramo accesorio. Su verdadera misión, la santidad del magisterio, esa especie de sacerdocio que mientras mas ilustrada y feliz es una sociedad mas lo eleva sobre el nivel comun, consiste en formar corazones, en cultivar las nacientes inteligencias procurando presentarles la verdad de las cosas, lo feo del vicio, lo hermoso de la virtud. ¡Cuán á propósito es para esto el sistema explicativo que abre las puertas para tratar fácilmente todas las materias posibles! Un educador hábil siempre lo estimará como indispensable para llevar á cabo su obra, que sin él será tardía é incompleta.41

Aun cuando se hace notorio el empeño descolonizador manifiesto en las palabras de Balmaseda, tan cercano al pensamiento posterior de ese niño de La Edad de Oro, Fábulas morales es declarado texto forzoso en los centros docentes insulares desde 1863. Sin embargo, son escasos los elementos de carácter religioso que se dan cita en el volumen, lo cual significa de por si un resquebrajamiento del sistema de valores de la época, de la norma al uso en la serie, sin contar con la transgresión, desde el punto de vista temático y composicional, de algunos procedimientos canónicos del género en la segunda mitad del siglo XIX.

A ello se puede agregar el indudable sentido de americanía que anima al autor, cuyo rasgo esencial es su acendrada cubanía, su nacionalismo evidente:

Debo advertir que en varias fábulas he puesto en juego diferentes animales y plantas que solo son conocidos en Cuba, lo que les da colorido local. He tenido presente que escribía para la juventud cubana y que la verdad carece de carta de domicilio, es una y pertenece á todo el mundo y á todos los hombres, donde quiera y como quiera que se insinue. Si he incurrido en un defecto, confieso que seré incorregible.42

Para ratificar los propósitos y logros estéticos de Francisco Javier Balmaseda con sus fábulas qué mejor ejemplo que las redondillas de “El cedro y el jagüey”:

Había un cedro gigante

De Cuba en el campo hermoso,

Que en el calor rigoroso

Daba sombra al caminante.

 

Lo respetó el rayo ardiente,

Los siglos lo respetaron,

Mil tempestades pasaron

Y nunca dobló la frente.43

La composición introduce un tema (la ingratitud), ya abordado por Rafael María de Mendive en “El mostachón y la pasionaria”,44 del año 1856, pero en el caso de Balmaseda, el poema establece una comunicación mucho más estrecha con el destinatario infantil, a través de un discurso en donde predominan los contrastes, elegancias del lenguaje tales como la anáfora, el polisíndenton, el pleonasmo, la paranomasia, y la aliteración. Estos dos últimos recursos sobresalen del conjunto, gracias a su hábil utilización en las terminaciones de algunos versos, los cuales provocan en el texto un efecto lúdicro, característico del retruécano o el trabalenguas, y un ritmo y musicalidad particulares:

Dióle al instante la mano,

Alzóse el Jagüey del cieno.

[…)

Y los días iban pasando

Los años iban viviendo,

Y el Jagüey siempre creciendo,

Y el cedro siempre menguando;

 

Y ya con negras congojas,

Desfallece y viene abajo,

Que no es más que un pobre gajo

Seco podrido y sin hojas.45

Otro tanto ocurre con “El majá y la jutía”, que centra su atención en dos animales cubanos, representantes, en la fábula, del mal (engaño) y el bien (inocencia), dentro de un discurso dramático, que se logra por el contrapunteo de los diálogos. Ese poema adquiere un doble papel, debido al tratamiento ideotemático del mismo y el alcance simbólico de sus personajes, los cuales van a ser retomados una y otra vez pr algunos fabulistas del siglo XIX y del XX, independientemente del sentido y los propósitos que primen en sus respectivos textos:

En una áspera montaña

De Cuba, mi patria hermosa,

Tierra la más deliciosa

Que el sol con sus rayos baña,

Creció una esbelta baría,

En cuya copa frondosa

Habitaba venturosa

Una inocente Jutía.

 

Vióla un enorme Majá,

Subió al árbol, y engañoso,

Le dijo muy cariñoso:

Mi señora, ¿cómo va?

Temblaba la pobrecita,

Y el culebrón con dulzura

Prosiguió mi vecinita,

¿Por qué esa negra pavura?46

Leyendo los poemas didácticos de Francisco Javier Balmaseda, enseguida cobran mayor valor sus palabras, cuando explica:

La fábula, además, tiene un no sé qué [por el cual he suspirado con poquísima fortuna] sacado de los instintos y de las costumbres de los animales, en virtud del cual parece cierto aquello mismo que sabemos que es pura invención poética, y estimamos como muy natural que hayan hecho y hablado los brutos lo que les atribuimos; esto equivale a la vis cómica del autor dramático. No basta referir en verso armonioso que un animal dijo, o ejecutó tal cosa, porque en semejante caso todos serían fabulistas: es necesario que la diga y la ejecute de cierta manera que le sea propia, con tal naturalidad y facilidad que nos figuremos estarle viendo y oyendo.47

El prólogo intercalado en la edición de 1863 es casi un decálogo de lo que debe ser este tipo de arte en Cuba, donde su autor aboga por el surgimiento de un verdadero movimiento fabulístico nacional, además de enunciar cuáles son —a su modo de ver— las claves y los requisitos del género para que perdure en la mente de sus lectores. Por ello, el escritor llega a analizar con creciente lucidez:

Es tan rica, tan espléndida la naturaleza en Cuba, que parece imposible mirarla con indiferencia bajo su cielo transparente y contemplando los magníficos paisajes de sus campos y la variedad de sus pájaros, árboles y flores. Ademas; si cada pais tiene sus costumbres, unas buenas y otras defectuosas; ¿cómo podrán los escritores empeñarse en la reforma de estas últimas alejando de la escena las cosas propias del mismo pais? La literatura en este caso no podrá ser la expresión del sentimiento comun del pueblo para el cual se escribe, ni tendrá aquella justa influencia que le corresponde en la direccion de las ideas.

[…)

Cuba no posee literatura especial; pero sí muchas cosas dignísimas de ser descritas; desdeñarlas los literatos cubanos es lo mismo que querer subir a la elevada cumbre bajando á lo más hondo de la llanura. ¿Qué provecho le traerá el niño la lectura de una fábula en que figuran animales que no conoce?48

Aunque separadas en el tiempo, y diversas por su proyección y alcance, existe cierta identidad de pensamiento entre las palabras anteriores de Francisco Javier Balmaseda y las apuntadas por José Martí en 1881, con respecto a la literatura del continente:

No hay letras, que son expresión, hasta que no hay esencia que expresar en ellas. Ni habrá literatura hispanoamericana, hasta que no haya Hispanoamérica (…) Lamentémonos ahora de que la gran obra nos falte, no porque nos falte ella, si no porque esa es señal de que nos falta aún el pueblo magno de que ha de ser reflejo (…)49

No en balde, el creador de las Fábulas morales afirma categóricamente, cuando tiene que valorar el significado y la trascendencia de su labor:

No podía serme indiferente la idea de influir de algún modo en el bien de la juventud: inmediatamente puse manos á la obra y la he terminado en pocos días. Segunda: que me perdoneis el colorido local, si lo estimais como un defecto: á este libro le vendría bien el título de “Fábulas cubanas”; mas yo, francamente, estoy muy distante de convenir en que este sea un defecto. Fuera e Cuba, se me dirá, carecen de interés muchas de mis producciones; pero, ¿debo aspirar á la gloria de que sean leidas en Europa? No por cierto, y si lo fuesen, por uno de esos caprichos de la fortuna que suelen decidir la suerte de un libro, el voto de los inteligentes estaria a mi favor, porque el colorido cubano, si yo tuviera estro y maestria, podia haber dado á mis cuadros cierta novedad, cierta originalidad y frescura que serian muy estimadas en el antiguo mundo por todos los conocedores de la indole peculiar del apólogo (…) He procurado con trabajo asiduo ofrecer a mi pais una obra digna de su ilustración (…)50

El alcance de la obra de este creador remediano dentro del panorama de la literatura para la infancia cubana es tal, que ella significa, sin dudas, un factor de transgresión de la norma, no sólo por su esencial cubana y universalidad, sino también por el carácter nada religioso de sus enseñanzas. Las concepciones estéticas e ideotemáticas del escritor de las Fábulas morales constituyen un elemento progresivo —y progresista— en la evolución del sistema de valores de la propia serie infantil nacional que, tres décadas después de haber leído las composiciones de Francisco Javier Balmaseda, transforma radicalmente ese niño de La Edad de Oro.

LOS LIBROS DE LECTURA DE EUSEBIO GUITERAS EN JOSE MARTI

En verdad, la obra de Eusebio Guiteras es la deja una huella sensible en la formación literaria y patriótica temprana de José Martí, si se valoran justamente sus testimonios de 1893, poco después de la muerte del maestro matancero:

En sus libros hemos aprendido los cubanos a leer: la misma página serena de ellos y su letra esparcida, era como una muestra de su alma ordenada y límpida; sus versos sencillos, de nuestros pájaros y de nuestras flores, y sus cuentos sanos, de la casa y la niñez criollas, fueron, para mucho hijo de Cuba, la primera literatura y fantasía. En Cuba tenía él perpetuamente el pensamiento, siempre triste; y había algo de amoroso en sus modales, un tanto altivos en la mansedumbre, cuando recordaba los tiempos prósperos del colegio La Empresa, donde él ayudó a criar tan buena juventud, o se evocaba a los Suzartes y Peolis y Mendives, que fueron tan amigos suyos…51

En la segunda mitad de la década del cincuenta, se editan en Filadelfia, Estados Unidos, los tres cuadernos iniciales que Eusebio Guiteras destina a los escolares de la Isla, como un largo texto graduado según las edades, niveles instructivos y demandas ideoestéticas de los niños cubanos, dividido a su vez en varios volúmenes: Libro primero de lectura (1856), Libro segundo… (1857), Libro tercero… (1858) y Libro cuarto… (1868). Desde entonces este autor es quien provee los principales materiales educativos, los que comienzan a conformar el gusto estético y las convicciones morales y políticas de la infancia criolla.

Siendo muy joven, Eusebio Guiteras empieza a dedicarse al magisterio en la primera enseñanza. En 1845 regresa a Cuba, luego de un viaje por Europa, que realiza junto a su hermano Antonio, con la finalidad de estudiar los más modernos planes educacionales y su posible introducción en los colegios privados de su país. Con esa experiencia, dirige La Empresa, de Matanzas, entre 1850 y 1852, fecha aproximada de la aparición de su Catecismo, para las clases de religión, y la Cartilla, destinada al aprendizaje de la lectura en la edad temprana, En este tiempo también aplica el método explicativo y el principio de la integralidad en la formación del niño, proclamados por Luz y Caballero. Un año después tiene que trasladarse a Filadelfia, por motivos de salud. Allí concibe el maestro matancero un conjunto de cuatro volúmenes que conforman un sistema escalonado de enseñanza, sobre la base de la complejidad y variedad de los materiales, los cuales exaltan, con amenidad y sencillez, acciones virtuosas, buenas cualidades, medidas de higiene, etcétera, con una prioritaria función didáctica, que no desatiende el balance artístico que debe primar en este tipo de literatura instrumental; y toma en cuenta, además, la edad y psicología infantiles, dentro de un moderado espíritu religioso. En 1858, cuando el escritor ya ha concluido en Filadelfia, la edición de sus tres primeros libros de lectura, regresa al país, para dedicarse durante diez años a la educación de las nuevas generaciones.

El Libro primero… se dedica a los pequeños que han pasado la Cartilla y se inician en la lectura corrida. Sus lecciones están graduadas según las dificultades que pueden presentar los escolares y ofrecen distintos asuntos relacionados con la naturaleza y la moral. Los relatos, brevísimos, hacen uso del método explicativo, con vistas a lograr un rápido aprendizaje, y sus protagonistas son niños, para poder propiciar la identificación directa con el lector, como en el texto de Cirilo Villaverde, su antecedente inmediato. De ese modo, Guiteras busca influir en los hábitos de trabajo y estudio de la infancia insular, así como en su conducta social y principios religiosos, de acuerdo con los presupuestos ideológicos de la clase dominante. Así, puede encontrarse una estrofa, a manera de ejemplo, en que la interpretación cristiana del mundo se brinda con gracia y sencillez lírica:

Yo vi sobre los gajos

Brotar la linda flor;

Y crecer los naranjos

Que mi mano sembró.

¿Quién es el que lo hace?

Di, madre mía.— Dios.52

En las lecciones de Guiteras se supera el método tradicional de las preguntas y respuestas, de las “conversaciones”, y se introduce un diálogo más fluido y libre entre el niño y el adulto; como éste:

Ten cuidado, no tropieces con ese pobre hombre. Es ciego. (…) No puede ver el cielo, tan hermoso, ni el campo verde, ni el río azul, ni la gente que pasa por la calle…

Pobre ciego, voy a darle mi real, y otro día compraré las avellanas.53

Ahora bien, donde se alcanza un nivel estético más alto es en la poesía, por el tono, la delicadeza y ternura de las metáforas, así como por la soltura en el manejo de las fórmulas estróficas tradicionales y la utilización de elementos de cubanía:

Mientras se duerme el niño,

Brisas suaves,

El murmullo traédle

De los palmares,

Cuando empiezan sus ojos

A adormitarse,

Tal parece que dicen:

Adiós, mi madre.

 

Miéntras se duerme el niño,

Flores del valle,

Vuestros lindos colores

Venid a darle.

Sus labios son tan rojos

Como corales;

Y parece que dicen:

Te quiero, madre.54

En esta seguidilla simple, cuya tonalidad recuerda la nana, se anima la naturaleza y se pone en función de los sentimientos maternos, de manera natural y tierna, según corresponde a un primer nivel de lectura.

Este tomito inicial llega a cuatro ediciones durante los años sesenta, distribuidas como sigue: 1857, 1860, 1861 y 1862, respectivamente:

El Libro segundo amplifica las temáticas tratadas en el anterior, referentes a la moral cristiana, la caridad, la generosidad, el trabajo y la honestidad, así como introduce temas bíblicos y asuntos literarios de la época: las aventuras de El nuevo Robinson, de Campe, en versión de Tomás de Iriarte; el motivo del niño y la mariposa, etcétera.

Por otro lado, los textos tienen como uno de sus objetivos fundamentales despertar el interés por el campo cubano, con su flora y su fauna, y el desarrollo de la incipiente industria insular; sin embargo, la visión que se brinda es idílica, a pesar del marcado acento criollo, que es capaz de exaltar los valores y características físicas del país. Ello puede verificarse en un fragmento del romance “A Cuba”, de profundas resonancias neoclásicas:

………………………………..

Para ti, Cuba preciosa,

Los astros más claros brillan,

Y para ti de las flores

La aroma es más exquisita.

Para ti crecen los cedros,

Y crece la palma erguida.

El plátano sus racimos

Te ofrece con mano amiga,

Y sus mazorcas de oro

El rico maíz te brinda.

Para ti los azahares

Su fragancia al aire envían.

Y en naranjas se convierten

Al caer la flor marchita;

Y para ti coronada

Airosa crece la piña,

Que anidada entre las hojas

Parece reina en su silla…55

……………………………………..

Esa misma perspectiva es la que asume Eusebio Guiteras para ponderar los adelantos de la civilización. No obstante, se observa un punto de vista colonizado hacia el pasado prehispánico:

  1. En tiempo de los indios no se veían esos caminos, por los cuales puede uno pasar de un punto á otro con facilidad, ni esas grandes fincas donde se cultiva lo que produce el fértil suelo de Cuba. En lugar de las miserables canoas de los siboneyes, se ven en los puertos grandes barcos, que ponen a la Isla de Cuba en comunicación con todas los partes del mundo.
  2. En lugar de las criaturas desnudas que pasaban el día en un estado muy semejante al de los brutos, vemos á los niños asistiendo a la escuela, y aprendiendo en ella la religión verdadera.
  3. Ahora la Isla de Cuba está civilizada, porque la civilización es lo contrario del estado salvaje.56

Con posterioridad, la generación educada en los libros de Eusebio Guiteras va a examinar el mundo prehispánico con otros presupuestos socioculturales y políticos, y una definida conciencia descolonizadora. La crónica “Ruinas indias”, de La Edad de Oro, y el ensayo programático “Nuestra América” (1891), ambos de José Martí, constituyen los mejores ejemplos de esta superación ideológica generacional.

La literatura de Guiteras alcanza sus momentos más descollantes, desde un ángulo artístico, cuando recrea temáticas cotidianas, muy cercanas al universo del niño, las cuales permiten al autor intensificar un discurso lírico, caracterizado por su tono íntimo y acendrada cubanía. De ahí que, en el Libro segundo de lectura, el escritor retome un asunto promovido por José Jacinto Milanés, y lo adapte a las normas de recepción infantiles, para crear “El tomeguín”, pieza que se distingue del conjunto por su musicalidad, ritmo y sencillez argumental y expresiva, aunque no llega a lograr el nivel de sugerencia, ni las excelencias del lenguaje de «La fuga de la tórtola»:

¿Dónde te has ido,

Mi tomeguín?

La puerta abierta

Y roto el güin.

Está la jaula

Triste sin ti.

¿No te gustaba

Verme venir

A todas horas;

Mi tomeguín?

¿Contigo buena

Siempre no fui?

¿Y no me dabas

Besitos mil,

Cantando alegre

De verme á mí?

¡Qué ingrato eres,

Mi tomeguín!

¿Allá en el monte

Serás feliz,

Comiendo un sucio

Gusano vil?

¿Y si te encuentra

El majá ruin?

Vuelve a tu jaula,

Mi tomeguín.57

El segundo texto de la serie preparada por Eusebio Guiteras alcanza dos reediciones en los años 1859 y 1862, mientras que el Libro tercero de lectura estrena su cuarta tirada en 1862. En este último volumen, su creador comenta con los educadores y alumnos:

Las clases, ya algo adelantadas, en que entran los alumnos despues de haber pasado el Libro segundo de lectura, permiten al autor de la série, en este tercero, estenderse en las materias, y dar mas variedad al estilo: cosas ambas de mucha consideración para conseguir que el alumno conserve vivo el interés, y no caiga en la falta de leer siempre en el mismo tono.» 58

En dicho cuaderno, el maestro matancero suelta aquí y allá sus semillas de patriotismo, y sus postulados acerca de la fuerza de “el saber” obtienen una rápida recepción entre pequeños como ese niño de La Edad de Oro:

  1. El saber es como un arma: el que la emplea para quitarle á otro la vida, es un asesino; pero el que la conserva prudentemente, y solo la saca para proteger al débil o en defensa de la patria, es un héroe.59

Resonancia especial adquieren las palabras arriba citadas en el cierre de “Tres héroes”, incluido en el primer número de La Edad de Oro, de José Martí, lector de los libros de Guiteras:

Esos son héroes; los que pelean para hacer á los pueblos libres, ó los que padecen en pobreza y desgracia por defender una gran verdad. Los que pelean por la ambición, por hacer esclavos a otros pueblos, por tener más mando, por quitarle a otro pueblo sus tierras, no son héroes, sino criminales.60

Véase la oposición “héroe”/“asesino”, enunciada por Guiteras, y la de “héroe”/“criminal”, a la cual alude José Martí, y han de encontrarse puntos de contacto evidentes; lo mismo que la frase “el saber es como un arma”, del primer autor mencionado, y “la fuerza está en saber mucho”,61 perteneciente al segundo, en donde hay visibles analogías.

Los libros de Eusebio Guiteras representan un nuevo estadio en la concepción de este tipo de lecciones para la enseñanza de la infancia y la juventud insulares. Ellos satisfacen una demanda de la escuela cubana, hasta tal punto que, a pesar de ser prohibida su circulación en los colegios públicos y privados del país, llegan a leerse clandestinamente, y proporcionan la lectura placentera del niño, al margen de los imperativos docentes del sistema educacional colonial y de los textos oficiales que introduce la metrópoli,62 para sustituir los del maestro matancero, aspecto comentado por Miguel Garmendía, en la revista El Estudiante, del 1 de marzo de 1906:

Nunca olvidaré (…) la dolorosa impresión que hube de experimentar un día, allá por el año 1871, en que, no sé si por orden del Gobierno o por diligencia oficiosa, nos fueron recogidos en el colegio los libros de Guiteras y se nos dieron en cambio las “Lecciones instructivas” de Iriarte. Lloré desconsolado mi libro tercero, como se llora a un amigo de quien se nos obliga a separarnos para quizá no volver a verlo. A mi corazón de nueve años, ningún maestro había hablado con tanta dulzura, con tanta bondad, en lenguaje tan inteligible y tan tierno. Lloré, pues, a lágrima viva, aquel injusto y odioso despojo y aborrecí durante largos días, devolviendo injusticia por injusticia, la prosa tal vez más castiza y más elegante, pero ¡ay! para mí helada y inexpresiva del afamado literato canario, cuyas lecciones descoloridas me hablaban con despego como si su autor no tuviera nada que ver conmigo. Echaba seguramente de menos a Guiteras, de quien me había forjado la ilusión de que había escrito aquellas páginas sólo para mí y para mis compañeros de estudio. He aquí el arte exquisito, inimitable, del pedagogo matancero. En sus libros es más que autor: maestro, amigo, padre de la inteligencia y del corazón de sus tiernos lectores.61

Se han visto hasta aquí los textos didácticos que integran el conjunto de lecturas posibles del pequeño José Martí dentro del plan de estudios correspondiente a la enseñanza elemental, que tiene lugar, sobre todo, en el colegio San Anacleto, porque «ese adolescente de La Edad de Oro» continúa sus clases, desde marzo de 1865, en la Escuela de Instrucción Primaria Superior Municipal de Varones de La Habana, para la cual es designado, en 1864, el maestro y poeta Rafael María de Mendive.

Este fragmento pertenece al libro ESE NIÑO DE “LA EDAD DE ORO”, escrito entre 1984 y 1989, respectivamente, por José Antonio Gutiérrez Caballero, y que fuera ganador del Premio Especial Ensayo del Centenario de La Edad de Oro 1989, del Ministerio de Cultura de Cuba, además de ser seleccionado, como el Premio La Rosa Blanca 1999, como texto integral de la Sección de Literatura Infantil de la UNEAC y el Comité Internacional de la IBBY, en Cuba.

Notas al pie de página

2Juan Losada: Martí: joven revolucionario, p. 17, Comisión de Estudios Históricos de la UJC, Instituto Cubano del Libro, La Habana, 1969.

3Por las condiciones propias del colegio San Anacleto, con un director como Rafael Sixto Casado, escritor él mismo de textos didácticos de diferentes materias y preocupado por la educación integral de sus discípulos, es que surge la hipótesis del contacto temprano de José Martí con la literatura instrumental nacional y con otros libros infantiles cubanos y foráneos, si se tiene en cuenta además que este es uno de los primeros centros docentes en poseer una biblioteca escogida con más de 859 títulos, según relaciona Mariano Dumás Chacel, en su anuario de pedagogía y estadística de la enseñanza Guía del profesorado cubano para 1868, p. 97, Impr. El Ferrocarril, Matanzas, 1868.

4En su libro Martí en España, Emilio Roig enumera, con pruebas documentales, las faltas que constan en los expedientes de don Mariano Martí y Navarro dentro del ejercicio de sus ocupaciones como celador y capitán juez pedáneo, respectivamente, por las cuales es separado de su cargo el 16 de octubre de 1860, y el 24 de ese mes, el Gobierno Superior de la Isla aprueba su cesantía. V. Emilio Roig de Leuchsenring; Martí en España, pp. 14-16, Cultural, S. A., La Habana, 1938.

5 Emilio Roig: ob cit., p. 9.

6Álbum de los niños. Publicación semanal, editada y dirigida por Manuel Zapatero, t. I, pp. 3.4, entrega 1a., La Habana, 1858.

7Álbum…, t. 3, p. 100, entrega 8a., 1859.

8Ibíd., t. 5, pp. 401-402, entrega 26a.

9Ibíd., t. 5, p. 1, sábado 7 de julio de 1860.

10Ibíd., t. 2, p. 330, entrega 23a., 1859.

11V. Santiago García Spring: La enseñanza popular en Cuba desde el descubrimiento hasta nuestros días, p. 26, Impr. y Papelería La Universal, La Habana, 1926.

12Santiago García Spring: ob. cit., p. 27.

13Emilio Roig de Leuchsenring: ob. cit., p. 27.

14Juan Losada: ob cit., p. 19.

15Ibíd., pp. 19-20.

16En el informe sobre el estado actual de la enseñaza primaria en la Isla de Cuba en 1836, su costo y mejoras de que es susceptible”, leído por Domingo del Monte en la junta ordinaria de la sección de Educación, con fecha 31 de marzo de 1837, el autor exhorta a las juntas, con vistas a que ellas ofrezcan los medios necesarios para la edición de “cuadernitos” de mayor extensión que los periódicos de instrucción propuestos, pero de la misma sistematicidad de éstos (semanales, mensuales o por entregas), “escritos con lisura, amena variedad y estudiada ligereza, que contengan nociones exactas y entretenidas de ciencias naturales, de artes y oficios, de moral, de historia, de economía doméstica, de religión y literatura”, tal y como lo concibe Juan Bautista Sagarra y Blez en su “Librería de los Niños Cubanos”. V. Domingo del Monte: Escritos…, 2 t., t. 2, p. 47, Cultural, S. A., La Habana, 1929.

17Emma Pérez Téllez: Historia de la pedagogía en Cuba; desde los orígenes hasta la Guerra de Independencia, p 221, Cultural S. A., La Habana, 1945.

18Los diez libros aprobados como textos para las escuelas de la Isla son los siguientes: El silabario de los niños (No. 1 de la “Librería de los Niños Cubanos”); Miscelánea infantil (No. 2 de la “Librería de los Niños Cubanos”); El pasatiempo (No. 4 de la “Librería de los Niños Cubanos”); El padre y sus hijos (No. 7 de la “Librería de los Niños Cubanos”); Aguinaldo para las niñas de Santiago de Cuba; Continuación de la Miscelánea infantil; Dioscórides el huérfano o historia de un joven herrero; Salterio de la infancia; Estudio de la religión No. 3: Memorándum del niño católico y Tres cuentecitos o sean las virtudes teologales, todos escritos por Juan Bautista Sagarra y Blez.

19Revista de La Habana. Periódico Quincenal de Ciencias, Literatura, Artes, Modas, Teatros…, editores Rafael María de Mendive y José de Jesús Quintiliano García, t. 4, p 206, Impr. y Encuadernación del Tiempo, La Habana, 1855.

20Ibíd.

21José María de la Torre: El Robinson cubano, obra elemental de educación para los niños y para el pueblo, p. 3, Impr. La Fortuna, La Habana, 1863.

22Ibíd., p. 3-4.

23Cirilo Villaverde: El librito de los cuentos. 3ª ed., p. 7, Impr. de Manuel Soler, La Habana, 1857.

240Ibíd., p. 56.

25Ibíd., p. 93.

26Ibíd., p. 72.

27Ibíd., p. 46-47.

28Ibíd., p. 86.

29Ibíd., p. 72.

30Ibíd.

31Ibíd., p. 73.

32Ibíd., p. 59.

33Ibíd., p. 60.

34En la década del setenta del siglo XIX, los cubanos llaman a los españoles “gorriones”, y estos, a su vez, le dicen a los criollos “bijiritas”. Ello opera a favor del contenido alegórico de la estampa de Cirilo Villaverde.

35Cirilo Villaverde: ob. cit., p. 58.

36Félix Fernández de Veranes, en sus Jeroglíficos, de 1802, incluye una fabulita, cuyo personaje y motivos prefiguran “La fuga de la tórtola”, de Milanés. Por su parte, Manuel de Zequeira, en sus Poesías, de 1829, ofrece el soneto moral “Los pesares de la ausencia”, que trata un asunto amoroso, en donde el ave del poeta matancero, ya es símbolo del sentimiento y la desolación del poeta. (V. El tesoro encontrado  OJO

escrito por el autor de este ensayo.)

37Francisco Javier Balmaseda: Fábulas morales. 3a. ed. corr. y aum. con notas del autor, pp. V-VI, Impr. La Antilla, La Habana, 1863.

38Ibíd., p. VII.

39Ibíd.

40Ibíd., p. VIII.

41Ibíd., p. IX.

42Ibíd., p. XII.

43Ibíd., p. 21.

44El tema de “la ingratitud” lo trata Rafael María de Mendive, en su fábula “El mostachón y la pasionaria”, texto incluido en el tomo 5 de la Revista de La Habana, correspondiente a 1856. Desde el serventesio y los dos pareados del comienzo, el poeta introduce al lector en la acción y el conflicto de los personajes:

Roñoso un “Mostachón” mordió atrevido

El tallo de una tierna “Pasionaria”,

Después de haber lecciones recibido

Bajo su sombra agreste y solitaria.

 

Ella sensible con su ejemplo quiso

Al reptil enseñar cuánto es preciso

De noble orgullo y dignidad al hombre

Para alcanzar sin degradarse un nombre.

……………………………………………………..

  1. Revista de la Habana, t. 5, p. 88.

45Francisco Javier Balmaseda: ob. cit., p. 22.

46Ibíd., p. 75.

47Ibíd., p. XIII.

48Ibíd., p. XII.

49José Martí: “Cuaderno de Apuntes” No. 5, en Obras completas, t. 21, p. 164, Ed. Ciencias Sociales, La Habana, 1975.

50Francisco Javier Balmaseda: ob. cit., p. XV.

51José Martí: Obras completas, t. 5, p. 260, Ed. Ciencias Sociales, La Habana, 1975.

52Eusebio Guiteras: Libro primero de lectura, 12a. ed., p. 75, Librería La Primera de Papel, Matanzas, 1881.

53Ibíd., p. 60.

54Ibíd., p. 94.

55Eusebio Guiteras: Libro segundo de lectura, 9a. ed., p. 102-103, Librería La Primera de Papel, Matanzas, 1882.

56Ibíd., p. 97-98.

57Ibíd., p. 131-132.

58Eusebio Guiteras: Libro tercero de lectura, 15a. ed., p. 3, Papelería La Cruz Verde, La Habana, 1891.

59Ibíd., p. 15.

60José Martí: La Edad de Oro, edición facsimilar, p. 6, Centro de Estudios Martianos, E. Letras Cubanas, La Habana, 1979.

61Ibíd., 1er. núm., p. 32, julio de 1889.

Publicado por este blog homónimo, en 2020, y por la Editorial Gente Nueva, en 1998.

José Antonio Gutiérrez Caballero

Miami, 28 de enero del 2020.

 

 

RECUENTO CON PELOS Y SEÑALES DE LOS PREMIOS, FINALISTAS Y MENCIONES DEL II CONCURSO DE MICRORRELATOS «EL TALLER DE ESCRITURA» 2019, ENTREGADO POR EL CLUB DE ESCRITURA (S) FUENTETAJA, DE MADRID, EL 8 DE ENERO DEL 2020…

Posted in CELEBRACCIONES, CULTURALETNIAS with tags , , , , , , , , , , , on 13 enero 2020 by josancaballero

Primer Premio:

«Gatos», de Luis L. Lehnhoff

Me gustó la fuerza de tu ejercicio. La parte del gato.

Seguí sus consejos: los detalles, la visibilidad. Escribir de lo que sabemos.

¿Quién te explicó cómo desollar un gato?

Leí

¿Leíste?

Sí. Y pregunté. Investigué.

Está muy conseguido. El olor. El crujido de las vértebras. Que la piel salía como un calcetín.

Analicé y trasladé lo que sentí.

¿Cómo dices?

En clase dice que nada está por encima del arte.

Es una forma de hablar.

Hago lo que nos pide. Solo eso.

¿Qué hiciste exactamente?

Literatura.

Microcuento Presentado el 10/08/2019

Estadísticas: 66 Puntos ; 439 Lecturas; 82 comentarios

Dotado con 300 euros en metálico

Palabras del Jurado: «Funciona muy bien, con su estructura metaliteraria, dos voces contundentes para el diálogo, un suspense sutil, y una ironía que se vuelve cada vez más visible, con una última respuesta que en su contundencia descarada se muestra tramposa.»

Premio a los dos finalistas

1er Finalista: «Era, Soy, Seré», de Joaquín Pereira

Leía, escribía, publicaba: era periodista. Llegó la censura, los disparos, el exilio: muté a profesor de escritura. Llegaron los suicidas, los fatuos, los cursis: hice de psicoanalista. Me enfrento a sus errores ortográficos, a su incoherencia, a su mal gusto: me hago alcohólico. Imitan a Hemingway, a Cortázar, a Coelho: me convierto en exorcista. Me pedirán consulta, me ofrecerán un café, me invitarán a cenar: ejerceré de amante. ¿Dejaré de leer, de escribir, de publicar? No, venceré al olvido.

Microcuento presentado el 10/28/2019

Estadísticas: 352 Puntos; 516 Lecturas; 172 comentarios

Palabras del Jurado: «Con un trabajo de precisión muy cuidado para construir una estructura tremendamente eficaz hecha de paralelismos, comprime las etapas vitales del narrador desde un abatimiento progresivo que solo al final es capaz de contener.»

2do. Finalista: «Espejo», de Alejandro Bozo Cohen

Busco entre ellos al próximo Hemingway, pero sus miradas me devuelven la mía. Reanudo el taller y les explico la lección, el recurso literario, el ejercicio… lo que sea, lo que toque, lo que se olvide.

Microcuento presentado el 10/24/2019

Estadísticas: 160 Puntos; 547 Lecturas; 74 comentarios

Palabras del Jurado: «Muy conciso, con las palabras muy medidas, con el narrador subido a lo alto de una atalaya, encierra una lección paradójica y fundamental para muchos.»

Ambos Finalistas Dotados con la matrícula y primeros tres meses gratuitos en el taller on line de escritura creativa Fuentetaja

Premio al mejor lector

Josan Caballero

Palabras del Jurado: «Por sus comentarios extensos y reflexivos, con críticas constructivas siempre pertinentes y abiertas al diálogo.»

RAMILLETE de 20 Ejemplos con 20 Lecturas-Comentarios de Josan Caballero:

(1) FIEBRE DEL ORO: «Interesante tu relato, Andrés Zúñiga, sobre la base de preguntas y respuestas, que es la primera esencia de la narrativa decimonónica, heredada del método heurístico, que se usaba en los manuales de «Catecismo», de donde ciertamente surge el cuento, como género literario, en Hispanoamérica. Es una de las tesis que planteo, en mi ensayo novelado EL TESORO ENCONTRADO: LA SERIE LITERARIA INFANTIL DE CUBA A HISPANOAMÉRICA. LIBRO PRIMERO: 1783-1857 (Miami, 2010). He ahí una de las virtudes de tu texto, cuya síntesis genera evocaciones y recuerdos para todos, ya no, desde la dialogación, entre un niño y un adulto, sino, la realizada, por dos miembros nativos de una misma comunidad. Un micro de gran nostalgia y magnetismo, hasta con música western de suspenso, presentado en dos tiempos narrativos y contextos. Te traje tus cinco estrellas, ganadas a pulso, junto con la justicia de un sheriff, al que se llevan por delante, en favor de la progresión tallerística. Juegas muy bien, Andrés, con los diálogos y las ilustraciones que usas, por tanto, sería recomendable que subieras en las votaciones de este honroso Club de Escritura, como te mereces. Yo te leo, releo, y además te llevo conmigo, entre los textos más originales y auténticos. Felicidades y abrazos, Josan Caballero».

(2) ERA, SOY, SERE: «Amigo Joaquín Pereira, vuelvo nuevamente, para entregarte mi comentario veloz, pero desmedido y audaz, además de cortés e incisivo, pues tu microcuento me parece elocuente y atractivo, por lo jugosos y transitivo de su planteamiento, al mostrarnos a un personaje dubitativo y cambiante de personalidades y oficios, en su misma complejidad social y psicológica, aunque mostrado más, cual una ironía trágica evidente del narrador, que desea exponer las hendiduras del ser humano en sus facetas psicóticas o simbióticas, que lo harán avanzar o retroceder, dentro de la especie humana, susceptible de ser sustituida o renovada. Los dos puntos y seguidos muy bien utilizados, para dar seguimiento y continuidad de los oficios, en que desea desenvolverse este personaje descontento y agónico, que busca transmutar o metamorfosearse cada vez, en una armonía o desarmonía en espiral, un tanto simbólicamente esquizofrénica, hasta desembocar en la postura inocua y sorpresiva de amante, por qué no, y aquí se carga más de sentido el microrrelato, para entrar en un desenlace, a partir de preguntas, sin aparentes respuestas, que, por supuesto, contestará el lector, ya atribuido a la historia, como si fuera otro espectador o personaje. Sólo le agregaría unas palabras a esa suerte de enumeración caótica de frases o acciones, a modo de indagación y cierre sorpresivo, en donde se auto incluye el narrador, o quién sabe, si el autor-personaje: «Dejaré de leer, de escribir, de publicar, de analizar, de cortejar, de amar? Por supuesto que no. Remotamente, venceré al olvido…»
Nunca me ha gustado dar opiniones como éstas, en las que agrego algo más, que aún no está formando parte del texto primigenio, a no ser que actúe de editor o formando parte como conductor de un taller literario (que lo hice, durante varios años, desde 1979 hasta 1984), pero, me parece, estimado Joaquín, que le otorgaría una dimensión mayor a lo que nos propones. No quiero que se vea como una intromisión o una falta de respeto a tu cuento. Al contrario, te lo dije, pues al leerlo tantas veces, casi lo sentí apropiado, y quise darte otra variante, como si hiciéramos un taller juntos, tú y yo, ahora mismo, con tremendos y sinceros resultados. Esa es la magia y fuerza centrípeta que tiene este Club de Escritura Fuentetaja, donde uno comienza a sentir y percibir la sinergia y la energía positiva y coadyuvante de sus integrantes. Igualmente, puedes desestimarlo todo, y olvidar, como en tu cuento, cualquier posibilidad remota de cambio o enmienda, para la posteridad, o la prosperidad, según decía mi tía materna. Saludos y abrazos, Josan Caballero.»

(3) EL APRENDIZAJE: «He llegado por acá, Juan Beneito, pues te mereces tus cinco estrellas ancestrales, gracias a un relato diferente, que habla de los orígenes del hombre y su conocimiento ancestral, pero maravilla la fusión esmerada, entre texto e ilustración, más bien, en el desenfado de los garabatos ¿infantiles?, que se conjugan con las frases, junto al ritmo, antológico y ontológico, de las palabras, cual un poema origenista, o quizá una prosa poética, del primigenio taller, que da paso a las pinturas rupestres, en esta confusión de épocas y planos, que es la vida, cual un aprendizaje al derecho o al revés, pero enseñanza al fin, para otra historia que comienza, sin el «Había una vez…», aunque contiene todo lo que debemos seguir y aprender, como una fábula de los dioses o los grandes de intelecto y corazón. Qué gran juego «vivífero» (pues, jamás mortífero es, o será), entre el infante «Adán» (¿sin Eva?), y el creador adulto, que sólo vocifera, sacándolo (¿sacándonos?), de la gruta ancestral de nuestra historia, permanente e infeliz. Enigmático y fluido tu cuento. Coherente e infantil, siendo otro adulto en juego literario, con la espiral histórica, que genera más luz, al brotar o ser expulsado de las cavernas, cual un niño universal, con su genio e ingenio, para ser y hacer, similar a nosotros, en medio de su infausta tragedia o comedia humana, ¿quién lo sabe? ¡Felicidades, por tu hallazgo, Juan! Me llevo tu mensaje y enseñanza (motriz y matriz), para el reto y resto de mi vida, «per saecula saeculorum», sin Amén. Es verdad, que eres un maestro del relato estructural y de la poesía kármica. Yo te sigo, con todas tus merecidas estrellas, siempre, y cordialmente, Josan Caballero.»

«Has venido hasta acá, Juan Beneito, con tu grandilocuencia y tu verbo peculiar, a eclectizarme (Y por qué no, eclipsarme?) mi BORRADOR BORRADO, pero me gusta esa manera tuya de rodear los textos, con tu cultura enciclopédica y sobrenatural, pues contigo siempre hay más, y es cierto, que «no hay nada nuevo bajo el sol», ni nosotros mismos, por eso, tu abrupta y desmedida manera de dialogar y conjugar todo es tan existencial y apócrifa, que abogo por encontrarme cada día contigo, si no aquí, en mi blog personal (www.josancaballero.news), en el que ya estás, desde ya, invitado, no sólo para comentar, sino también para publicar lo que desees, pues tú eres un ser especial, que decoras con tu verbo y tu frase rememorial todo lo que tocas, lees, y deseas escribir o comentar. Bienvenido a este foro, del que sé, no te irás jamás, y además a mi blog personal, y a todo lo que quieras tú editar. Un abrazo y saludos, Josan Caballero.»

(4) MIS DRAGONES: «Qué maravilla escribir con y desde el corazón, amiga Ginimar. Cierto que «escribir no es empuñar una espada», la más brillante frase, que he leído aquí, pero sí empinamos nuestras almas, en ese ligero intento de crecer y multiplicarnos. Vengo a alcanzarle tus estrellas, aunque ya tengas puestas unas cuantas, diría cientos de ellas, para que las sientas, y las sientes a volar con tus dragones internos e intensos de placer, pues estás alcanzando el objetivo, por el que entraste aquí. Felicidades y saludos, Josan Caballero.»

(5) ESPEJO: «Estimado Alejandro, me gusta el propósito del microrrelato, por la originalidad en su abordaje, e incluso la manera de proponerlo, pero me parece el texto susceptible de amplitud. Más como una reflexión que le faltaría dos o tres frases más de desarrollo, pero, en realidad me gusta cómo encaras la visión de un profesor preceptista, que aún se anima entre los jóvenes literatos, para crear un universo literario, que ni siquiera lo supera, y lo hace continuar en un ejercicio, entre el criterio y la virtud. Me alegra el riesgo y la verosimilitud. Muchas gracias, Josan Caballero.»

«Suerte para ti, igualmente, amigo Alejandro, pues creo que tu microrrelato llegará a las finales del concurso, dada su originalidad y escritura, de modo que espero puedas mirarte al espejo de los premios del Club, lo cual festejaremos ampliamente, al concluirse las decisiones del jurado. Un abrazo y saludos, Josan Caballero.»

(6) AQUI VAMOS: «Querida Alicia, primero, me encanta que, al aproximarme a tu aula o sesión literaria de maravillas, me encuentro con tu inscripción, en el mismo pescante de tu microcuento, cuyo lema se desenvuelve como el nombre, «AQUI VAMOS», y anuncia casi igual sentencia o proverbio que Dante Alighieri, en su «DIVINA COMEDIA», sobre la misma entrada de «El Infierno»: «Olvidad toda esperanza vosotros, los que entráis». No en balde, incluso, descubrimos, que quien inicia el desfile es nada más y nada menos, que quien moderará, arbitrará y conducirá dicho taller, bajo el nombre o alias de «Virgilio», el que se ha dado a la previa tarea de ir conociendo, con determinada maestría y arrogancia, desde fuera, por dentro, a todos y cada uno de los matriculados en su curso de redacción literaria, mientras que ellos, sin conocer o saber la aparentemente macabra o premeditada situación, van apareciendo, dubitativos o hasta sin resquemor alguno, frente al aparente señor mayor, que se ha presentado y sentado primero que los demás, lo cual genera, desde el principio, conjeturas y valoraciones superfluas, sobre su persona y personalidad. Éste es el indicio inicial, que demuestra a una excelente narradora y creadora de naturalezas especiales y de verosimilitud única, sólo apreciables en aquellos que poseen una cultura e ilustración determinada. En segundo lugar, las detalladas y psicológicas presentaciones de los personajes referidos, por un narrador omnisciente, super observador y meticuloso de cada unas de las características anímicas, en el caso de sus posibles interlocutores o talleristas. Luego, al final de la narración, el tercer y último elemento, que acude de manera sorpresiva, con el uso de la primera persona del singular, en su cambio de rol y apariencia ante todos, al presentarte como Virgilio, el conductor del nuevo taller, y a partir de ahí el desenlace desenfrenado denuncia cuento breve, que conserva su prístino candor, pero también una estructura contenida y de evidente fuerza dramática sin igual. Me impactó mucho tu texto, amiga Alicia, y no sólo me lo llevo conmigo, sino que creo debe estar entre los más votados y, sin lugar a dudas, entre los finalistas del II Concurso de Microcuentos del Club de Escritura de Fuentetaja 2019. Un acierto literario y artístico de usted, señora Alicia Prack. La felicito y también me lo llevo. Tu minicuento también podría llamarse, o llevar esta otra inscripción: «PREMEDITACION Y PRESELECCION NATURAL, CON SUBLIME ALEVOSIA». Hay mucho más que decir y aplaudir, pero esperemos nuevos desafíos comentaristas y las conclusiones de un jurado capacitado y rector. Abrazos, Josan Caballero».

«Pues claro, que iré con mucho gusto en unos minutos. Lo que vi también, que ahí te fue la Piky, que no conocía hasta ayer, con el cuento de mi comentario, por su entrada intempestuosa en mi foro, armando una alharaca de situaciones con respecto a mis seguidores y comentaristas, que si tienen obras o no aquí, cuando lo que tendría es que sumar los y no restarlos. Es del miedo que he hablado yo. Quien tiene tiempo para armar revueltos de esa índole, debe conocer bien a su supuesto contrincante, que no lo soy yo de ningún modo. Sólo le dije lo que tenía que saber de mí, que jamás menosprecio, ni descalifico a nadie a priori, ni a posteriori, incluso. Vi y leí lo bien que le contestaste. Gracias, eso me complace, porque este es un foro con libertad de expresión y participación. Válgame Dios, la Piky, sembrando cizaña por todos lados en vez de ubicar y cosechar con su cuento los lauros que desea. Así solamente va a tenerse que decapitar o matar literariamente ella, antes de que su personaje. Me pareces una persona bien interesante, Alicia. Corro a buscar tu cuento y comentarlo. Adoro estos foros, en donde siempre aparecen situaciones y personajes inseguros como éstos. Yo tengo y mantengo obra, seguidores, lectores y compradores. No me pierdo en esas minucias, aunque claro que molestan. Saludos y abrazos, Josan Caballero.»

(7) TALLER MILLENNIAL: «Estimado Igor, antes había venido a concederte mis estrellas, desde el comienzo, pero ahora regreso a comentar tu texto, como cortesía, que debe ser y estar, en todos los casos, pues para eso somos miembros de un Club de Escritura. En principio, la imagen y ocurrencia de insertar a los alumnos y el profesor, dentro de un «Taller Milennial», es oportuna y feliz, junto con el hecho de enmarcarlo en una atmósfera de ciencia ficción. Virtud sine qua non de tu breve relato, por demás, conciso, elegante, bien escrito, y dinámico. Ciertas comas que faltan, pero no hacen intransitable dicho texto y contexto presentado. La mejor sorpresa, el terremoto o derrumbe, que se sugiere hacia el desenlace, que da prueba de sagacidad e impacto narrativo. Ahora bien, lo único que salta a mi vista y comprensión es esto…Cómo, si el texto explica, en sus postrimerías, que, y cito: «Así continuaron, muy animados», luego de un punto y seguido, me usas el «a pesar de que…», cuando debiste, según mi criterio, haberle dado más acción, diciendo más o menos esto: Hasta que, un inesperado (insospechado) estruendo, a escala inaguantable (o algo parecido, pues el autor eres tú), conmovió el recinto, por unos instantes (segundos/minutos), y «tanto los alumnos, como el profesor, yacían inermes, bajo el techo desplomado».
Es un giro feliz, y salvador de la gran historia que lograste, pero que cambia abruptamente, pues la hubieras podido resolver, a mi parecer, con esa vuelta de tuerca, sin necesidad del «a pesar», que no da continuidad, ni movimiento alguno a la magnífica fábula que cuentas.
Ojalá te sirvan de algo mis comentarios, mas, de todas formas, recibe mis felicitaciones y mi abrazo, escoltado de grandiosas y merecidas estrellas. Saludos, Josan Caballero.»

(8) BIENVENIDOS A HOGWARTS: «Llego a traerte mis estrellas, Piluchi, y a saborear la analogía de la mágica escuela de Hogwarts, con el taller de Escritura Fuentataja, en donde las varitas mágicas son sustituidas por las plumas con tinta; y el andén se torna y transforma, cual una página en blanco, a punto de garabatearse y surgir, pleno de letras, con sentido y propiedad, con razón de ser, para hacerse miembros y crear, dentro de un espíritu de cordialidad y entrega a una aventura, sin límites de tiempo y espacios transgredido, para transmutarse y florecer. Muy buena comparación de sitios, instrumentos, elementos, personajes, enlaces, miembros y objetivos, por el solo beneficio de la creacción y la multiplicidad de funciones. Pura magia y resurrección de vida. Te felicito, por tu entrega y visión de logros, Josan Caballero.»

(9) GATOS: «Tu cuento, Luis L. Lehnhoff, está construído, en el marco de un taller de Escritura, entre dos voces narrativa que alternan igualmente el método heurístico, heredado del Catecismo, con las preguntas y respuestas y comentarios intercalados, entre alumno e instructor, que no estorban ni confunden para nada, y además otorgan un dinamismo especial al texto, además de ese humor negro y ácido que lo circunda, con un profesor del taller agudo e incisivo, y un tallerista audaz y atrevido, que no se calla nunca y agrega tonalidades grotescas y cargadas de descripciones duras y dramáticas, hasta que el instructor circunda dicho diálogo mordaz, con una pregunta final sobrecogedora y espeluznante, que podría sacar de quicio al imprudente y desenfadado principiante, quien se enorgullece de su relato, y a la inquisidora indagación de su profesor, le responde con otra descarnada frase metatextual, cargada de doble sentido, y plasmando su verdadera y sarcástica personalidad, perfectamente definida ante la instrucción desmedida y urgida de aquél, que además lo sonsaca y quiere sacarlo de sus casillas: «¿Qué hiciste exactamente?… Literatura!» Nada más analógico por oposición que eso. Él no mató, ni desoyó a nadie, jajaja, menos a un gato. Él siguió al pie del taller y de la letra las instrucciones de su maestro capacitador. Tú, en cambio, hiciste verdadera «literaturidad», como dicen los formalistas rusos, con mayúsculas: Literatura, dentro de la literatura, un magnífico y entrañable metatexto. Un agudo y maravilloso cuento, digno de este gran premio del jurado calificador, que te abre las puertas de tu carrera en todos los términos. Felicidades, amigo Luis. Enhorabuena! Saludos y abrazos, Josan Caballero.»

(10) MI PRIMERA LECCION: «Espléndido relato el tuyo, Henar Tejero. Ya fui a entregarte mis estrellas y colocar mi mensaje enaltecedor. Con tanto trabajo multidisciplinario, no había podido regresarlo. Gracias por venir aquí, a traerme tu regalo, que unos cuantos dicen, no merezco. Pero, como no soy resentido, y escribo para que me lean las multitudes, no un coto cerrado o gremio literario, veo que continúan aumentando las vistas y las lecturas, que no es lo mismo, conjuntamente con las estrellas, que igualmente son valoraciones justas, vengan de donde vengan. ¿Y este taller se practica y constata, en la realidad, o en la virtualidad y la ritualidad de las redes sociales? Somos seres virtuales y sociales. Somos seres reales y virtuales, en tanto armamos nuestra «legión de fans», según me dijo alguien por acá; y también seguidores, que en definitiva son o serán nuestros lectores, como vengo haciendo hace diez años, con mis blogs, y otros medios de prensa, y hasta plataformas digitales. No hay que criticar, ni temer a eso. Un escritor, además de lector y tallerista, es un «influencers» más. Lo que tenemos es que estar a la altura de los tiempos y las tecnologías, sin desdorar o denostar a nadie. Es hora de romper esquemas y paradigmas, que la literatura fluye por las calles y ventanales; por las autopistas digitales, y, por suerte para nosotros, no se encierra en talleres, bibliotecas, libros, ni catedrales…Un gran saludo, por tu maravilloso texto, Henar, un verdadero descubrimiento, que merece muchas estrellas y otras bondades. Abrazos, Josan Caballero.»

(11) PALABRAS PARA EL CLUB: «Estimado Julián, acaparo tus sensibles y agradables comentarios, al igual que te digo que ya te he salpicado de sublimes estrellas, desde el comienzo de las votaciones, en mi caso, y hoy, con varios de mis colaboradores y «fans», como ya le dicen a los seguidores de un blog que tiene más de 2 millones en diez años, pues ya que me tildan de promotor de votos a favor de mi BORRADOR BORRADO, entonces debemos resaltar otros textos igualmente excelentes, que no tienen la promoción adecuada, y nos parecen susceptibles de ser comentados y exhibidos, entre los que entran en mi blog o frecuentan estos foros, para entregarles estrellas tangibles y memorables. Espero que te des cuenta, desde que conversaste conmigo, cómo aumentaron tus votos y estrellas. Te aplaudo y enaltezco como debes, mi panita. Yo soy cubano, pero viví 14 años trabajando y disfrutando de tu Venezuela querida. Entra, cuando quieras, en mi blog personal (josancaballero.news) y verás cuántos poemas acrósticos, al igual que artículos, he creado y publicado sobre este gran tema de la que considero mi segunda patria. Saludos y abrazos, Josan Caballero.»

«Encantado con tus palabras, estimado Julián, pienso lo mismo que tú, hay muchas formas de lograr el éxito, y hay quienes suben, para luego descender, en cualesquiera de las formas posibles, habidas y por haber. Lo que importa en determinado concurso es llegar a demostrar, que eres bueno en lo que haces, ya que los certámenes tienen siempre que ver con los gustos personales, pues se juzga, según la apreciación de las cosas, que tenga cada cual, al igual que nosotros; y ello jamás define el sentido de ser el mejor, sino el concepto general de lo que se desea en ese colectivo justipreciador. Tu definición como creador y promotor de tu obra la tienes tú mismo, con la apreciación de los lectores y el balance de la crítica, tanto en la prensa acreditada, como en las redes sociales. Por eso creo, que nosotros ya hemos ganado, en este Club de Escritura o taller virtual, y lo prueban las estrellas y comentarios, que se reciben diariamente, lo cual amplía el horizonte de expectación de muchos, dentro de este foro, conformado por 651 textos presentados, además de la opinión, certera o no, de todos los que participan de este gran debate y coloquio multivalorador. Te saludo y aplaudo, por ese cuento breve tuyo, humorístico y multicolor, Josan Caballero.»

(12) CONECTADO: «Estimado Guillermo, vengo a dejarte cuatro merecidas estrellas, como te prometí, pues creo que estás en tu oportunidad de oro y de pescados vivos, dentro de este certamen, en que lo principal es el taller, pero también la capacidad de respuesta ante la página en blanco, y la retroalimentación del creador, quien se niega a perderse, en ese mar sin respuesta, en ese inmenso océano cerrado y libre, que es la página en blanco, pues un escritor es como un pescador, que debe dominar su cara de pescar y su anzuelo, además de saber dónde se coloca para pescar sus ideas y palabras, si ya se sabe, que la escritura es una suerte de vasos comunicantes, en donde el autor pone su primera piedra, que se convierte en letras, que son estrellas, cual miguitas de pan, que nos muestran el camino de regreso al corazón, para encontrarnos los peces, que llevamos dentro de nuestra alma, que es parecida a una gran pecera, a modo de libro interminable, en que hacemos saltar nuestros «pescados vivos», como dijo el apócrifo de Antonio Machado, el Don Juan de Mairena, que nos dejó esto escrito, para siempre: «El poeta es un pescador. No de peces, sino de pescados vivos. Entendamonos: De peces que pueden vivir, después de pescados»…Como puedo darme cuenta, tienes ese don literario, para crear una atmósfera narrativa especial, por tanto, ya superaste, como dices, la etapa transicional del «borrador borrado», de manera que podemos encontrarnos con un texto, no conseguido totalmente, pero cuya fuerza narrativa nos conduce a esperar mejores resultados en los próximos relatos que pretendas crear, para constituirse en un gran narrador, que nos cautive y conmueva para siempre. Estás ya en el camino de las letras, con un mensaje alentador, y claro que nadie ya te extrapola o extirpa de esa meta. Jamás serás un «borrador borrado», pues tienes esa fuerza y valentía, que te permite atravesar de una a otra orilla del arte creactivo, hasta que consigas el objeto literario deseado. Saludos y abrazos, Josan Caballero.»

«Excelente y sensible todo lo que dices, Guillermo, con un apellido memorable y productivo, afín con nuestro oficio de amasar las letras y las palabras, para cocer el pan literario. Somos los panaderos de la creacción, y me enaltece todo lo que escribes, y cómo lo haces. Somos la suma de muchos «borradores borrados», pero lo valioso está en que no nos contentamos con eso y avanzamos, para ser cada vez mejores. El que mucho de los talleristas y miembros del Club se vean y reflejen en el contenido de mi relato, me enorgullece, pues da certeza de que escribí y escogí el texto correcto, porque, como dijo un colega de acá, Sebastián H., que tire la primera piedra quien no ha sido jamás «borrador borrado», o, incluso, sepultado, en la difícil carrera de llevar su piedra literaria o manuscrito, hasta convertirla en estrellas, como aquí se hace ahora, entre microcuentos y votaciones. Claro que voy, con mucho gusto, a regocijarme con tu relato, y dejar mi gramo de estrellas, para que continúes en este camino, como dices, que es realmente la meta. Un aplauso por tu comentario lúcido y con infinita luz y tierra fértil, transformada en estrellas. Nos vemos nuevamente en tu foro, que continúe la sinergia y las vibras positivas, hasta llegar a la cima, con todas las estrellas. Saludos y abrazos, Josan Caballero.»

(13) CAMINOS EXPRESIVOS: «Estimada María Esther, yo me he leído más de una vez los 650 microtextos, y por supuesto el mío, en enésimas ocasiones, gracias a mi adiestramiento, dentro de la Lectura Rápida o Veloz, un método verdaderamente eficaz, que auxilia muy bien a los editores o lectores editoriales, oficio que desarrollé, durante varios años, en Cuba, y que me permitió cierta ayuda económica, antes de dedicarme a la dramaturgia y la dirección teatral, con mi grupo Teatrova. Igualmente, los talleres para narradores de cuentos, exhortado por la Biblioteca Nacional de Cuba, la difundida Peña Literaria del Parque Lenin, o los sucesivos Encuentros de talleres de apreciación y creación, los Seminarios de Estudios Martianos, en los que participé y conduje, durante más de diez años, en Cuba. Quiero decirte, que resalto tu comentario a favor de mi relato, por el hecho de inmiscuirte en conceptos más científicos y de teoría literaria, propios de los estudios filológicos, relacionados con el meta texto o la literaturidad, que muchos escritores, aún aplicándolos, no los conocen a cabalidad, por tanto, se pierden en la naturaleza de los conceptos, e incluso, de los anticonceptivos. Sin embargo, en tu caso, respiro un manejo científico e intelectual de estas definiciones, apropiadas por una mente privilegiada, que sabe lo que está diciendo y, por tanto, lo aplica con naturalidad y desenfado, para resaltar las bondades o aristas intertextuales del BORRADOR BORRADO, que mucho tiene que ver, clara, espiritual y elípticamente, con Jorge Luis Borges, Julio Cortázar, Franz Kafka o Milán Kundera, por citar algunas de mis lecturas más recurrentes, pero al mismo tiempo, resulta un homenaje evidente y una reinversión contenidista y expresiva de esos eternos «borradores borrados», dentro del camino de la creacción de manuscritos, incunables y hasta en su versión editorial, que han tenido o pierden su identidad, sin poder facilitar su salvación escritural. Voy corriendo a votarte y comentarte, pues también, en mi desconocimiento de algunas reglas del certamen, pensé que sólo podía votar diez veces, y a partir de comentarios de los miembros del taller, entendí que nosotros podemos votar a muchas otras narraciones, por nuestra condición de talleristas y participantes escritores de los microcuentos. Siento gran devoción por quien entrega su conocimiento al servicio del esclarecimiento y ampliación intelectual de la comunidad, por eso, no sabes cómo te agradezco. Saludos y abrazos, Josan Caballero.»

(14) EL ATASCO: «Estimada Pepa H., pues muy complacido con tu comentario y con tu microcuento, al que ya he votado, desde el comienzo. Sólo que no te había dejado el mensaje y valoración que mereces, como haré hoy, tanto en mi foro, como en el tuyo, que es como debe ser: una distinción mutua, sobre todo, cuando alguien ofrece un nivel de lucidez apreciable y contundente, al analizar y comentar en torno al BORRADOR BORRADO. Tu texto, además de derrochar un humor implícito impresionante y una caracterización del protagonista muy afectuosa y simpática, nos interna en una forma de narrar súper original y sincera, además de sencilla y amena, muy ocurrente. Según mi criterio, lo que escribiste tiene todas las señas y prodigios, para lograr mejores y mayores puntuaciones, tanto como valoraciones y evaluaciones contenidistas y formales mucho más memorables, que las que aún tiene. Gozas de buena salud, en lo concerniente a conseguir un perfecto clímax con tu texto, muchísimo más que otros, que ya aparecen con puntuaciones superiores al tuyo. Yo espero hacer un comentario más amplio, cuando te haga la cortesía de entrar en tu foro, amiga mía. Saludos y abrazos, Josan Caballero.»

(15) SI HACE FALTA: «Estimado Sebastián H., ya fui los otros días a votar por su microcuento, y lo que dice usted es muy correcto y concienzudo. Quién dijo que lo filosófico y la tragedia de un lector-escritor borrado es ajena a un taller de Escritura, aunque no se nombre o mencione la palabra «taller». Es agarrarse por los aires y a la deriva, en la desesperación y el miedo por no llegar a sus metas. Cada cual tiene la suya, y en mi caso, sin arrebatarle a los demás nada. Quieren montar una cacería de brujas, mejor dicho, una cacería de «borradores borrados», por el solo hecho de estar en la avanzada de los textos más votados. Algun interés tienen, cuando entran varios en mi foro, indistintamente, para aleccionar me y provocarme. Esa es una actitud desleal y contrastable con el espíritu de este Club de Escritura. Señal de que se sienten inseguros de sus textos y sus votos, sean los que sean. Agradezco la gentileza y el acierto de sus comentarios. Saludos y abrazos, Josan Caballero.»

«Eres muy gentil, ya te dije en cierta oportunidad, Sebastián. Te lo vuelvo a repetir, puesto que llegas otra vez con un mensaje alentador y entusiasta, que no coarta o desvirtúa al «Borrador Borrado», sino que lo ensalza y envuelve dentro de un marco implícito, que puede lo mismo hallarse, en b el marco de un taller literario, como dentro de un aula creativa; tal vez en un estudio fotográfico o en la sala de su casa. Eres ese tipo de escritor-lector, que confabula la narración, en favor de su engrandecimiento y sustentación como obra de arte, no formando parte de una especie de cortejo o aquelarre demoníaco, que pretende desmoronar sus valores intrínsecos, y desbarrar de un cuento que sobresale, en todas sus formas y normas contenidistas, formales y lingüísticas. Gracias una vez más, lo saluda, cordialmente, Josan Caballero.»

(16) LA TAREA:  «Más que «Crear, borrando», amigo Roberto, es «Crear, enmendando», porque la base del escritor es la edición y la enmienda: el verdadero resultado es más con la goma de borrar, que con el lápiz o la pluma, ya que un creador se hace dentro de esa doble conjunción, pero sin agotarse, ni eliminarse del todo. Dejar sólo la flor, nada de hojarasca. Hay que saber limpiar y podar, con maestría, pero sin reducir lo esencial, no eliminarse o extinguirse en su totalidad. La obra de arte es un resultado, una conjunción de elementos disímiles, que hacen que precipite, en un logro armónico y cerrado. Te agradezco tus estrellas y tus comentarios, amigo Roberto. Valga la salvedad, que mi texto enjuicia y da algo de vida al BORRADOR BORRADO, para que no pase como con los cobardes, que de ellos no se ha escrito nada, sino sólo eso: Que no se ha escrito nada, jajaja…Al menos, mi microrrelato honra a esos «borradores», que se han quedado en el camino, o dejaron de existir, por la inexperiencia o el desaliento de muchos «borrados», que no supieron ser perseverantes y saber contentarse con su logro esencial, en la página en blanco. Aquí está la constancia de que se debe insistir y persistir, para llegar al logro finalmente. La perfección total no existe, ni en los grandes, es una suma de logros tangibles e intangibles. Agradezco tu gentileza y te abrazo, Josan Caballero.»

(17) EL TAYER: «Qué gran energía y movimiento tiene esta colmena viva de escritores con talento, este Club de Escritura, en donde parecemos abejas obreras o niños acabados de tener y mostrar a otros su juguete nuevo. Eso es lo que más me fascina de este taller creactivo, que nunca perdemos la fe, ni la esperanza de crear, de enmendar lo menos hecho, de reunirnos, y construirnos (y hasta deconstruirnos), como artistas y hombres nuevos. La magia de la Escritura es la lectura, Maritza, por supuesto, pues tanto hay que agradecerle a Michael Ende, en su HISTORIA SIN FIN o INTERMINABLE, si los escritores somos esa dualidad competente del emisor-receptor, siempre pendientes. Y qué maravilla para un escritor sentirse leído, abrigar el sueño realista interminable de ser recompensado con la lectura de alguien, que te devuelve la felicidad de haber escrito. Es un servicio espiritual y armónico que se completa y repleta para siempre. Gracias por colmarme con estrellas, y calmarme, para entender esa magia también de no haber sido un pobre BORRADOR BORRADO, ya que la escritura es agonía primeramente, ante la página en blanco, pero luego se convierte en felicidad plena y rotunda, cuando ves tu acto creactivo realizado, y lo lees. Mucho mejor, y más impactante, cuando te leen y aprecian lo escrito. La base de toda creacción es la humildad, pues te hace crecer y multiplicarse, como los panes y los peces de Pedro y Jesús. Te abraza y felicita, igualmente, Josan Caballero.»

(18) ESCRIBIR A CUALQUIER PRECIO: «Amiga Eli, claro que sí, confluimos en ciertos puntos, porque todos los que estamos acá siempre le hemos temido al pecado nada original de repetirnos o no contentarnos con lo hecho, y por eso pecamos de ser borradores borrados, pero lo interesante es, que a fuerza de talento e insistencia, vamos bregando de esta falsa dubitación y ascendiendo, hasta ser mejores o hacerlo mejor, pero jamás perfecto, con nuestras piedras o estrellas, cual Sísifos eternos de la Escritura creactiva. Te agradezco tus estrellas, pues ya yo te las había puesto. Encantado y feliz de conocernos, te abraza, Josan Caballero.»

(19) SUEÑOS CON PALABRAS: «Estimada Saida, en primer lugar, me encanta tu bondadosa disponibilidad de palabras y tu inteligencia desprendida y rotunda, para saber compartir, conversar e inquietarse con situaciones literarias y extraliterarias, que competen a talleristas y escritores implicados y complicados, con la naturaleza del arte y sus reglas inexplicables, por eso, claro que me agradaría debatir diversos temas contigo alrededor de varios cafés o copas del mejor vino español, italiano o chileno, comprometidos en llegar a resolver al menos lo concerniente a la estabilidad de una escritura seria, más allá de este Club de Escritura, valiendo el pleonasmo y la redundancia de hablarnos o comunicarnos, más que escribirnos, para llegar a una sinergia colectiva y feliz. Un abrazo y seguimos en contacto, más allá de estos predios, querida Saida, te abraza, Josan Caballero.»

«Una sorpresa tu segundo comentario, estimada Saida. La verdad, que aquí permanecen y han llegado disertadores, articulistas y comentaristas de lujo, ya que siento que es éste un foro, que no tiene nada que envidiarle al de sitios renombrados de teoría y praxis literaria. Imagínate, que en estos días entro más a este foro, que a los de mi blog personal www.josancaballero.news, al que por cierto podías llegarte, comentar y dar a conocer lo que desees de esas teorías maravillosas que exhibes y de que hablas. Yo leí y escuché muy bien tus palabras habladas cantadas, que tienen mucho que ver con el espíritu y el contenido de las obras que creé para mi grupo TEATROVA DE CUBA, del que fui dramaturgo, director artístico y mánager de 1989 hasta el 2000, y cuyas obras teatrales y musicales, muchas de ellas, daremos a conocer próximamente, en formato papel. Si me haces llegar un correo, te envío fragmentos de ellas, y compartimos las tuyas, junto a comentarios y análisis más apropiados, fuera de este set o foro de artistas. Mi correo es travesiadelcaballero@gmail.com y podemos disertar de todos esos y otros temas. Puedes entrar a mi blog y buscar en la parte derecha las secciones ELOGIO DE MI LOCURA y ESCENOFERIA, entre otras. Saludos y abrazos, Josan Caballero.»

(20) MATAR AL PERSONAJE: «Vine a traerte mis estrellas, Piky, pues, como soy un profesional, sé valorar lo que vale, y creo que tu cuento merece sus estrellas, además de una valoración justa y pertinente, de modo que me complace leerte y llegar acá, para justipreciar uno de los relatos, que se halla en el ranking de los veinte más votados. Viva el personaje, que no hay manera de matar, pues enamora y convence, aunque le falten algunas comas, otros signos de puntuación, como en estos casos:
«Lo había amado(,) a escondidas(,) entre frases…»
«Fue tras él(,) con su lápiz(,) llorando…»
«Si él moría(,) todos(,) los que lo leyeran(,) morirían»
«Era SU relato(:) ¡Joder!»
«Si un personaje se vuelve real(,) ves…»
«NO es de hierro(:) ¡APROBADO!»
Es cierto, que en ninguno de los casos, estas pausas y cesuras, que faltan, no dificultan la comunicación, ni el desenvolvimiento normal del texto, en general, pero, realmente, según una edición correcta, deben estar ahí.
En ningún modo, he querido molestarte, ni ofenderte. Al contrario, vine a limar asperezas y entregarte mis «vivas», para tu cuento y personaje.
Me parece extraordinario encontrar síntesis, originalidad y fuerza expresiva, que lo hacen uno de los grandes candidatos a alzarse con alguna precea, entre los mejores del certamen. Y qué argumentar del juego expresivo y multimédico con las imágenes, el cual me parece adecuado y sorprendente; uno de los más ingeniosos y adecuados, que jamás choca o desentona; al contrario, le otorgan agilidad y fuerza; dinamismo global, al texto, cual un compacto todo, que nadie podría separar. Esa es una de las mayores virtudes de tu obra, a mi modo de ver, que no ocurre en ningunos otros casos, en que las imágenes aparecen como un relleno o accesorio, sólo para adornar, incluso, contrastar.
Te felicito y reitero mi complacencia de acompañarnos dignamente, en este Club de Escritura, al integrar ya, sin lugar a dudas, el TWENTY TEN, de este II CONCURSO DE MICROCUENTOS DE FUENTETAJA. Saludos y abrazos, Josan Caballero.»

«Estimada Piky, no me ha agradado nunca entrar en diatribas o discusiones paralizantes, cuando se trata de literatura y creación, menos en el medio o transcurso de un certamen tan simple como éste, que tampoco le resta valor, ni personalidad. Pero debo aclararte, en primer lugar, que no soy un señor principiante de sólo un microtexto y un blog personal, de diez años de duración y mantención ininterrumpida, con alrededor de 2 millones de seguidores asiduos y comentaristas, que siguen y valoran la creacción de un poeta, narrador, periodista, diseñador, editor-publishers, investigador, dramaturgo, director artístico, profesor universitario, lector editorial, conductor de talleres literarios, que ya, con treinta libros editados, tuvo la osadía y la simpleza de participar con el primer microrrelato que escribiera el mismo día, en que comencé a concursar en este prestigioso Club de Escritura Fuentetaja, el 11/1, a instancias de mi amigo periodista y narrador, el venezolano Alejandro Bozo Cohen, que me envió el link de su cuento breve, para que lo leyera y comentara, no sin antes «embullarme» a participar. Si buscas en los comienzos de mi participación, muchos de quienes tienen textos dentro del certamen, entraron a mi foro, después de que yo comenté en el de ellos, y mi persona, aprovechando la herramienta comunicativa y promocional de su blog personal, que se encuentra cumpliendo diez años, desde el 15 de abril del 2019, además del hecho de contar con verdaderos lectores-comentaristas y amigos, que he contribuido a desarrollar, pues me di a la tarea de promover y fomentar mi foro de comentarios, que tampoco es ilegal, ni me convierte en un doble ser vivo, dentro del certamen, ya que todos tenemos el derecho y la posibilidad de invitar a comentar a familiares y amigos, conocidos, seguidores, amores (lectores, artistas o no), para que sean capaces de dar su opinión y exponer sus ideas sobre mi cuento, como el de los demás concursantes. Eso sí, no soy Josancito, el huerfanito de fans, amigos, seguidores y familiares, sino alguien que trabaja y ha trabajado arduo en sus redes sociales, blogs y obras literarias reales, aunque a lo.mejor no tan conocidas, pero sí perpetuas y contundentes, desde hace cincuenta años de vida artística, mi amiga Piky, lo cual tendrías que haber hecho, primeramente, antes de hablar o escribir sin saber, pues para conjeturar y criticar, en verdad hay que indagar, sin establecer resquemores o criterios a priori de alguien, quien, desde que entró en este foro o Club lo que ha hecho es fomentar y establecer válida competencia y productividad de mensajes y debates fructíferos, jamás paralizantes, ni denostadores de ningún concursante u obra en particular. Creo que debes centrarte en tu texto en particular, y en sus valores polisémico e intrínsecos, no en si alguno de los demás que concursan logran mayor tráfico de comentaristas y participantes dentro del debate de sus microcuento, en buena lid, no deshonesta, ni maliciosamente, haciendo el giro del quítate tú para ponerme yo. Te sugiero o exhorto a que te introduzcas en mi blog personal, lo suscribas o no, y leas mi ficha biobibliográfica, llamada ELOGIO DE MI LOCURA, o parte de mi bibliografía activa y pasiva, hasta el año 2009 nada más, pues, inclusive, debo actualizarla, desde que empecé mi blog personal, y que titulé EL PESO DE MI ISLA, CUANDO ESCRIBO…Pero, sobre todo, uno de mis textos fundamentales, que es el descubrimiento de los plagios de Alga Marina Elizagaray, que aparece al inicio del blog, en seis piezas investigativas, de un ensayo monográfico, titulado TANTO VA EL CANTARO A LA FUENTE, donde le demuestro, con investigación irrefutable el latrocinio literario de 36 autores y 44 títulos diferentes. Eso demuestra perseverancia , lectura concienzuda, investigación, y además talento y valentía, lo cual engendra un respeto de los lectores y seguidores, pero también una responsabilidad de mi parte, a la hora de mostrar mi continuidad, sin rupturas. Creo que te he demostrado, brevemente, mi suficiencia, no la autosuficiencia insuficiente, en la que creías al posible «escritorcillo de marras», creador de un solo microtexto hace quince días. Por supuesto, que ahora voy a leerte y a comentarte, que es lo que más me encanta, como a los fans y seguidores que participan conmigo y junto a mí, aunque no tengan casi o ninguna obra, que no es un pecado tampoco de lesa literaturidad. Léete además mi breve biografía de mi perfil, que creo tampoco leiste, lo cual sí es un pecado de lesa ingenuidad, para no usar una palabra o adjetivo más adecuado a tu forma, nada diplomática, de entrar en este debate absurdo, para lograr alguna revancha, que, evidentemente, jamás lograrás. Saludos y abrazos, Sra. PIKY, atentamente, JOSAN CABALLERO, seudónimo literario del escritor cubano JOSE ANTONIO GUTIERREZ CABALLERO.
P.D.: Por el título de tu minicuento, MATAR EL PERSONAJE, me sugieres muchas cosas, y espero no sentirme defraudado, como con tus comentarios, para solicitar o lograr comentaristas y lectores, ganados o arrebatados finalmente, de este foro, para el tuyo, lo cual puede ser, pero no es justo, aunque todo es sencillamente astuto o legal.»

Premio Dotado con el videotaller «Encontrando una historia» de Antonio Muñoz Molina

Premio al autor más votado por los miembros del Club

«BORRADOR BORRADO», de Josan Caballero

Era un lector, que pensaba en escribir. Lo hacía de una sentada y sin pensarlo, pero luego lo leía y empezaba a borrarlo, hasta no quedar nada, para compartir consigo mismo. Quería hacerlo perfecto, y no quedaron los manuscritos, ni los relatos de sus pensamientos. Un lector, que pensaba escribir, pero no sabía cómo leerse a sí mismo. Jamás quedó ni una constancia de ello. Fue sólo un borrador borrado.

Microcuento presentado el 11/01/2019

Por haber obtenido 758 votos, 1.473 lecturas y 350 comentarios (al 8 de enero del 2020)

Premio Dotado con el videotaller «Relatos con perspectivas; relatos sin preceptivas», de Ricardo Menéndez Salmón

Obras seleccionadas por el Jurado en última ronda (por orden alfabético)

1. Abel Valenzuela García, con «Los muertos vivientes»

Todos los días mataba dos o tres novelas negras. Al salir de la oficina, me metía en la morgue y hacía las autopsias con otros asesinos en prácticas.

Disuelta la carne, quedaban por fin los huesos.

Al año y pico le pillé el truco: los silencios entre costilla y costilla susurraban una historia. Así empezó mi amistad con los necrófagos.

Al parecer, aquellos engendros tenían el mismo vicio que yo: hablar del tuétano les dejaba un regusto a carne humana, y salían corriendo a contarlo.

2. José Alberto García Macho, con «El tiburón»

Hoy toca autoficción.

Raquel evoca el parto de su única hija. Julia relata con emoción una crisis de pareja provocada por sus celos, que reconoce infundados. Pedro recuerda un accidente que por poco lo mata.

Laura recrea un encuentro de una noche. Ambos estaban casados y se pregunta por qué engañaron a sus cónyuges. Describe el tatuaje que aquel hombre tenía en la ingle, un tiburón nadando entre los pliegues de su bajo vientre.

Julia rasga las hojas de su relato y abandona el aula, llorando.

3. Rubén Marzo Alarcón, con «Conflicto»

—¿Has mirado dentro del armario también? —pregunta la tutora al alumno.

—He mirado por todas partes: debajo de la mesa, en las estanterías, incluso detrás de la pizarra, y no está —responde el alumno.

—Pues entonces seguimos igual, inmersos en una mera anécdota, sin historia.

El Jurado también quiere destacar los siguientes relatos

A. Amanda Smidth, con «Golpe de efect

—Te regodeas en tu amante de «la vie en rose» hasta el empalago, pero sólo explicas. ¡Crea acción!— Dijo el viejo profesor mientras Lulú torcía el gesto y una vez más se disponía a reinventar el cuento.

Alumna aplicada entregó expectante, ansíando una nueva impresión.

—Aprendes rápido— acertó a decir el profesor mientras se aflojaba la corbata y se limpiaba unas gotas de sangre que corrían por el cuello tras zafarse de las fauces del amante francés que todavía sentía mordiéndole la yugular.

B. Antonia de la Luna, con «La historia que tanto esperé»

Emma era la mejor escritora. Decidió dejar su pasión para dedicarse a su familia.

Le pedí que cogiéramos un taller de escritura, pero se negó. Tomé el taller, escribí esperando que retomara algún día.

Pasaron treinta años cuando la encontré comprando mi libro. Tan bella y tierna como siempre. Estaba separada y sus hijos ya adultos.

Me atreví a confesar que mis historias eran para ella, sonrió coqueta. Le rogué que volviera a escribir, y aceptó darme aquella historia que por tantos años esperé.

C. Benjamín Cienalmas, con «Estornudos»

Es una especie de acto involuntario, como el estornudo. Uno no elige cuando estornudar. El impulso me domina varias veces por día. Me sucede en el trabajo, en la cola del supermercado o cuando estoy a punto de dormirme. Si pudiera evitarlos no estaría aquí, pero como le decía, profesor, son estornudos.

El profesor bajó la mirada para revisar las líneas que le había entregado y con voz pausada me dijo: No está mal, por el momento sigue estornudando, el estilo llegará con el tiempo.

D. Eugenia Zorrilla, con «Sobras»

Siempre me quedo hasta el final. “Dejen que acomode yo las sillas. Me quedó ese TOC de mi trabajo en Mc Donald´s”.

Nadie tiene por qué saber que digo lo mismo en los cinco talleres de escritura a los que asisto en la semana. A los meses abandono y me anoto a nuevos, en igual cantidad. Tampoco se percatan de cómo guardo en mi morral fragmentos descartados u olvidados de los alumnos.

Hace tres años que así mantengo viva a mi culebra: dos huevos de gallina y una ración de palabras ajenas al día.

E. Graellsia, con «Best seller»

Ella le confesó en el patio el argumento de su próxima historia. Él la cubría con su abrigo. Habían sido tres meses de taller en el que ella no había escrito ni una palabra. El resto de las presas se habían agarrado a sus lápices como un salvavidas. Estaba prohibido saber el historial de las alumnas. Pero él sabía que las manos que ahora tocaba habían descuartizado a su amante, el gran escritor J.L. Goldman. Tocando su piel ya podía sentir el olor a tinta recién impresa. Había merecido la pena.

F. Jesús J. Prensa, con «Una espera»

Su pregunta es de lo más estimulante.

Nos separan tres mesas en este taller de escritura.

Me muevo hasta la siguiente mesa, desde donde observo mejor.

Me ha mirado.

Sonríe, también. Quedan dos mesas. Llego a la penúltima, avanzo hasta la última. No queda nada. Me siento ante ella, pregunto muy cerca.

Pero no es ella todavía, lo sé.

Nos separan tres meses, el tiempo de duración del taller.

Hoy empezamos.

Tendremos que conocernos mejor.

Vuelvo a mi mesa, recojo. Todos recogemos.

Pero espero.

G. Jorge Machado Obaldía, con «La consigna»

Esa tarde debíamos escribir un cuento breve, de tema libre.

Por mi parte, no había tenido un buen día: la nieve apagaba los desiertos, los pingüinos hervían de fiebre y fundían el menguante hielo, las vacas devoraban a los granjeros, las aves obstruían los caminos, capas de insectos cubrían las ciudades.

Al terminar, cada uno debía leer en voz alta lo producido.

“Deshágase la luz”, exclamé cuando llegó mi turno. Todo el caos, talleristas incluidos, volvió a la nada.

Y vi que aquello era bueno.

H. José Luis Chaparro, con «Corrección de estilo»

Es tarde; salimos.

El profesor ignora que un tipo espera en la calle para descerrajarle un tiro en la nuca. Es el protagonista de mi relato. No es mi estilo, pero lo escribí como venganza por hacer visibles mis errores. Lo siento.

—¡Debo volver a entrar! —grito vehemente.

Abro mi bloc de notas y corrijo: «Apunta a su cráneo y presiona el gatillo. Su cabeza explota». Pero el arma falla».

Ya está. Lo acompaño afuera.

Suena un «click» a nuestra espalda.

Y unos pasos que se alejan a la carrera.

I. Juan Cristóbal Espinosa Hudtler, con «Efecto crisálida«

Isidro ya es Flaubert, como lo prometió al llegar aquí ̶ dijo Emma, la profesora ̶ . Es igual. De tanto ponerse aceite de oliva, su bigote es de morsa; de tanto pensar, su cabeza está calva y… ¿Su barriga? !Prominente! Habla con elegancia, viste como si fuera del siglo XIX. Escribe con precisión y revisa hasta el hartazgo. Expresa lo justo y con gran delicadeza. Lo malo es que no me ha convertido en Madame Bovary, sino en Salambó. Todos, en ese instante, distinguieron su propia metamorfosis.

J. Lili, con «Una pizca de sal»

Cuando finalizó el taller de escritura me anoté en el de cocina. Fui la primera en llegar, los errores de la receta del día en la pizarra me horrorizaron. Procuré corregirla: agregué y quité tildes, eliminé adjetivos y, como la palabra “sal” me parecía muy solitaria, le agregué “del ácido cianhídrico”, que me surgió tal vez de algo que había leído en el taller anterior. Nadie me negará, Usía, que así quedaba mucho mejor. Sé que murieron todos, pero ¿cómo iba yo a saber que eso significa cianuro?

K. María Nélida Pedernera, con «Consigna»

No fue fácil. En Mercado Libre encontré muchas ofertas de devanadoras de lana pero ninguna que pudiera devanar cerebros. Tuve que hacerlo, a la vieja usanza del cuento de la Bella Durmiente, con huso y rueca. Y no resultó sencillo hilar primero los resbaladizos y ligeramente sangrantes sesos para luego ovillarlos de forma que el tejido del texto se hiciera posible y así cumplir con la tarea que la coordinadora del taller de escritura nos propuso: tomar una frase hecha en sentido literal.

L. Paqui Martínez, con «El taller de escritura»

Cada lunes acudo al taller de escritura en vez de tenerte entre mis brazos y hacerte el amor. Ocupo ese tiempo que ayer dedicaba a amarte. Antes, sentado en aquella barra, inicio el ritual, el camarero cojo me desprecia, me sabe perdedor, <¿vas al taller de escritura?>, ¿cómo no decir sí?. Después subo a la planta que hay encima de mi oficina, me siento frente a ese «¿excornudo?» y le oigo hablar de estilos, de metáforas. Yo siempre estoy callado, recordándote. Hace tanto que me dejaste.

M. Polanesa, con Qué escribir cuando estás escribiendo (o cómo ser feliz sin intentarlo)

«No se puede narrar la felicidad», escribió Libertella o quizá fue Tolstói. Yo escribía mucho cuando (no sabía que) era feliz. Escribía bien. Hoy busco un indicio o una nota al pie, pero solo pienso en paráfrasis. La desdicha me aburre, me fastidia. Quiero romper las reglas hipócritamente: hoy quiero escribir sobre la felicidad, sumida en la mediocridad. ¿Un disparador? El lemon pie de mamá. Los vientos del sur. Tus mates. La chilena de Lisandro al rojo… Sí, la chilena de Lisandro. Escribo.

N. Sergio Alonso, con «Personalidad literaria»

Bipolar, como un anacoluto.

Pesado, como un polisíndeton.

Espontáneo, como un punto y coma.

Discreto, como un asíndeton.

Reflexivo, como los tres puntos.

Impulsivo, como una exclamación.

Honesto, como los dos puntos.

Cíclico, como una epanadiplosis.

Complejo, como un verso alejandrino.

Tímido, como una coma.

Sedentario, como una frase.

Activo, como una oración.

Conciso, como un microrrelato.

Único, como la vida, como un cuento, como un taller de escritura, y punto.

Ñ. Sofía Contreras, con «Algo para abrir candados»

Mi madre riega las plantas en el fondo del patio. Yo me asomo por el balcón y grito:

– ¡Ma! ¿Con qué herramienta puedo abrir un candado?

– ¿Te quedaste encerrada allá arriba? – suelta la manguera, se acerca preocupada.

– No, un viejito en el cuento que estoy haciendo para el taller de escritura necesita algo para abrir un candado – le explico, mientras el personaje espera la herramienta.

O. Víctor M. Almanza, con «Catarsis»

¿Érase una vez? ¡No! Es un cliché. El maestro siempre lo tacha, dice que se debe entrar con fuerza para atrapar de entrada al lector. Cuida la palabra – me dice No repitas términos, el adjetivo es tu peor enemigo, el conflicto lo es todo, sé certero con el final. ¿Cómo describo este dolor si no hallo las palabras? ¿A quién le interesa recoger los trozos de vida que he dejado en mis versos? El maestro no sabe que esto es todo lo que tengo. Catarsis me dice como si solo eso bastara.

Jurado Calificador Club de Escritura Fuentetaja

Madrid, 8 de enero del 2020.

José Antonio Gutiérrez Caballero

Miami, 13 de enero del 2020.

ENHORABUENA: JOSAN CABALLERO OBTIENE EL PREMIO DE LA POPULARIDAD Y EL DE MEJOR LECTOR-COMENTARISTA DEL JURADO EN EL SEGUNDO CERTAMEN DE MICROCUENTOS «EL TALLER DE ESCRITURA», DE LA FUNDACION CULTURAL DE ESCRITURA(S) FUENTETAJA, hoy, en Madrid, España…

Posted in CELEBRACCIONES with tags , , , , , , , , on 8 enero 2020 by josancaballero

ACTA OFICIAL DEL JURADO DEL II CONCURSO DE MICRORRELATOS «EL TALLER DE ESCRITURA»…

En Madrid, a 8 de enero de 2020

La segunda edición del concurso de microrrelatos El taller de escritura, convocado por la Fundación Escritura(s) en colaboración con Talleres de escritura creativa Fuentetaja, ha reunido 651 relatos que han recibido 45.408 votos y 93.066 lecturas (al 8 de enero), lo que supone una media de 143 lecturas por participación. Publicamos aquí el Acta del Jurado, integrado por miembros del equipo docente de Talleres de escritura Fuentetaja.

Primer premio

Dotado con 300 euros en metálico

Luis L. Lehnhoff, con Gatos

Funciona muy bien, con su estructura metaliteraria, dos voces contundentes para el diálogo, un suspense sutil, y una ironía que se vuelve cada vez más visible, con una última respuesta que en su contundencia descarada se muestra tramposa.

Premio a los Dos Finalistas

Dotado con la matrícula y primeros tres meses gratuitos en el taller on line de escritura creativa Fuentetaja

Joaquín Pereira, con Era, soy, seré

Con un trabajo de precisión muy cuidado para construir una estructura tremendamente eficaz hecha de paralelismos, comprime las etapas vitales del narrador desde un abatimiento progresivo que solo al final es capaz de contener.

Alejandro Bozo Cohen, con Espejo

Muy conciso, con las palabras muy medidas, con el narrador subido a lo alto de una atalaya, encierra una lección paradójica y fundamental para muchos.

Premio al Mejor Lector

Dotado con el videotaller «Encontrando una historia» de Antonio Muñoz Molina

Josan Caballero

Por sus comentarios extensos y reflexivos, con críticas constructivas siempre pertinentes y abiertas al diálogo.

Premio al Autor más Votado por los Miembros del Club

Dotado con el videotaller «Relatos con perspectivas; relatos sin preceptivas», de Ricardo Menéndez Salmón

Josan Caballero, con Borrador Borrado

Ha obtenido 758 votos, 1.473 lecturas y 350 comentarios (al 8 de enero)

Obras seleccionadas por el Jurado en última ronda (por orden alfabético)

Abel Valenzuela García, con Los muertos vivientes

José Alberto García Macho, con El tiburón

Rubén Marzo Alarcón, con Conflicto

El Jurado también quiere destacar los siguientes relatos

Amanda Smidth, con Golpe de efecto

Antonia de la Luna, con La historia que tanto esperé

Benjamín Cienalmas, con Estornudos

Eugenia Zorrilla, con Sobras

Graellsia, con Best seller

Jesús J. Prensa, con Una espera

Jorge Machado Obaldía, con La consigna

José Luis Chaparro, con Corrección de estilo

Juan Cristóbal Espinosa Hudtler, con Efecto crisálida

Lili, con Una pizca de sal

María Nélida Pedernera, con Consigna

Paqui Martínez, con El taller de escritura

Polanesa, con Qué escribir cuando estás escribiendo (o cómo ser feliz sin intentarlo)

Sergio Alonso, con Personalidad literaria

Sofía Contreras, con Algo para abrir candados

Víctor M. Almanza, con Catarsis

Gracias a todos. Oportunamente nos pondremos en contacto con los ganadores para la entrega de premios.

La decisión del jurado es inapelable y la organización no puede mantener correspondencia sobre los aspectos del premio. Existe un espacio de comentarios que la organización consulta periódicamente en busca de observaciones que nos permitan mejorar sucesivas ediciones. Os animamos a usarla para comunicarnos vuestra impresión sobre este concurso.

Madrid, 8 de enero del 2020.

 

Este próximo 8 de enero será la Premiación del «Segundo Encuentro de Microrrelatos EL TALLER DE ESCRITURA», en Madrid, donde el «BORRADOR BORRADO», del cubano JOSAN CABALLERO, cuenta con el Primer Lugar de Popularidad, al obtener la suma de 758 estrellas en las votaciones…

Posted in ABANDER-ARTE, CONCURSONES with tags , , , , , , on 6 enero 2020 by josancaballero

1er puesto: BORRADOR BORRADO

Inscripto 11/01/2019

JOSAN CABALLERO

758 estrellas; 1450 lecturas; 350 comentarios

Era un lector, que pensaba en escribir. Lo hacía de una sentada y sin pensarlo, pero luego lo leía y empezaba a borrarlo, hasta no quedar nada, para compartir consigo mismo. Quería hacerlo perfecto, y no quedaron los manuscritos, ni los relatos de sus pensamientos. Un lector, que pensaba escribir, pero no sabía cómo leerse a sí mismo. Jamás quedó ni una constancia de ello. Fue sólo un borrador borrado.

https://clubdeescritura.com/convocatoria/2concurso-microrrelatos-taller-escritura/leer/2834707/borrador-borrado/

TODOS LOS COMENTARIOS DEL «BORRADOR BORRADO», DE JOSAN CABALLERO…

JULIUS • hace 3 días

Hola Josan, te alcanzo mis felicitaciones por ser tu obra la más votada, pero paradójicamente -sin juzgar la calidad de su contenido- quisiera destacar que si bien el protagonista de ella es un escritor que se infiere solitario, ni este ni su contexto se relacionan con la consigna de este concurso, que era «El taller de escritura». De cualquier manera, no es el único caso. Saludos.

Josan Caballero  JULIUS • hace 3 días

Qué insistencia la tuya, JULIUS. No hay paradoja alguna. Claro que no es el único caso, si el tuyo, aunque no lo veas, también se encuentra en el dilema. Después de cuatro horas de haberme hecho la misma anotación, vuelves con el «ritornello», no sé para qué. Ya terminaron las votaciones y comentarios de los miembros del Club de Escritura, y ahora sólo compete al jurado calificador dar su opinión y veredicto. Parece que les preocupara a algunos de ustedes ese tipo de decisión, pero a ninguno de nosotros nos es permitido ir en contra de lo dispuesto por los máximos rectores de este concurso. Cierto que gané las votaciones populares, por 233 estrellas más, que mi más cercano seguidor, aunque lo importante, en este caso, es la validez y seriedad de un texto, que sobresale, más allá de si está, dentro o no del contexto de un taller literario. No sé por qué dices, que está fuera de contexto, cuando hay una doble función de lector-escritor, implícita dentro de un taller personal, mientras que, si analizamos en el texto tuyo, pasa lo mismo, que significa el resultado o la consecuencia de una posible o utópica corrección de estilo, hasta una decantación editada de un gran autor, como el creador del Quijote. ¿Tú crees que el tuyo lo está más que mi Borrador, porque le pongas «Antes» o «Después del Taller»? ¿Crees que en eso radica la definición del contenido o contexto de un relato y su verdadera amplificación?¿No te basta estar entre los veinte mejores microcuentos, de un total de 651? Yo soy más comedido, que tú, y que algunos de ustedes, los que se preocupan aún, por esas nimiedades de, si el «Borrador Borrado» se encuentra, formando parte o no, de un Taller de Escritura. Ya el hecho de haber sido incluido y estar, entre los 651 participantes, además de lograr ya, contundentemente, las 758 estrellas, las 1306 lecturas, y los 348 comentarios, es uno de los mejores logros de mi BORRADOR BORRADO, como destacado microcuento, del total de los inscriptos, en este Segundo Certamen, pero, además, sé, y lo acepto, que el jurado es quien da su último veredicto y premiación. Todos nos sometimos a ese gran arbitrio, desde que comenzamos este concurso, así que debemos respetar su tiempo de lecturas y definiciones, pues ya nuestra etapa decisiva concluyó. Dejemos, para otros, el nerviosismo, la falsa seguridad y la inexperiencia aficionada, de los novatos e inexpertos. Desde ningún momento del certamen, ni antes, ni ahora, ni después, yo he buscado rivalidad o cierta animadversión, entre ninguno de los que concursan, ya que sé, que el destino de un texto comienza, desde que se inscribe en un certamen. No lo definen las votaciones solamente, sino el período que dura su lectura, junto con su aseguramiento promotor y comentarios de reforzamiento y distinción. Tengo más de 27 libros publicados y más de cincuenta premios importantes, nacionales e internacionales. Las estrellas y las cartas ya están echadas, desde antes del 16 de diciembre, mi amigo JULIUS. Hay que ocuparse bien, y a diario, para luego no tener que preocuparse. ¿O tú crees, que un buen jurado no se encuentra detrás de este proceso rector, desde el mismo día, que comenzó la primera inscripción? Otro abrazo cordial, les deseo a todos lo mejor, al igual que a mi BORRADOR, Josan Caballero.

JULIUS  Josan Caballero • hace 3 días

*Primero disculparme porque el mensaje salió dos veces por error: es que me había parecido que el primero no se había publicado. Perdón.
*Segundo, y muy importante, insistir en que no he dado opinión de la calidad de la obra sino de su encuadramiento en las bases del concurso. Es que, tal vez por mi formación cartesiana, he sido siempre muy apegado al cumplimiento de las reglas. Qué le vamos a hacer.
*Tercero disculparme humildemente por mi atrevimiento en criticar la acción literaria de alguien que me lleva 27 libros y más de 50 premios de ventaja. Es que no lo sabía; ahora puedo comprender que no tenía el menor derecho de haberlo hecho. Tal vez esto ha sido producto de mi falta de formación en el campo de la literatura (del que probablemente sea tan solo un aceptable lector y participante de algunos talleres); de cualquier manera, y solo para que no creas que soy un ignorante irreverente, permíteme que te cuente que sí he tenido la suerte de obtener un par de posgrados universitarios (y estoy tratando de terminar el tercero, a mi edad un tanto avanzada) pero no vendría a cuento mencionarlos porque nada tienen que ver con las letras. Tampoco mis escritos, pues son ajenos al ámbito que nos ocupa.
*Cuarto: no tengamos muy en cuenta mi obra en esta convocatoria porque se trata solo de un divertimento que he publicado con el orgullo de que ha sido aprobado y festejado por mi bisnieto mayor, muy lector él, a pesar de su corta edad. En fin, algo íntimo, tal vez no muy profesional que digamos. Eso sí: intenté cumplir con la consigna del Club.
*Quinto: prometo firmemente no repetir mi críticas al formato de tus obras.
*Sexto: mis disculpas de nuevo y deseos de felices fiestas en paz.

Josan Caballero  JULIUS • hace 2 días

Gracias de nuevo, te pido disculpas a ti también, JULIUS; es que de ninguna manera soporto el acoso, y de algún modo la relación de mi BORRADOR BORRADO, con el taller o no, se ha vuelto eso por acá. Claro que buscando otra intención, o descalificar mi microcuento, me importe eso a mí, o no. ¿No te parece, JULIUS, que una opinión sobre el cuento en sí, cualquiera que ésta sea, es mucho mejor, que decir si se encuentra, dentro del tema de la convocatoria, o no? Ese argumento guarda otras veladas intenciones, más allá de su contenido, mi amigo. Los temas pasan, pero el cuento permanece, esté dentro de la consigna de la convocatoria, o no, según unos pocos de ustedes, perdidos en ese simple detalle. Ojalá que tú no te encuentres en esa exigua lista, por favor. Felices fiestas, amigo. Saludos nuevamente, Josan Caballero.

JULIUS • hace 3 días

Hola Josan, veo que tu obra ha sido la más votada a pesar de no se haya ajustado a las bases de la convocatoria, pues de «Taller de escritura», nada. Ello sin desmerecer su contenido, claro. Saludos.

Josan Caballero  JULIUS • hace 3 días

Amigo JULIUS, volver a lo mismo es algo que no me agrada mucho, pero, a no ser por la participación de un narrador (que, por supuesto no es omnisciente, ni nada que se le parezca), en tu narración externa, agregas: «Antes del taller»/»Después del taller»; pero, a ver, cuál taller? Ese es un taller tan implícito, como el de mi «Borrador Borrado», que de tanto hacer taller consigo mismo, valga la redundancia, nuestro personaje se anula a sí mismo, como alternativa y referente. Has traído aquí tu propio ejemplo, que, aunque tiene explícita la palabra «taller», valiendo nuevamente el bn pleonasmo, no significa que esté dentro de ninguno, sino la misma labor que ejerce mi personaje, en relación con su historia y su destino. Siempre consideré tu idea muy buena, de acuerdo con la corrección y edición de estilo de un gran escritor, en su utopía creacional, que (¿hace o haría?) el propio Miguel de Cervantes, con las palabras introductorias de su gran novela de caballería, pero de eso, a suponer, que él, propiamente, se encuentra en un taller literario, sí es una suposición bien traída por los pelos, amigo mío. Cualquier otro del Club podría decirlo mejor que tú, mas me has dejado estupefacto, con tu actual argumento, cuando tu propuesta narrativa, si bien es inteligente y audaz, por ningún lado se sostiene con lo del taller literario per se, aunque aparezca explícito, salvo, en el de un taller personal y propio. Aún así, estimado amigo, respeto tu opinión y la tomo en cuenta, para el próximo concurso y taller de Escritura. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Amelia Josefina Vila • hace 7 días

Ahora, cada vez que recordemos este Club de Escritura, estimado Josan Caballero, tendremos que pensar en el monólogo interior de Hamlet, y su «Ser o no Ser», junto al aporte del personaje creado por usted aquí, para agregar y continuar su metatexto: «Ser o no Ser el Borrador Borrado»: «To be, or not to be, that is the question», no, sino: «To be, or not to be, the eraser deleted, that is the question». Es verdaderamente algo genial haberle conocido a Usted aquí, en este foro de foros. Felicidades!!!

Josan Caballero  Amelia Josefina Vila • hace 7 días

Estimada Amelia Josefina, has entrado varias veces a este foro y empleas un juego inteligible de palabras y frases; además de la conjunción de exergos o parlamentos disímiles, para crear una diatriba más amplia, entre comentaristas de mi foro y yo, o viceversa, sin embargo, me gusta lo que armas y conjugas, algo así como una loquilla de las letras, con una gran cultura ancestral y un talento especial, para metatextuar los tiempos e historias, junto con personajes e incidentes monológicos, en fin, que me resultas muy amena y simpática, amén de no ser ofensiva ni vulgar, por lo tanto, aprovecho tus modos y mensajes, para sentirme feliz y divertirme, no sabes cómo. Gracias por tus gratas palabras y tu entrega. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Regina Alicia Feria Franco • hace 7 días

Siempre me animó la literatura y la magia del taller porque pienso es el sitio adecuado para echar a andar los sueños y las letras en formación, y ahora veo que es cierto cuando entro a este Club de Escritura, en donde me he leído más de cincuenta cuentos distintos y es una maravilla darse cuenta de cuántas formas de narrar pueden haber. Me han gustado unas, otras no tanto, pero sobresale este «Borrador» de Josan Caballero, que lo leo muy cercano a lo que nos pasa a muchos, que estamos tratando de cuidar lo que escribimos pero es más lo que borramos que lo que dejamos en pie. Excelente comunicación de ideas y pensamiento Josan.

Josan Caballero  Regina Alicia Feria Franco • hace 7 días

Aciertas en tus palabras, amiga Alicia, y me entrego a ese comentario tuyo, que tiene mucho de realidad literaria, por lo que se me ocurre, que recolectaré todos estos mensajes tan gratos, para crear una plaquette, tanto con mi microtexto, como con las distintas versiones sobre el relato y los protagonistas de cada comentario, en su circunstancia. Agradezco tus palabras y tu intervención en el foro. Un abrazo cordial, Josan Caballero.

Radames Brito Lopez • hace 7 días

Me siento alegre y conmovido al entrar a este Club y leer cuentos tan profesionales y con diversos contenidos literarios. El Borrador Borrado se acerca a esa profundidad de realismo conceptual donde se gana en una perspectiva filosófica en defensa de la creación humana y su proliferación. Diste en el clavo con este tema y su manera de tratarlo señor Josan. Muchas felicidades!!!

Josan Caballero  Radames Brito Lopez • hace 7 días

Me han llovido tantos comentarios loables sobre mi cariacontecido «Borrador Borrado», que tengo que estarle tan agradecido al personaje, la historia y a ustedes, los lectores y comentaristas, quienes han colmado este foro de reflexiones inteligentes y muy honestas, permitiéndome fluir y expandirme como pez en el agua de este Club, para encontrarme ahora en una buena posición frente al concurso y el debate plural de este micro género fundamental, en donde todos logramos participar e integrar una nómina de alrededor de 651 textos, todos meritorios y especiales, con su toque de virtud y sensibilidad, además de su sabiduría peculiar. Agradezco a todos los que me han alabado o consentido, y los que no, también he importan, ya que me han hecho exigirme más e hilvanar mayores derroteros, para mantenerme y triunfar. Saludos y abrazos a todos por igual, Josan Caballero.

Camino Literario • hace 7 días

El borrador nos entrega la posibilidad del cambio. Cuando se logra manejar la ansiedad, las letras toman forma en nuestra imaginación. Dejo mis estrellas. Nos leemos.

Josan Caballero  Camino Literario • hace 7 días

Ciertamente, el BORRADOR BORRADO, además de una oportunidad para el cambio, significa, como lo expresa tu emblema: Un CAMINO LITERARIO…Una brecha, por la que debemos pasar, y tenemos que pesar y sopesar, a pesar de cualquier circunstancia, amig@ mí@…Es verdad que las letras, como las palabras, toman forma y se acondicionan para la creacción más genuina. Gracias por tus votos y tus concepciones, afines a las mías. Un abrazo y saludos, Josan Caballero.

Andrés Zúñiga • hace 8 días

Es espectacular el efecto que consigues. Se difruta al leerte y dan ganas de escribir… Me has dado mucho en qué pensar. Un abrazo.

Josan Caballero  Andrés Zúñiga • hace 7 días

Estimado Andrés, te congratulo por tu honestidad y tu forma de narrar. Eres alguien que conozco poco, sin embargo, me gusta la manera despojada en que te enfrentas a crear. Así es como se consiguen las mejores armas e instrumentos para conquistar el camino de la sabiduría y la sensibilidad, que en definitiva son los ingredientes que nos hacen despuntar y explotar en el firmamento de la creactividad. Seguimos en contacto y te invito a mi blog personal, para tanto aquí, como allí, continuar con nuestra realidad creacional. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Eduardo Olivella Ionescu  Andrés Zúñiga • hace 7 días

Es importante que un texto consiga hacernos reflexionar, y si encima estimula tus ganas de escribir, el autor habrá conseguido doblemente su objetivo, hacer que le lean y provocar en el lector una actitud tan positiva, como es el deseo de crear a través de la escritura, solo por ello yo, me daría por satisfecho, un saludo cordial y que pronto pueda leer algo tuyo por aquí!!!

Eduardo Olivella Ionescu • hace 8 días

Estoy completamente de acuerdo en lo que dices. Tanto formalmente en su estructura como en su contenido, dice exactamente las palabras necesarias, sin una coma de mas y con las palabras necesarias para expresar su idea central
que me parece magnífica. Se ciñe exactamente a la creación literaria, pero provoca en los lectores múltiples sugerencias que los transporta a interpretar muchísimas cosas, la mayoría de las veces llenas de coherencia intelectual.
Tu micro narración puedo asegurar, que podría estar perfectamente entre las narraciones cortas de Kafka y desde luego que no desentonaría. Estoy sorprendido como cada vez que entro en el foro de Josan como crecen las estrellas, a este paso vas a provocar una explosión en el universo josantiano. De ahí el nacimiento de una Supernova …o sea un premio que lo tienes mas que merecido!!!!

Modesto Andres Perdomo Bellido • hace 9 días

Todos giramos alrededor del «Borrador Borrado» pero no lo decimos. Tampoco lo ignoramos pues cómo tiene casi el doble de estrellas más que quien lo sigue en votaciones. Inclusive en lecturas también se despegó de los demás. Y este foro de Josan si lo analizan bien contiene los mejores y más inteligentes comentarios del concurso, ya que en los otros foros se dedican a saludarse y dejar votos solamente. Este es un taller de escritura para comentar y analizar textos que concursan, no para saludarse y tomarse un café con leche, según dice el propio autor del Borrador…Está de más demostrado que es un cuento valioso y promotor de debates interesantes. Eso es lo que importa y lo que vale entre nosotros. Hay que felicitar a Josan por su gran texto. Terminada la historia, veremos a quién se recuerda más de este concurso…Es lo que cuenta…

Josan Caballero  Modesto Andres Perdomo Bellido • hace 7 días

Gracias por girar y continuar en esta encrucijada de la creactividad, amigo Modesto. Estamos aquí para crear, comentar y reflexionar. Seguimos en contacto, abrazos, Josan Caballero.

Rebeca Sosa Ramírez  Modesto Andres Perdomo Bellido • hace 9 días

Creo lo mismo y voto por el cuento que más controversia y debate ha originado en este taller. Bravo Josan Caballero.

Radames Brito Lopez  Rebeca Sosa Ramírez • hace 7 días

Controversiales son unos cuantos textos que leído yo hoy en este certamen, pero me gusta cómo sugiere Josan la pérdida del Borrador Borrado. Es una alternativa que podemos tener y superar todos los que escribimos. Es un microcuento muy sugestivo y sugerente…

Amelia Ana Velázquez Rubio • hace 9 días • edited

Un borrador no tendría por qué anularse en su devenir. Tú has rescatado la historia y su circunstancia, por tanto el Borrador borrado existe, y es por ti Josan. Se salvó de ser borrado gracias a ti, y a nosotros que te leemos y alabamos. GRAN CUENTO con mayúsculas. Digno de estar entre los tres mejores, sino el mejor. Que no te etiquete ni frene nadie. Felicidades.

Julio Amer Fiallo Roldanhace 9 días

Encontrar la clave para narrar bien es lo que busco, y tu pequeño cuento tiene esos atributos bien puestos y ganados. Quiero aprender de ti Josan. Das algún taller o podemos concertar una cita virtual para conversar cómo podemos ayudarnos mutuamente? Por ahora estoy fascinado con tu cuento y con la manera de apropiarte de los espacios para promoverte y brillar. Eso es una forma especial de crear y mantenerse con la mente en alto. Me gusta tu blog y todo lo que haces en realidad. Felicidades compañero.

Josan Caballero  Julio Amer Fiallo Roldan • hace 7 días

Todo el quiera puede aprender de mí, Julio Amer. Estoy abierto a la ayuda y la solidaridad, para hacer taller y confraternizar en cualquier momento, viviendo juntos la experiencia de la integracción y el debate para mejorar unimismados. Un saludo cordial, Josan Caballero.

Eduardo Olivella Ionescu  Julio Amer Fiallo Roldan • hace 9 días

Yo soy asiduo visitante del blog de Josan Caballero, y puedo certificar la cantidad de artículos y poesía que se puede encontrar en dicho blog. Todo de un gran nivel y de una riqueza informativa extraordinaria, por algo Josan es también periodista y filólogo. En cuanto a su poesía puedo aseverar que muchas de sus obras son de lo mejor que se ha escrito entre los poetas de su generación. Pienso que todo esto, se nota en su micro narración, que me parece de una perfección inmaculada..

Amelia Josefina Vila • hace 9 días • edited

No sé cómo Josan te acepta esta primera afirmación, Juan B., sobre Epiménides el Cretense, cuando a este poeta del siglo VI a.N.E., «se le atribuye haber estado dormido durante cincuenta y siete años», y etiquetar a todos los cretenses, como «unos mentirosos». Quieres decir, entonces algo más, que eso? Al menos que sea la tuya otra de esas «paradojas falsídicas», con la que te contradices, y no es eso sino todo lo contrario?. Recuerda que la frase de Epiménides era «Miento. Hablo», que unida al «Cogito, Ergo sum» («Pienso, luego existo»), de Descartes, podría reunirse eclécticamente en tus palabras como: «Miento, hablo, pienso, luego existo’? Y eso qué tiene que ver con el «Borrador Borrado» de Josan Caballero? Ah, será que tú también Juan has estado dormido cierto tiempo? Ahí mismito te lo dejo. Mejor sigue durmiendo, ya que a mí me parece un gran microcuento el de Josan, como el tuyo igualmente, desde el principio de la humanidad. En la exitosa paradoja está lo valioso de ambos microcuentos. Luego existen los dos y son muy buenos cuentos. Los felicito a ambos y me los llevo.

Juan Beneito Abellán • hace 11 días

Epiménides el Cretense diría que era posible.
Patxi Andión, autor de la canción «e = m c2», podría ser un referente y su verbo, en este caso, una doctrina: «amanece-crece-desaparece…pero no lo parece…»
Desgraciadamente sólo queda patente el prólogo. Hay algo escrito que nos habla del No-pensamiento y de la No-obra. Ese cabo suelto nos lleva al hilo de Ariadna. En el laberinto de los imposibles se asientan Biblias apócrifas, Quijotes alternativos y (¡Oh, misterio!) soluciones no escritas al viejo problema de nuestra pre- y post- existencia. Quizá la Física de Partículas dé razón a lo Innombrable.
Tu cuento es propio de toda la Humanidad. No pensamos lo suficiente, escribimos lo innecesario y todo termina borrándose como neurona de enfermo olvidadizo o Atlántida perdida. Sólo quedan los ecos de lo que pudo ser, si lo piensas con fe. Así que, como Sísifo y su piedra, no nos queda otro remedio que volver siempre a empezar, reescribiéndonos.
Te sigo leyendo con gusto, si aquí escribes.

Josan Caballero  Juan Beneito Abellán • hace 7 días

Has venido hasta acá, Juan Beneito, con tu grandilocuencia y tu verbo peculiar, a eclectizarme (Y por qué no, eclipsarme?) mi BORRADOR BORRADO, pero me gusta esa manera tuya de rodear los textos, con tu cultura enciclopédica y sobrenatural, pues contigo siempre hay más, y es cierto, que «no hay nada nuevo bajo el sol», ni nosotros mismos, por eso, tu abrupta y desmedida manera de dialogar y conjugar todo es tan existencial y apócrifa, que abogo por encontrarme cada día contigo, si no aquí, en mi blog personal (www.josancaballero.news), en el que ya estás, desde ya, invitado, no sólo para comentar, sino también para publicar lo que desees, pues tú eres un ser especial, que decoras con tu verbo y tu frase rememorial todo lo que tocas, lees, y deseas escribir o comentar. Bienvenido a este foro, del que sé, no te irás jamás, y además a mi blog personal, y a todo lo que quieras tú editar. Un abrazo y saludos, Josan Caballero.

Eduardo Olivella Ionescu  Juan Beneito Abellán • hace 8 días

Desconcertante tu comentario. No me cabe duda que resulta brillante cuando lo lees por primera vez, pero será que yo no puedo alcanzar tu sabiduría para entender que quieres decir con todo lo que expones en tu comentario.
Lo primero que hice fue ir a tu foro y leer tu obra. realmente estupenda e ilustrada con muy buenas fotos.
Pero la micro narración de Josan Está tan perfectamente escrita como claro es el mensaje que transmite , cualquiera puede entenderlo. que luego sugiera muy diversas interpretaciones en los lectores. Es mérito del autor, que sin utilizar elementos tangenciales a la literatura, haya despertado tantas sugerencias e interpretaciones!! Eso me parece fantástico, que sin tener que utilizar confusas paradojas ni místicos sofismos, haya podido excitar el intelecto de muchos, capaz de ver en ese pequeño cuento tantas cosas, algunas rozando casi lo trascendental.
Me hubiera gustado mucho mas un comentario inteligente como tu lo eres, pero capaz de ser inteligible para la mayoría de los lectores, porque uno después de leerlo no sabe realmente cual su intencionalidad. Lo cierto. es que encuentro un exceso de elementos, que quiero entender que expones para dar cuenta de la perdurabilidad de todo lo que existe y que el borrador borrado, no sería más que una pequeña anécdota, pero según lo veo yo, estamos en un taller de escritura y si mi interpretación de lo que dices es correcta, toda esa historia del poeta cretense Epiménides, Patxi Andión, hilo de Ariadna, la pre- y post- existencia, la Física de Partículas….etc.etc. me parece muy excesivo. Nos encontramos en un nivel de existencia, que es el que es, sabemos perfectamente que pueden haber otros niveles…incluso los físicos hablan de multiuniversos y de infinitas dimensiones: Pero todo eso aquí no viene a cuento. Todos sabemos que todo es perecedero, todos sabemos que un día dejaremos de existir…pero amigo y lo digo con todo mi cariño, estamos hablando de creación literaria!!!!
Te felicito por tu relato, pero me hubiera gustado que, alguien que demuestra tener un gran intelecto, y tan capaz de escribir relatos como comentar, hubieras escrito algo un poquito mas clarificador, sin tanta locuacidad ni despliegue de recursos que demuestran tu elevado nivel cultural. Te deseo mucha suerte en el concurso, por que tu cuento lo merece.

Juan Beneito Abellán  Eduardo Olivella Ionescu • hace 8 días

Con un lacónico «tienes razón» daría cumplida satisfacción a tu petición de claridad y concisión.
Sin embargo tu extensísimo comentario requiere una ampliación de mi respuesta.
Anduve esta mañana. Llovía.
Se oyeron sirenas de ambulancia y policía.
Por la redes sociales se anunció poco después la muerte de un maestro jubilado.
Marché por la tarde para completar kilómetros. Recordé al compañero cuando pasaba por lugares oscuros. Viento. La lluvia arreciaba.
Recordé el microrrelato de «El borrado». Sentí exactamente lo que eso significa y significará para todos. Me sentí sombra.
El taller literario pasó de ser una pose o un foro de intercambio y creación a ser un fundamento de mi meditación inmediata que ahora, tras leer tus palabras, regurgito e intento digerir…
Cuando leo algo se me abren ventanas, sugerencias, recuerdos posibilidades. Mi pensamiento suele ser fractal. Los comentarios que hago son sinceros. Pueden ser retorcidos, barrocos o complejos. Nunca malintencionados.
Quisiera seguir, pero me cuesta mucho ahora puesto que se mojó el teléfono en mi última actividad y el teclado va por libre…
Te busqué como autor de Fuentetaja y no te encontré. O no estás o el buscador me está jugando malas pasadas. Me agradaría conocer algo tuyo.
Ya nos leeremos en un futuro.
Recibe un cordial saludo.

Eduardo Olivella Ionescu  Juan Beneito Abellán • hace 7 días

Buenas tardes. Me quedé en las puertas de publicar un microrrelato que tenía preparado, pero no pudo ser, el tiempo y las circunstancias me jugaron una mala pasada.
Jamás he publicado nada. Hubo una época que leía mucho, actualmente bastante menos. Las cosas de la vida que suceden aveces y nos llevan por derroteros imprevisibles.
Te seguiré leyendo, porque me gustan tus narraciones y tu estilo. Veremos si en la próxima convocatoria, me decido a publicar el microrelato que tengo en estado de reposo.
Dices » Mi pensamiento suele ser fractal», eso es algo de un gran valor para mi. Creo que aplicado adecuadamente al campo de la psicologia y la medicina, podría producir beneficios para el paciente muy importantes. la figura de Wilhelm Reich, que puede asociarse a la psicología; mas bien al psicoanálisis fractal, siempre me fascinó por sus ideas y el tipo de experimentos que intentó llevar a cabo, y no le dejaron concluir. Algunos de sus libros fueron quemados
En fin Juan, creo me e desviado bastante del tema: este es un asunto que me fascina y hace que me pierda….
Ten envió un cordial saludo y mucha suerte en el concurso

Regina Alicia Feria Franco  Eduardo Olivella Ionescu • hace 7 días

Yo también me quedé leyendo un rato por aquí los comentarios y me agrada la cordialidad con que se hablan y escriben, como si se conocieran de tiempo. Quiero publicar mis cuentos ya, pero no son muy cortos, tendría que abreviarlos o escribir otros para el certamen que se avecina. Me pueden instruir en eso, por favor? Muy complacida estoy con todo esto. Gracias de verdad.

Eladio Marcial. Sánchez  Juan Beneito Abellán • hace 10 días • edited

Enorme comentario el tuyo, porque recoge algunas de las cosas que parcialmente se han dicho por aquí.
Efectivamente la nada, la no existencia de algunas partículas que pueden estar y no estar al mismo tiempo, como se contempla en la cuántica, se pueden extrapolar al cuento de Josan, en fin eres capaz de montar un rompecabezas con todo eso, la mitología, la literatura, la filosofía y hasta la fórmula de la relatividad, que aparece en una canción de «Patxi Andión» que no conocía para nada. Tu comentario me parece tremendo en el sentido mas positivo, por supuesto. Mi mas sincera felicitación por tu sagacidad y acervo cultural. Que no falten comentarios como el tuyo!!!

Aldo Sigarreta Martí • hace 13 días • edited

Orgulloso estoy de llegar a tus predios, mi querido alumno de siempre, José Antonio Gutiérrez Caballero (ahora Josan), con quien compartimos muchos gratos momentos, y ahora me invitas a comentar uno de tus microcuentos, donde descubro un mundo nuevo y apasionante, que siempre anhelaste y perseguiste desde la niñez. Rememorar toda esa época de inquietud juntos se vuelve hoy una bondad y delicia que me retribuyes, para que yo pueda sentirme doblemente satisfecho con la vida y contigo, al festejar la popularidad y maestría de tu BORRADOR BORRADO, que tiene la máxima posición entre los concursantes de este Club de Escritura. Estoy súper alegre de haber perfilado en ti la grandeza de Bolívar y Martí, como la de tantos otros que sobresalieron en mis aulas secundarias. Estoy feliz, súper agradecido de este nuevo encuentro familiar y literario entre nosotros. Esta es una manera de retribuir. Gracias, Josan Caballero, por dejarme estar contigo y de nuevo intervenir.

Eladio Marcial. Sánchez  Aldo Sigarreta Martí • hace 10 días

De tal profesor. tal alumno que no puede ser borrado, gracias a la seguridad y fuerza que le inculcó. Felicidades para el escritor y hombre que usted formó y modeló, pero gracias para usted también, profesor

Amelia Josefina Vila  Eladio Marcial. Sánchez • hace 7 días

Es que un profesor, como el que ha tenido Josan Caballero, con esas historias del aula y los exámenes, ya quisiera cualquiera de nosotros haberlo tenido como mentor. Imagínese, y ahora mismo es un seguidor de su alumno. La maravilla de las generaciones y el talento de los hombres. Felicidades para su maestro-mentor Aldo, y para el alumno-maestro Josan Caballero.

Josan Caballero  Aldo Sigarreta Martí • hace 12 días

Estimado maestro de maestros, señor Aldo, me entusiasma tanto, que haya podido entrar, en este foro de cuentistas y escritores, para no sólo comentar, sino también compartir con ellos, y hasta saborear el néctar del microcuento hispano americano, en toda su apoteosis. Usted, con sólo presentarse aquí, ya me hace florecer los recuerdos, de cuando seguíamos, desde nuestros pupitres las gloriosas campañas de Bolívar por la América; cuando nuestros asientos eran los caballos, y por supuesto, nosotros los emblemáticos generales y seguidores de «El Libertador»: Gran estrategia nemotécnica y didáctica suya, para que jamás olvidáramos esa epopeya y la índole de sus héroes participantes…Qué grandeza la suya, y qué magníficos recursos, mi querido profesor, desde entonces, que no me pierdo un instante de retozar con su intelecto y su sabiduría; tanto, que aún hoy lo llevo conmigo, hasta mis creacciones más cimeras. Usted me ha traído a este Club de Escritura el mejor de los premios: Su presencia, su respaldo y protección continua y duradera, con la que me armo un carruaje, el cual me permite recorrer los senderos y parajes más recónditos, para, desde allí, dominar los personajes de la historia y la literatura universal, quienes acompañan esta suerte de «travesía del caballero, sin Mesa Redonda», gracias a Usted y su entrañable desprendimiento, ternura, sensibilidad, y generacional sabiduría. Agradezco hoy sus palabras, como el gran regalo, que la vida y Usted me han entregado para siempre. Su atentísimo alumno, Josan Caballero.

Regina Alicia Feria Franco  Josan Caballero • hace 7 días

Un profesor como el tuyo Josan, qué grande eso para alguien que ahora tiene su trayectoria literaria. Me fascina este lugar al que todos llegan y conversan con naturalidad y vehemencia, como si fuera su casa o una escuela donde todos se conocen. Me hubiera gustado haber entrado antes pero ya será en una nueva oportunidad. Lo siento…

Eladio Marcial. Sánchez  Josan Caballero • hace 10 días • edited

Realmente entrar en tu foro es una verdadera gozada por lo menos para mi. Los comentarios aquí expuestos son muy buenos y algunos extraordinarios. Tu micro es una fuente de inspiración amigo, comentarios que se conectan con la mitología, con la literatura de lo absurdo, el surrealismo, el existencialismo y hasta con las física de partículas, En los comentarios he visto desfilar a Becquet, a Kafka, Borges y que se yo. Además tampoco falta cierta dosis de nostalgia intelectual y afecto Pero lo bueno es que son comentarios atinados, reflexivos y muy sugerentes
Te felicito. porque lograr lo que tu, no es precisamente fácil. Adelante genio!!!!

Sebastian Terruellas Torres  Aldo Sigarreta Martí • hace 12 días

Hermosas palabras la que dedica a su ex alumno. Ahora ya, desde hace muchos años, convertido en escritor condecorado con varios premios en distintos países. He tenido el placer de conocer algunas de sus obras, principalmente en el campo de la poesía, y puedo asegurar que algunos de sus trabajos, son realmente soberbios.
Sin duda Ud. fue una referencia, tanto a nivel humano como intelectual, muy importante para el. Es magnifico que después de tanto tiempo, siga habiendo ese respeto y ese agradecimiento hacia Ud. y le responda con elogios que intelectualmente abarcan lo mucho, lo digno y lo elevado, cuando le dice «haber perfilado en ti la grandeza de Bolívar y Martí» El profesorado juega sin duda un papel determinante en el crecimiento intelectual del alumno y sin duda Ud. lo consiguió de sobra con Josan Caballero.
Pienso que ese sería también una muy buena narración para un taller de escritura.

Teresa Corazón De Jesús Baraga • hace 13 días • edited

Tu cuento destila verdadera tragedia y autenticidad, Josan, y no sé si es autobiográfico o no, porque muchos de nosotros hemos estado en el pellejo de este BORRADOR BORRADO, que tú has creado y perfilado de una manera magistral, en tan pocas palabras. Trataste un destino particular, que nos pone la carne de gallina, nos hace reflexionar, y darte las gracias por presentarnos a un personaje que puede ser cualquiera de nosotros a punto de flaquear y quedarnos sin borradores ni palabras, para responder cuando lo único que nos queda es silenciarnos o perder la razón de crear. Me llevo varios micros que deseo releer y conservar. El tuyo es uno de los que más aprecio, mi querido y gran escritor Josan.

Regina Alicia Feria Franco  Teresa Corazón De Jesús Baraga • hace 7 días

Encontrarme contigo por aquí, amiga Teresa, es más que una coincidencia, pues me hablaste del taller y pensé que era más frío y empaquetado, sin embargo, llego y me leo estas cosas sencillas y hasta sublimes de Josan; y eso me pone tan contenta que ya quiero poner mis cuentos y poemas al servicio de este taller. Claro que voy a participar en los próximos concursos y recavaré la ayuda de todos. Me gusta estar y leer por aquí. Se siente bien todo esto.

julian restrepo rojas • hace 13 días

Josan, un saludo de respeto, qué es toda esta cantidad de estrellas lecuras y comentarios!!! Vaya constelación formada por tu microrelato, sobre el cual tengo que decir que muy bien nos representas con estas lineas, yo tenía diecinueve cuadernos borradores, años y lapiceros que pasaron por sus hojas, me gustaba leer los más viejos porque me daba cuenta como he ido mejorando en este oficio hasta que un día, por un arrebato espiritual que incluía hasta feng shui, hice una limpieza radicál de mi habitación y los cuadernos, se fueron en una bolsa negra panita. El arrebato espiritual me duró cinco días y despues me arrepentí, borradores borrados, te dejo estrellas, aunque deberías tú, regalarme unas cien ahi de solidaridad, saludos!

Rebeca Sosa Ramírez  julian restrepo rojas • hace 9 días

Yo fui a votar igualmente a tu cuento Mr. Julian porque me agrada el desenfado y humor de tu microcuento. De lo mejor que he leido en este taller. Felicidades. Aboguemos para que subas y te consideren entre los ganadores.

julian restrepo rojas  Rebeca Sosa Ramírez • hace 9 días

Hola Rebeca, gracias por lo de Mr. Julian, también por votar y promover mi relato, me han puesto en un muy alto lugar en este concurso, es la primera vez que me uno a un blog y estoy aprendiendo a usarlo, para acceder a su contenido y poder interactuar conocer compartir y saber,como por ejemplo, si tienes perfil en el club o publicaciones, algun link que me puedas regalar, saludos y un fuerte abrazo

Regina Alicia Feria Franco  julian restrepo rojas • hace 7 días

Yo también voté por tu cuento, Sr. Julián Restrepo. Por cierto, muy simpático y distinto. Me gustó bastante…

julian restrepo rojas  Regina Alicia Feria Franco • hace 7 días

Hola Regina, agradezco tu paso por mi relato, muy feliz por tu opinión y voto, saludos…

Sebastian Terruellas Torres  julian restrepo rojas • hace 12 días

Me encanta tu comentario, la naturalidad y sinceridad que destila. Ademas no le falta gracejo en tu forma tan desenvuelta de expresarte. Felicidades, porque cualidades para escribir no te faltan!!

julian restrepo rojas  Sebastian Terruellas Torres • hace 12 días

Muy agradecido Sebas contigo por la valoración que le das a mi comentario, la forma de expresarlo me da pistas sobre lo bien que escribes también. saludos, nos estamos leyendo…

Josan Caballero  julian restrepo rojas • hace 13 días • edited

Estimado Julián, acaparo tus sensibles y agradables comentarios, al igual que te digo que ya te he salpicado de sublimes estrellas, desde el comienzo de las votaciones, en mi caso, y hoy, con varios de mis colaboradores y «fans», como ya le dicen a los seguidores de un blog que tiene más de 2 millones en diez años, pues ya que me tildan de promotor de votos a favor de mi BORRADOR BORRADO, entonces debemos resaltar otros textos igualmente excelentes, que no tienen la promoción adecuada, y nos parecen susceptibles de ser comentados y exhibidos, entre los que entran en mi blog o frecuentan estos foros, para entregarles estrellas tangibles y memorables. Espero que te des cuenta, desde que conversaste conmigo, cómo aumentaron tus votos y estrellas. Te aplaudo y enaltezco como debes, mi panita. Yo soy cubano, pero viví 14 años trabajando y disfrutando de tu Venezuela querida. Entra, cuando quieras, en mi blog personal (josancaballero.news) y verás cuántos poemas acrósticos, al igual que artículos, he creado y publicado sobre este gran tema de la que considero mi segunda patria. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

julian restrepo rojas  Josan Caballero • hace 12 días

Hay muchas formas de ganar en convocatorias como esta. Tratar con personas como tú es una de ellas, es un gusto de verdad Josan, tienes razón sobre las estrellas, nunca antes tuve tantas, te pedí cien en broma y resultó verdad, gracias por compartirme en tu espacio, voy pal blog, soy colombiano, te confundí con lo de panita creo yo, tenemos muchos hermanos del vecino país aqui en medellin (donde vivo) y se le pegan a uno sus palabras, un cordial saludo y nos vemos en tu blog

Josan Caballero  julian restrepo rojas • hace 12 días • edited

Encantado con tus palabras, estimado Julián, pienso lo mismo que tú, hay muchas formas de lograr el éxito, y hay quienes suben, para luego descender, en cualesquiera de las formas posibles, habidas y por haber. Lo que importa en determinado concurso es llegar a demostrar, que eres bueno en lo que haces, ya que los certámenes tienen siempre que ver con los gustos personales, pues se juzga, según la apreciación de las cosas, que tenga cada cual, al igual que nosotros; y ello jamás define el sentido de ser el mejor, sino el concepto general de lo que se desea en ese colectivo justipreciador. Tu definición como creador y promotor de tu obra la tienes tú mismo, con la apreciación de los lectores y el balance de la crítica, tanto en la prensa acreditada, como en las redes sociales. Por eso creo, que nosotros ya hemos ganado, en este Club de Escritura o taller virtual, y lo prueban las estrellas y comentarios, que se reciben diariamente, lo cual amplía el horizonte de expectación de muchos, dentro de este foro, conformado por 651 textos presentados, además de la opinión, certera o no, de todos los que participan de este gran debate y coloquio multivalorador. Te saludo y aplaudo, por ese cuento breve tuyo, humorístico y multicolor, Josan Caballero.

julian restrepo rojas  Josan Caballero • hace 12 días

Me gusta participar porque es como salir a recreo a jugar sin pretender que me elija el jurado, la verdadera ganancia de este asunto es la opinión y valoración de quien nos lee y los nuevos espacios que se crean para darnos a conocer, desde mi amiga Saida que sonrió y se la enseñó a su esposo, hasta la amplia vitrina que tu blog representa, todas estas situaciones bonitas que pasan son las que te calan hasta los huesos de los dedos y te preparan para otra historia. Saludos afecto gratitud Julián…

Josan Caballero  julian restrepo rojas • hace 12 días

Claro que sí, amigo Julián, y permíteme llamarte así, por tus gratísimas y reconfortantes palabras, que disfruto y saboreo, cual un manjar de manjares, ya que ha sido un gran descubrimiento el leerte y conocerte, hace menos de una semana. Me regocija contribuir a tu desarrollo intelectual y narrativo, desde esta plataforma, e incluso, a partir de mi blog personal, así que estamos siempre a la orden contigo, recién conquistado amigo de las redes. Te abraza, Josan Caballero.

Teresa Corazón De Jesús Baraga  julian restrepo rojas • hace 13 días

Es muy simpática tu historia, Julián Restrepo, y como venía a votar por Josan y el «Borrador Borrado», me has animado a llevarte estrellas para el tuyo igualmente. De paso también te comento en tu zona de mensajes. Encantada con tu microcuento
y con tu forma diferente de narrar. Me agrada bastante, así que lo guardo para releerlo varias veces más.

julian restrepo rojas  Teresa Corazón De Jesús Baraga • hace 12 días

Que linda eres Teresa, encantado estoy yo contigo, muchas gracias por visitar mi texto, me alegra que te haya gustado, voy para mi zona de mensajes ya mismo, te mando un abrazo bien grande y saludos!

Haydee Bermudez Hernández • hace 14 días

Más allá del «Borrador Borrado» existe una realidad que nos compete a todos por igual, ya que a quién no le ha dado por editar toda su obra o parte de ella, sin ni siquiera haberla publicado o dado a conocer. Estamos transitando todo el tiempo entre borradores que ansían publicarse, pero terminan siendo borrados, del mismo modo como cuentas en tu narración. Tu personaje es un ejemplo del ser o no ser en la literatura de un taller que lo hace uno propio o con más personas, y aquí vence el que no se deja llevar por las circunstancias ni el empecinamiento. Bravas estrellas para ti Josan, que las mereces.

Radames Brito Lopez  Haydee Bermudez Hernández • hace 7 días

No hay más allá ni más acá, querida Haydee, el Borrador Borrado es sintomático que pueda ocurrir en nuestras vidas literarias, sobre todo quienes empezamos a escribir, que incurrimos en tantos errores y miedos de cabecera, por decir algo. Me gusta leer y releer ese microcuento ya que tiene mucha enjundia, como el caldo de gallina bien hecho.

Aquiles Rubio Gonzalez • hace 14 días • edited

Siempre comentar un buen cuento es agradable, como adentrarse en un bosque mágico, en donde las palabras florecen por las fuentes de agua y los manantiales. Y eso nos sucede con el microcuento de Josan Caballero, que corre cual un manantial de agua viva porque su Borrador Borrado parece no extinguirse de significados, y lo leemos cada día y permanece incólume y profundo, como el personaje que a pesar de haberse eliminado de contenido, continúa con la fuerza del primer día que se creó.

Fabián Raúl Sansfiel Reyes • hace 15 días

No cabe duda que tu historia nos capta a todos por igual Josan, y que no alcanzamos a llegar para seguirte con tantos votos y estrellas. Las mereces no solo por tu cuento y tu manera de contarlo, sino por la estructura cerrada y el lenguaje elegante y directo. Tu microcuento es una flecha en cualquier intelecto. Manejas el discurso apropiadamente y estableces una parábola de la creación de una forma diferente. Desde la óptica de un antihéroe que se vuelve invisible por si mismo, y no logra regresar al taller ni a su propio deseo de escribir o editar sus textos. Se convierte en un Borrador borrado para siempre. Adoro esa fábula negativa e irónica del perfeccionista ausente.

Niurka Celeste Bllo Amengual • hace 15 días

Cuántas veces en mi vida deseé estar cerca de un concurso pero nunca entré ni participé en nada, por miedo a no ser buena o escribir bien. Por eso me siento tan cerca de tu «Borrador Borrado» mi querido Josan. Déjame llamarte querido y estimado, como se dice en Venezuela, de donde provengo, ya que en muchas ocasiones pensé dejar de escribir o romper mis cuadernos de escritura donde siempre guardaba lo que soñaba o pensaba; y ya ves, no lo hice y ahora estoy más cerca de lograrlo, tanto por mí como por ti, que me has enseñado la manera de mantenerse en pie sin perder el talento, que creo que lo tengo. El Borrador Borrado es el símbolo de todos los que hemos tenido mucho miedo, y por ende perdemos hasta la voluntad de mostrar nuestro talento. Me siento identificada con tu cuento y te apoyo ciento por ciento, Josan.

Demetrio Jesus Proenza Conde  Niurka Celeste Bello Amengual • hace 14 días

Unirnos en un taller para dejar de ser Borradores Borrados es una utopía fantástica, por eso hallo el texto de Josan increíble y apropiado para este tipo de concurso en que nos debatimos por dar lo mejor nuestro y aparecer como personajes de nuestro propio y autobiográfico cuento. De tanta lectura me quedo con los mejores microcuentos y a cambio, estoy feliz, y te concedo mis queridas estrellas de papel y sentimiento.

Raymundo Cesare Perdomo Luengo • hace 15 días

Conocer a un autor por sus obras es muy bueno, pero conseguirlo por un solo personaje de un microcuento, con el cual me identifico y llego hasta reproducirlo, creo que me vuelvo seguidor de su conocimiento y de su forma de pensar, de manera que me considero deudor de su intelecto de solamente leerlo. Estoy en deuda contigo Josan y te seguiré leyendo. Grato encontrar textos que nos enseñen cómo no hacer para volver a ser y hacer en un gran microcuento.

Aquiles Rubio Gonzalez  Raymundo Cesare Perdomo Luengo • hace 14 días

Yo también estoy en deuda con este personaje de Josan Caballero, porque le ha dado sentido a muchas cosas que he escrito y luego, con gran pesar, he eliminado, sintiendo un gran vacío dentro de mí, y esa armonía o gozo lo experimento ahora que he leído el Borrador Borrado, ya que me miro como ese gran personaje de Josan, que apenas cabe en cinco o seis líneas, y sin embargo es tan inmenso, que no lo podemos ni tocar o encasillar.

Josan Caballero  Aquiles Rubio Gonzalez • hace 13 días • edited

Ay, Aquiles, prefiero que vengas, como has llegado tú, a defender tu posición de creador en deuda con mi texto, a otros que se las dan de «dandys literarios» y se abalanzan contra mí, diciendo esto o aquello sobre mi «Borrador Borrado», cuando en verdad carecen de verdadera compostura, para criticar algo con imparcialidad y objetividad certera. El microcuento tiene eso: Significa una idea, que se amplifica, en pocas líneas de texto, como si fuera la sinopsis argumental de un filme, o el extracto de un cuento largo; quizás una novela, en fin, la explosión, en breves palabras, de un fuerte conflicto, con desenlace sorpresivo y tenaz. Complacido con tu mensaje grandemente. Abrazos, Josan Caballero.

Eduardo Olivella Ionescu  Josan Caballero • hace 7 días

Cuanta razón tienes cuando dices que «Significa una idea, que se amplifica, en pocas líneas de texto» ahí está creo un poco el éxito de tu micro-narración, porque es una idea que crea debate, reflexión y dejas al final que sea el lector quien saque sus propias consecuencias. Un abrazo y felicidades por tu cuento Josan Caballero

Eduardo Olivella Ionescu • hace 15 días

Felicidades por tu cuento. Me parece perfecto tanto en su estructura como en la adecuación al concurso, eso si, hay que saber leerlo con mucho cuidado. Hay un lector-escritor cuya relación con la lectura, se supone es intensa y que perdura en el tiempo. Los libros a los que accede, es obvio, son la consecuencia de obras acabadas por creadores/as. El resultado de eso, es el estímulo necesario que le lleva a querer escribir y concluir su propia obra
Y que mas íntima relación puede existir entre un lector y un/unos, escritores/as, que le incitan a través de la lectura, a querer escribir un libro….Es por ello que me e sentido un tanto perplejo, ante las afirmaciones de algunos participantes, por suerte pocos, que aseveran que tu relato no se ajusta a la convocatoria
Tu narración no puede ser mas original tanto en el propio relato, como en la forma que lo abordas. No recuerdo a nadie que haya tocado este tema, con la profundidad y lucidez con que tu lo haces.

Josan Caballero  Eduardo Olivella Ionescu • hace 14 días • edited

Qué hacer, cuando dentro de un foro no se mezclan las pasiones y falsos criterios o sentimientos de valoración, sino translucen los mensajes lúcidos y las frases de cuestionamiento y profundización de una obra, que por breve que sea, ha ductibilizado el pensamiento y la sensibilidad de quienes la leen. Ése es uno de los mayores méritos de la obra de arte, cualesquiera que esta sea. Y usted me saluda, Eduardo, y ha condecorado con la mejor estrella del entendimiento humano. Por eso le agradezco y lo invito a ser parte del equipo asesor, en mis festejos, por el décimo aniversario de mi blog personal, y por el nacimiento de una vertiente en mi obra genérica, en la que no había incursionado jamás: el microcuento. Lo saludo y le agradezco placenteramente, por sus grandiosas palabras, su amigo para siempre, Josan Caballero.

Bernardo Isaac Pozo Ramírez • hace 17 días

El destino nos lleva por caminos incalculables. Ayer quería entrar a un taller literario y hoy e ssd toy en uno de ellos, intentando votar y dejar constancia brevemente de los mejores cuentos. Me he leído varias veces el suyo, Josan. Verdadera unidad de tiempo y espacio para un personaje que se proyecta pero desaparece en su propuesta de quedarse con lo poco que le queda escrito, que luego desaparece, queriendo hallar la perfección literaria, y se queda vacío de palabras y conceptos. Buena exhibición de un Borrador Borrado. Me gusta su cuento y me lo llevo conmigo Josan.

Josan Caballero  Bernardo Isaac Pozo Ramírez • hace 14 días

Con qué objetividad y entusiasmo, usted valora mi relato, señor Bernardo. Es muy claro, que sabe lo que está diciendo, y obra con intelecto y seguridad, para reconocer el carácter simbólico y emblemático del microcuento que redacté, de una sentada, como se dice en el propio relato. Es un orgullo para mí, que usted haya manifestado su complacencia en el tono y el contenido que presenta al personaje trágico del BORRADOR BORRADO. Era mi finalidad, que el lector se identificara con esta atribulada circunstancia, para que a la vez tomara conciencia de su fatal e irremediable destino literario y literal. Espero que continúe gustando y dejando de complacer a otros, pues ésa es la disyuntiva y la capacidad polivalente de la obra de arte en nuestros días. Saludos cordiales, Josan Caballero.

Radames Brito Lopez  Josan Caballero • hace 7 días

Seguir las pautas de un gran escritor como usted Josan Caballero es adentranos en el éxito, y vea usted que me parece increíble poder conversar con usted de tú a tú y leer sus propuestas literarias como sus comentarios a todos los que presentan cuentos en este club de Escritura. Me hubiera gustado haber tenido más tiempo pero ya vendrán otros concursos y talleres. Me siento feliz de haber podido contactarlo y estar en su lugar de comentarios…

Josan Caballero  Radames Brito Lopez • hace 7 días • edited

Me siento agradecido con la vida y contigo, además de los demás, querido Radamés, porque con qué vehemencia y cariño me llamas «gran escritor», y yo también he sido, y soy, un principiante, un aprendiz, tratando de forjarse un seudónimo, qué diría yo un nombre. Todos somos apócrifos de alguien, que nos quiere jugar a hacer y ser sombra, querido amigo, pero eso tenemos que cambiarlo o burlarlo, hasta ser mejores y romper el ciclo de nuestro karma astral. No nos pase, como al gran cuento de Hans Christian Andersen («LA SOMBRA»), la única narración para adultos, que todos deberíamos conocer de memoria del «Príncipe de los Cuentistas»…Sencillamente, no tenemos que quedarnos rezagados y debemos, cada día, a cada tempo de nuestro tiempo, avanzar y dar nuestro salto mortal, convirtiendo nuestra piedra de Sísifo, en estrella, lista, para catapultar…Un abrazo y gracias, amigo Radamés, hoy me has hecho dar otro salto mortal. Saludos, Josan Caballero.

Jaime Arnau Anglés • hace 17 días • edited

He leído algunas obras muy interesantes. A mi particularmente me gusta que la lectura me haga reflexionar y me de opciones para poder analizar su contenido. y por supuesto que el texto esté muy bien escrito. El tuyo tiene todos esos elementos de sobra, ademas esta escrito, sin una sola letra de mas. Eso es muy importante, saber utilizar las palabras idóneas, y denota a un escrito o creador profesional Te lo digo de veras. Te dejo estrellas

Josan Caballero  Jaime Arnau Anglés • hace 14 días • edited

Unos pocos dicen, estimado Jaime, que esto es favoritismo de mis amigos, y yo a usted ni lo conozco, que además vive en España, y yo en Miami, pero qué le vamos a hacer, si en cada certamen de este tipo aparecen detractores y ciertas personas, que pretenden nublar el camino de quien anda y dialoga, con pasión y paso firme, sin inmiscuirse en la historia de los demás que participan. Estos son asuntos extraliterarios, que en nada repercuten dentro de la obra de arte o las decisiones de un club, taller o jurado calificador. Agradezco sus comentarios, que me honran y me ayudan a continuar, en esta dura faena de la Escritura, el arte y la comunicación. Gracias, en verdad, por las estrellas, que alumbran mi texto y contribuyen a realzarlo cada vez más. Un gran abrazo, por el estímulo y la fuerza, con que desarrolla su exposición. Atentamente, Josan Caballero.

HENAR TEJERO PASCUAL • hace 18 días

Excelente relato. Me gustó mucho.
Suerte y estrellas.
Un abrazo !!!

Josan Caballero  HENAR TEJERO PASCUAL • hace 14 días • edited

Espléndido relato el tuyo, Henar Tejero. Ya fui a entregarte mis estrellas y colocar mi mensaje enaltecedor. Con tanto trabajo multidisciplinario, no había podido regresarlo. Gracias por venir aquí, a traerme tu regalo, que unos cuantos dicen, no merezco. Pero, como no soy resentido, y escribo para que me lean las multitudes, no un coto cerrado o gremio literario, veo que continúan aumentando las vistas y las lecturas, que no es lo mismo, conjuntamente con las estrellas, que igualmente son valoraciones justas, vengan de donde vengan. ¿Y este taller se practica y constata, en la realidad, o en la virtualidad y la ritualidad de las redes sociales? Somos seres virtuales y sociales. Somos seres reales y virtuales, en tanto armamos nuestra «legión de fans», según me dijo alguien por acá; y también seguidores, que en definitiva son o serán nuestros lectores, como vengo haciendo hace diez años, con mis blogs, y otros medios de prensa, y hasta plataformas digitales. No hay que criticar, ni temer a eso. Un escritor, además de lector y tallerista, es un «influencers» más. Lo que tenemos es que estar a la altura de los tiempos y las tecnologías, sin desdorar o denostar a nadie. Es hora de romper esquemas y paradigmas, que la literatura fluye por las calles y ventanales; por las autopistas digitales, y, por suerte para nosotros, no se encierra en talleres, bibliotecas, libros, ni catedrales…Un gran saludo, por tu maravilloso texto, Henar, un verdadero descubrimiento, que merece muchas estrellas y otras bondades. Abrazos, Josan Caballero.

Esmeralda Asunción Flores Carm • hace 18 días

Ser buen lector y a la vez buen escritor debe ser difícil ya que quien escribe recibe la influencia de la lectura por todos lados. Vivimos regidos por la internet y el lector ya lee más en el computador que en los libros, por eso un escritor se nutre de muchas vias literarias que lo fortalecen o lo debilitan. Todos pecamos de repetirnos o repetir viejas fórmulas de Escritura y a autores a los que les seguimos los pasos. Encontrarme con un breve relato como Borrador Borrado me alegra bastante, Josan, porque usted atiende un conflicto que todos tenemos y que se relaciona con el existir después de crear una obra. Sin perder nuestra identidad y talento, para no tener que copiar a nadie, ni siquiera a nosotros a través de un estilo y formas o géneros que tampoco dominamos. Lo felicito y gracias a dios que este borrador suyo no fue borrado, porque hubiéramos perdido a un gran autor y un buen cuento digno de este concurso de microcuentos.

Raymundo Cesare Perdomo Luengo  Esmeralda Asunción Flores Carm • hace 15 días

Pienso como tú lo piensas Esmeralda, que todos hemos tratado de convertir nuestros errores en virtudes, y hemos cuidado y sobreprotegido nuestros escritos, para que no desaparezcan, tratando de no convertirnos en el personaje de Josan. Me identifico con el «borrador borrado» pues busco la perfección aunque sin encontrarla, y me he vuelto obsesivo al borde de perder mis textos, igual que el protagonista de Josan. Quiero mejorar paulatinamente y por eso me inscribí a este taller para superarme en todo. Felicito la obra de este autor maravilloso que me has alertado con tu cuento.

CESAR PATRICIO HIDALGO MARTINE • hace 18 días

Muy bonito tu borrador borrado, buen relato, te dejo mis estrellas…

Esmeralda Asunción Flores Carm  CESAR PATRICIO HIDALGO MARTINE • hace 18 días • edited

Yo quisiera colocar más estrellas pero me dejaron dar solamente diez votaciones. En próximas convocatorias deberían ampliar esto si nosotros comentamos más u demostramos nuestro talento para analizar y escribir sobre las obras que se exponen y cuentan en el club de Escritura. Me parece adecuado eso, verdad?

Josan Caballero  Esmeralda Asunción Flores Carm • hace 17 días • edited

Yo también estaba muy sorprendido, Esmeralda, porque al comienzo pensaba que sólo se podía votar diez veces, pero, en verdad, quienes no participan con algún microcuento,.o forman parte del taller, son los que están confinados por su escasez de votos, mientras que los concursantes pueden hacerlo cada vez que lo desean y el número de ocasiones y cantidad de estrellas a su arbitrio. Encantado de que hayas entrado y valorado mi texto. Saludos, Josan Caballero.

Josan Caballero  CESAR PATRICIO HIDALGO MARTINE • hace 18 días

Excelente, César, el regocijo es mutuo, como también la entrega de estrellas refulgentes, en este día, en que somos los únicos capaces de entregar la misma magia y luz, que nos puede llegar a catapultar. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Gloria Noemi Salinas • hace 18 días

Muy buen relato. Felicitaciones!

Josan Caballero  Gloria Noemi Salinas • hace 18 días

Muy agradecido, Gloria Noemí, en tu desenfadado y exigente «Despertar», que nos trae reminiscencias de disímiles realidades en fusión y conjunción. Ya fui a llevarte tus atinadas estrellas, destinadas a quedarse, hasta florecer el amanecer más luminoso y recóndito. Felicidades y saludos, Josan Caballero.

Gloria Noemi Salinas  Josan Caballero • hace 17 días

Gracias!! Me encantaron ambos comentarios. Te agradezco la cuota de poesía y reflexión literaria que le pusiste a ambos!!

Josan Caballero  Gloria Noemi Salinas • hace 14 días • edited

Estimada Gloria, no escribo por, o con, cuotas de nada. Ese derroche es directamente proporcional a lo que me inspira un texto como el tuyo. Agradezco tu entrada nuevamente y te congratulo en todas tus esencias…Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Eladio Marcial. Sánchez • hace 19 días

Hola, Muy buen relato el tuyo. Está lleno de ideas y tienes mucho que decir. Estuve a las puertas de concursar y en el ultimo momento puse el freno y me convertí en un borrador borrado; pero en mis neuronas aun quedan restos de lo que escribí y pienso rehacer mi relato y publicar en el próximo concurso de microrrelatos; si, lo tengo decidido. Leyendo tu micro, haces que me decisión ahora sea mas firme. Lo que escribes lo encuentro de una gran perfección, tanto en la forma como en el fondo. Felicidades Josan. Por aquí hay gente muy buena, pero voy a intentar hacerme un hueco….
Te dejo estrellas…

Josan Caballero  Eladio Marcial. Sánchez • hace 18 días

Lo que comentas, amigo Eladio Marcial, es de una certeza impresionante, pues cuántas veces hemos querido participar en determinado certamen, y luego, por x o por y, dejamos de insistir y se nos pasa el tiempo, pero, claro estoy que tu intento de concursar está a salvo, y ese «borrador», que aún subsiste y persiste, para no ser jamás «borrado», y lograr ser presentado, felizmente, en el próximo evento de este Club de Escritura. Créeme que sería feliz, si me lo muestras o envías, para leerlo, y en lo que pueda ver y ayudarte, ahí estaré, solícito y entregado. Mi correo es travesiadelcaballero@gmail.com, estamos a la orden, para cualquier ayuda o comentario. Muy original y simpática tu entrada marcial, digo, triunfal, en este foro de creadores. Desde ya, te tomo como ahijado, y te auxiliaré literariamente, en lo que quieras. Abrazos, Josan Caballero.

Eduardo Olivella Ionescu  Josan Caballero • hace 7 días • edited

Muchas gracias por tu amabilidad amigo Josan, no se como se me paso tu comentario, ofreciendo tu ayuda y tu estímulo, para materializar mi intención de publicar la micro que tengo ya realizada. Tendré en cuenta tu ofrecimiento. Un abrazo y mucha suerte con tu relato. Para mi uno de los mejores, sino el mejor de los que he leído en esta convocatoria. Un abrazo Eduardo Olivella

Josan Caballero  Eduardo Olivella Ionescu • hace 7 días

Muy agradecido nuevamente, Eduardo, cuando valoras mi ofrecimiento para asesorar y ayudar a todo el que precise de un taller o una edición de su cuento original. Estamos a la orden, en verdad, amigo Olivella. Saludos, Josan Caballero.

GUILLERMO PANADERO AGUILAR • hace 20 días

Me veo reflejado en tu creación , pues cuanto mas leo mas condiciono mi escritura, cuanto mas aprendo , indago y profundizo mas me doy cuenta lo poco que se y lo mucho que avanzo.,No obstante si tienes la tentación que te encuentras en el camino, aunque lo borre y me pierda tras los pasos de la perfección, siempre el siguiente texto vendrá con otro tipo de suelo mas sólido, hasta que el «borrador borrado», se convierta en una obra perfectamente definida.

Mis mas sinceras y humildes estrellas para tu creación y te pido por favor que visites la mía, con el único afán de compartir impresiones.

https://clubdeescritura.com…

Un abrazo de luz y que la inspiración así como la acumulación de borradores borrados, como mínimo te mantengan donde estas y te lleven donde mereces, mientras tanto a disfrutar el camino que es la mejor de las metas.

Josan Caballero  GUILLERMO PANADERO AGUILAR • hace 19 días

Excelente y sensible todo lo que dices, Guillermo, con un apellido memorable y productivo, afín con nuestro oficio de amasar las letras y las palabras, para cocer el pan literario. Somos los panaderos de la creacción, y me enaltece todo lo que escribes, y cómo lo haces. Somos la suma de muchos «borradores borrados», pero lo valioso está en que no nos contentamos con eso y avanzamos, para ser cada vez mejores. El que mucho de los talleristas y miembros del Club se vean y reflejen en el contenido de mi relato, me enorgullece, pues da certeza de que escribí y escogí el texto correcto, porque, como dijo un colega de acá, Sebastián H., que tire la primera piedra quien no ha sido jamás «borrador borrado», o, incluso, sepultado, en la difícil carrera de llevar su piedra literaria o manuscrito, hasta convertirla en estrellas, como aquí se hace ahora, entre microcuentos y votaciones. Claro que voy, con mucho gusto, a regocijarme con tu relato, y dejar mi gramo de estrellas, para que continúes en este camino, como dices, que es realmente la meta. Un aplauso por tu comentario lúcido y con infinita luz y tierra fértil, transformada en estrellas. Nos vemos nuevamente en tu foro, que continúe la sinergia y las vibras positivas, hasta llegar a la cima, con todas las estrellas. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Gpa Gpa Gpa  Josan Caballero • hace 18 días

Gracias y me haces pensar que a veces la impresión expuesta, sentida y transformada en letras de una creación literaria, incluso puede llegar a superar el mágico mensaje, trasciende en la comprensión de almas sensibles y afines que disfrutan con leer y escribir, a veces ajenos a todos y a todo para crear un mundo paralelo desde dentro hacia fuera, desde el corazón al reflejo del mundo que creemos real, no obstante no hay mas realidad verdadera, que sentir y ser fiel a la propia inspiración que sirve de lanzadera a lo maravilloso bello y sublime como el despertar en la consciencia, vestido de un puñado de letras.

Que siga esta conexión y admiración por este mundo fantástico que tenemos la suerte de compartir.

Esto no ha hecho nada más que empezar, nos seguimos leyendo y estamos en contacto.

Josan Caballero  Gpa Gpa Gpa • hace 14 días • edited

Me encantaría saber de esa «impresión expuesta», y acaso de ese mundo paralelo y afín, que nos congrega y solicita, Gpa Gpa, para subir piedras junto al pecho, que se convertirán enseguida en estrellas, que nos harán volar y rebotar al universo, entre otras cosas. No sé quién eres, pero lo que expresas es único y sin equívocos, de modo que me enhebro y camino hacia los puntos cardinales, que nos muestren la razón y la supervivencia del equilibrio del alma, como lema surtidor de esencias, sin dobles apariencias. Sigamos enarbolando el enigma y la estrategia rectora del BORRADOR BORRADO…Así sea.

Sebastian Terruellas Torres • hace 20 días

Tu cuento es sencillamente fantástico, ese binomio escritor-lector, ese lector devorador de libros, que no obstante no sabe leerse así mismo, esa búsqueda del perfeccionismo posiblemente utópico que no sabe trasladar a un folio, ese final tan metafórico, «Jamás quedó ni una constancia de ello. Fue sólo un borrador borrado.», tiene mucho de kafkiano, Todo el relato en si, como han dicho varios comentaristas por aquí, tiene aromas de Borges, de Cortázar y de algún otro genio.
Realismo mágico, crítica y un montón de ideas, encierran esas maravillosas líneas, que conforman tu genial relato.

Josan Caballero  Sebastian Terruellas Torres • hace 18 días • edited

Estimado Terruellas, es un placer encontrarme con comentarios tan lúcidos, como sinceros y espontáneos. Espero que nuestra amistad se envalentone con el cursar de los días y prosigamos en este diálogo fructífero y único, generador de interacción e ideas reconstructivas y productivas. Sólo una salvedad, como tendría que habérselo hecho a la colega María Esther, igualmente: No es, «no sabía leerse así mismo», sino «no sabía cómo leerse a sí mismo», o sea, separado «a» de «sí». Se carga de sentido, cuando lees esto de esa manera. Disculpa la intromisión y el señalamiento, pero suelo ser exquisito con los detalles y la ortografía. Manías de viejo filólogo, que no se soporta a sí mismo, cuando encuentra o ubica un errorcillo, por mínimo que éste sea. Espero tenerlo en múltiples ocasiones por acá, al igual que en mi blog de marras, amigo mío. Lo que dices de esos grandes escritores y pensadores, igualmente lo agradezco, pero yo que considero kafkiano ciertamente, y sobre todo, martiano, y un poco más kunderiano, por excelencia, pero no está demás, que me escudriñen y encuentren cercanías cercanía con esos grandes de la literatura. Favor me haces, y me alegra, ciertamente, y cada vez más. Un gran y cordial saludo, Josan Caballero.

Eduardo Olivella onescu  Josan Caballero • hace 7 días

Ciertamente coincido con Sebastian Terruellas, que tu texto está muy en la linea de algunos de los relatos cortos que publico Kafka, Muchos de ellos se encuentran en su libro «La muralla china»

Pradycantabria • hace 20 días

Ademas de impresionada por el numero de estrellas, he de decir que me ha gustado lo que he leído, sencillo y real con mucho contenido. Alguna estrella mas para la colección. Suerte!

Josan Caballero  Pradycantabria • hace 19 días

Me agrada sobremanera, que entres a regalarme estrellas y comentar en mi foro, estimada Prada, y espero entrar nuevamente en el tuyo, ya que sé ahora, que puedo entregar más estrellas a otros cuentistas, por ser talleristas. Mi relato ha gozado del beneplácito de más personas y participantes acá de los que pensé, la verdad. Te saludo y voy otra vez a tu sitio, para valorarte mucho mejor. Abrazos, Josan Caballero.

Piluchi Gonzalez S • hace 21 días

Estoy impresionada por la lluvia de estrellas que tiene tu micro. No hay duda que todo escritor comienza devorando libros y aprendiendo letras. Es buena idea la que plasmas y te dejo estrellas. Suerte…

Josan Caballero  Piluchi Gonzalez S • hace 21 días • edited

Preocupada Piluchi, me agrada que te hayas adentrado en mi foro, e incluso otorgado algunas estrellas para mi cuento, pues solamente el hecho de romper los cánones estrictos del taller literario per se, nos hace más libres de abrirnos, como las numerosas personas y miembros que somos y que desean sembrar más estrellas, que rencores y malestar, en este maravilloso Club de Escritura Fuentetaja, que está por culminar su II taller de Microrrelato 2019. Saludos cordiales, Josan Caballero.

Maria Esther Cuestas • hace 21 días

Hola , el texto es excelente !!La idea de que un escritor , antes que cualquier cosa , es un gran lector .Lo pensaba Borges , entre tantos otros . Cuantos lectores no llegan al papel impreso , pero claro que reescriben en su mente , en su interior las historias que han leído . La lectura conlleva a la escritura y a la reescritura . La escritura refleja lo que hemos leído, nos evidencia en nuestra condición de lectores , a través de gustos, ideología, concepto del arte y también de la vida .
En esta idea «..no sabía cómo leerse así mismo…» está cifrada esa íntima relación que hay entre la lectura y escritura , entre el lector y el texto .
El título , Un borrador borrado , da cuenta de una actitud crítica , que todos los que escribimos experimentamos muchas veces. El micro es metaliterario que es una de los requisitos que plantea el concurso . No se refiere directamente al taller , si a quienes escriben y leen y si consideramos lo virtual , un lector que escribe un borrador borrado , formaría parte de un taller de escritura desde la mirada de un narrador omnisciente , en tercera persona , como se da en este caso .
Guardo tu texto . Te dejo estrellas

Josan Caballero  Maria Esther Cuestas • hace 21 días • edited

Estimada María Esther, yo me he leído más de una vez los 650 microtextos, y por supuesto el mío, en enésimas ocasiones, gracias a mi adiestramiento, dentro de la Lectura Rápida o Veloz, un método verdaderamente eficaz, que auxilia muy bien a los editores o lectores editoriales, oficio que desarrollé, durante varios años, en Cuba, y que me permitió cierta ayuda económica, antes de dedicarme a la dramaturgia y la dirección teatral, con mi grupo Teatrova. Igualmente, los talleres para narradores de cuentos, exhortado por la Biblioteca Nacional de Cuba, la difundida Peña Literaria del Parque Lenin, o los sucesivos Encuentros de talleres de apreciación y creación, los Seminarios de Estudios Martianos, en los que participé y conduje, durante más de diez años, en Cuba. Quiero decirte, que resalto tu comentario a favor de mi relato, por el hecho de inmiscuirte en conceptos más científicos y de teoría literaria, propios de los estudios filológicos, relacionados con el meta texto o la literaturidad, que muchos escritores, aún aplicándolos, no los conocen a cabalidad, por tanto, se pierden en la naturaleza de los conceptos, e incluso, de los anticonceptivos. Sin embargo, en tu caso, respiro un manejo científico e intelectual de estas definiciones, apropiadas por una mente privilegiada, que sabe lo que está diciendo y, por tanto, lo aplica con naturalidad y desenfado, para resaltar las bondades o aristas intertextuales del BORRADOR BORRADO, que mucho tiene que ver, clara, espiritual y elípticamente, con Jorge Luis Borges, Julio Cortázar, Franz Kafka o Milán Kundera, por citar algunas de mis lecturas más recurrentes, pero al mismo tiempo, resulta un homenaje evidente y una reinversión contenidista y expresiva de esos eternos «borradores borrados», dentro del camino de la creacción de manuscritos, incunables y hasta en su versión editorial, que han tenido o pierden su identidad, sin poder facilitar su salvación escritural. Voy corriendo a votarte y comentarte, pues también, en mi desconocimiento de algunas reglas del certamen, pensé que sólo podía votar diez veces, y a partir de comentarios de los miembros del taller, entendí que nosotros podemos votar a muchas otras narraciones, por nuestra condición de talleristas y participantes escritores de los microcuentos. Siento gran devoción por quien entrega su conocimiento al servicio del esclarecimiento y ampliación intelectual de la comunidad, por eso, no sabes cómo te agradezco. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Maria Esther Cuestas  Josan Caballero • hace 21 días

Gracias Josan por tu devolución, resulta muy interesante y enriquecedor poder establecer un idea y vuelta entre el autor y el lector, acortando las distancias que hay entre ellos , entre el autor , su texto y el lector , como lo expresa Umberto Eco .
Amo la literatura y leo atravesada por mi formación , ya que soy Profesora de Lengua y Literatura .me he especializado en Letras Modernas con orientación histórico literaria y he realizado la Licenciatura en Letras .Modernas.
Soy nueva en el Club y todavía transitó este espacio con muchas dudas en cuanto a su funcionamiento.
Escribo desde hace algunos años con más dedicación relato y poesía. Participo en mi país, Argentina, de Cafés Literarios . He participado en algunos concursos en donde he logrado ser seleccionada para formar parte de Antologías . Disfruto mucho de estas actividades .
Me encanta el teatro y he realizado algunos estudios sobre el teatro de Max Aub , teatro de urgencias , de la época del exilio , a raíz de la Guerra Civil española.
He leído a Carpentier , a Leonardo Padura y conozco Cuba , país al que he tenido la posibilidad de conocer ,acercándome a su gente y su cultura
Josan , te saludo , es un placer conocerte un poco a través de este medio .

Josan Caballero  Maria Esther Cuestas • hace 18 días • edited

Disculpa que no te haya escrito antes, pues tengo mucho trabajo. Pero ahora te contesto, como debe ser, amiga María Esther. Para mí, es un inmenso placer conversar, con alguien de tanta cultura y preparación, que se entrega a la comunicación, tanto como a la palabra y el regocijo que la ampara. Mi correo es caballerodesafio@gmail.com y mi principal blog es www.josancaballero.news, mantengámonos en contacto, conversando. Podemos ayudarnos y confluir e influir mutuamente. Eres especial y seguiremos en esa sinergia y apoyo desinteresado y sutil. Te parece? Un abrazo y saludos, Josan Caballero.

Juan Marin Marin  Maria Esther Cuestas • hace 21 días

Tu comentario sobre el texto de Josan está muy bien razonado, perfectamente elaborado, Pienso que das en el clavo con lo que escribes. Cuando dices «En esta idea «..no sabía cómo leerse así mismo…» está cifrada esa íntima relación que hay entre la lectura y escritura , entre el lector y el texto .» Te felicito por tu capacidad analítica,y estoy absolutamente de acuerdo cuando dices que el texto es meta literario, o sea literatura sobre literatura. Realmente es un comentario tan inteligente, como útil para clarificar conceptos Felicidades.

Maria Esther Cuestas  Juan Marin Marin • hace 21 días

Estimado Juan , muchas gracias por tu elogios y devolución sobre el comentario que hice del texto de Josan . Es muy bueno ser leído y poder establecer una retroalimentación entre nosotros los participantes del.club .
No estoy muy ducha en el.manejo del.mecanismo del funcionamiento del club por eso me demoro bastante en leer y participar. Vamos aprendiendo, «haciendo camino al andar» .
Me gusta mucho escribir , aunque me reconozco como una principiante que quiere aprender y por eso hay que aplicar aquel dicho que dice que a escribir se aprende escribiendo. Nada más cierto que esto y hay que agregarle «leyendo» y en eso ando desde hace mucho tiempo.
Espero encontrar tu micro para leerte ya que como te digo me lleva mucho tiempo localizar los textos y autores.
Te saludo cordialmente.

PEPA H • hace 22 días

Buenos días desde España.
Acabo de leer el micro y me parece impecable, es muy bueno y deja ese poso de amargura que, a veces, nos queda a los escritores por no ser capaz de valorar lo propio, quizás fruto de la inseguridad y de la falta de autoestima.
Yo no voy a entrar en el debate de si se atiene a las bases del concurso o no, porque el taller aparezca de forma implícita o tal vez no, pues para eso está el jurado. Tampoco voy a recriminar el que se hayan inscrito amigos, seguidores o familiares para engrosar los votos pues pienso que si lo han hecho es porque no hay nada que lo impida y todos podríamos hacerlo, otra cosa es lo que cada uno haga, piense o actúe o su propia ética le dicte.
Bueno, para terminar solo decir, que vaya por delante mi enhorabuena y mis estrellas de valoración de la obra.
Me sentiría muy honrada de ser leída, comentada y valorada por alguien de tanto prestigio, pues soy un poco novata y tengo grandes deseos de aprender.
¡Saludos!

Josan Caballero  PEPA H • hace 21 días • edited

Estimada Pepa H., pues muy complacido con tu comentario y con tu microcuento, al que ya he votado, desde el comienzo. Sólo que no te había dejado el mensaje y valoración que mereces, como haré hoy, tanto en mi foro, como en el tuyo, que es como debe ser: una distinción mutua, sobre todo, cuando alguien ofrece un nivel de lucidez apreciable y contundente, al analizar y comentar en torno al BORRADOR BORRADO. Tu texto, además de derrochar un humor implícito impresionante y una caracterización del protagonista muy afectuosa y simpática, nos interna en una forma de narrar súper original y sincera, además de sencilla y amena, muy ocurrente. Según mi criterio, lo que escribiste tiene todas las señas y prodigios, para lograr mejores y mayores puntuaciones, tanto como valoraciones y evaluaciones contenidistas y formales mucho más memorables, que las que aún tiene. Gozas de buena salud, en lo concerniente a conseguir un perfecto clímax con tu texto, muchísimo más que otros, que ya aparecen con puntuaciones superiores al tuyo. Yo espero hacer un comentario más amplio, cuando te haga la cortesía de entrar en tu foro, amiga mía. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Juan Marin Marin • hace 22 días

De las mejores, sino la mejor micro que he leído en este concurso. Considero muy positivo, haya tanta gente a quien esta narración, le sugiera, dentro de una idea central clara, ideas aveces tan dispares; otra cosa es que los comentaristas puedan reflexionar, filosofar y converger elipticamente sobre la idea central que contiene el relato, para mi modo de ver una brillante metáfora sobre la indecisión de concluir una narración,,,y ahí si pueden aparecer, los miedos a no gustar, al fracaso, ..y en definitiva a no alcanzar las expectativas que uno se había hecho; pero es que una creación una vez concluida y presentada al público, muchas veces genera por parte de este y de los críticos ideas, que aveces ni en propio autor se había planteado.
Esa es, a mi modo de ver, una de las grandezas del arte en general y de la literatura en particular.
Existe una película con casi 60 años de existencia «El año pasado en Marienbad» donde el director el genial «Alain Resnais», en contraposición con el guionista y autor de la obra «Alain Robbe-Grillet» tiene una idea distinta sobre la razón, del porque actúan de una determinada manera los personajes de la obra. Como dicen algunos autores y cantantes de ciertas obras, por las razones que sean, acaban teniendo un significado que poco tiene que ver con la intencionalidad con las que fueron creadas, cuantas veces un autor ha dicho, esta obra ya pertenece al público, a la gente, al pueblo…..
Si me extiendo tanto sobre este tema, es para que de una vez por todas, ciertas personas que opinan por aquí, se den cuenta, que una narración, no tiene porque estar concebida para crear una disertación filosófica en absoluto, son los lectores, quienes al leerla y opinar sobre la idea que contiene, son capaces de abrir caminos intelectuales que les lleva a reflexionar y filosofar sobre ciertos temas, pero eso pasa en la literatura, en el cine, en la música y en cualquier creación artística que tenga un contenido importante. Como he leído de alguien por aquí, el hecho de desencadenar en el lector reflexiones que puedan converger con otras disciplinas como la filosofía, u otras ramas del conocimiento y la cultura, no priva que implícitamente en su contenido, existan todos los elementos necesarios para que pueda ser considerado dentro de un taller de de escritura aunque sea de forma implícita.
Cito textualmente lo que dice «Gloria Fernández Rozas» sobre «Taller de escritura creativa online»
«Este taller literario a través de Internet es nuestra actividad más antigua y ambiciosa. Se dirige a todas aquellas personas interesadas en la creación literaria que son conscientes de que el aprendizaje de la escritura es un trabajo a largo plazo que requiere disciplina, paciencia y una «reflexión permanente» sobre los más diversos aspectos que involucra el proceso creador.»
Tengo claro que el texto de «Josan Caballero» cumple los requisitos necesarios que exige el concurso, y si alguien tiene dudas, que se lea concienzudamente lo que pide el taller de escritura para poder concursar, de todas formas existe un jurado, para determinar que obras pueden o no pueden participar en este concurso. Por lo cual que nadie se ponga nervioso, que confié plenamente en el jurado y que ponga toda la carne en el Asador como se dice vulgarmente, para crear comentarios constructivos y reflexivos, dignos del intelecto de todos los que estamos aquí creando o comentando,
sin enzarzarse en disputas absurdas que no conducen a ningún sitio.

Fernando Augier Padrón • hace 23 días • edited

Mi padre era un gran poeta. Yo no me asemejo a él. Gusto más de la narrativa y me agrada mucho el giro que le das al microtexto, porque me parece que todos hemos pasado por eso. Claro que abunda el taller de lectura y literatura ahí. Lo que aparece elípticamente. He ahí lo mejor que posee tu cuento, que sin decirlo, claro que nos dices más. No hay que evidenciar el taller literario para reconocer que ese personaje está obsesionado con la escritura hasta hacerse trágico y desaparecer como un borrador borrado. Majestuoso. No escuches lo que te dicen, sino sólo cree en tu relato, que es grande. Como leí que planteas en algún mensaje, quien decide es el jurado, y aunque lo hagan a favor o no, siempre tu cuento será mejor que muchos y sin dudas constituye el batacazo del certamen que nunca pensaron encontrarse estos talleristas. Felicidades.

Jorge Martinez Arnau  Fernando Augier Padrón • hace 23 días • edited

Estoy de acuerdo completamente con tu opinión; el taller literario se encuentra en el texto de una forma implícita y como dice «Sebastian H» «Lo que realza un relato es aquello que no está a la vista, aquello que se sugiere, ocultándose entre lo bello y lo siniestro.» No hace falta remarcar lo de taller literario para entender y comprender que se encuentra implícitamente en el contenido de de la micro, yo por lo menos lo observo así. El borrador borrado se ha convertido en un punto de encuentro entre talleristas, y eso me parece fenomenal. Considero muy interesante la opinión de todos los que aquí participan, sin distinción de sus ideas como en el caso de «Daphne».
Es normal que existan discrepancias y la gente observe las cosas desde distintos puntos de vista,,,hay quien le gusta que se lo den todo mascado, y hay quien prefiere las sugerencias y las pistas que puede tener un relato para descubrir..comprender que lo que piensa que falta, se encuentra contenido en el relato; como en este caso el taller literario, contenido implícitamente en el relato, como bien dije en el inicio del comentario
De todas formas existe un jurado que es finalmente quien va a decidir. Pero buena, muy buena es la polémica que nos permite debatir y crear nuevas perspectivas desde donde observar la narración, como dice «La psicología de la Gestalt», El todo es diferente a la suma de las partes.

Josan Caballero  Jorge Martinez Arnau • hace 23 días • edited

Tanto Fernando, como Jorge, han entrado en un instante justo, y tocado una fibra sensible del asunto que nos compete, en estas horas, pues si algo tiene el BORRADOR BORRADO es que nos abarca a todos por igual, en lo concerniente al exceso de taller, edición, autocensura, aparente perfeccionismo y poda de uno o varios textos, que pueden hacer mermar la obra, hasta su posible extinción, sin remedio. Debemos estar claros, en que, cuando se habló de una temática como el taller literario, para este concurso, lo hicieron ampliamente, sin restricciones ni discriminaciones, en la forma de tratar dicho asunto en la obra de arte. De ahí que les agradezca, tanto a Fernando, Jorge, Niurka y Sebastián la manera combativa y explícita, con que trataron este tema, que se encuentra implícito dentro del argumento de mi microcuento. Gracias y saludos nuevamente, Josan Caballero.

Sebastián H • hace 25 días

Como dicen, no se ajusta a la convocatoria. Pero que tire la primera piedra quien nunca fue borrado. O quien nunca se borró a sí mismo. O quien nunca se sintió exiliado entre sus palabras. Abrazo.

Josan Caballero  Sebastián H • hace 24 días • edited

Estimado Sebastián H., ya fui los otros días a votar por su microcuento, y lo que dice usted es muy correcto y concienzudo. Quién dijo que lo filosófico y la tragedia de un lector-escritor borrado es ajena a un taller de Escritura, aunque no se nombre o mencione la palabra «taller». Es agarrarse por los aires y a la deriva, en la desesperación y el miedo por no llegar a sus metas. Cada cual tiene la suya, y en mi caso, sin arrebatarle a los demás nada. Quieren montar una cacería de brujas, mejor dicho, una cacería de «borradores borrados», por el solo hecho de estar en la avanzada de los textos más votados. Algun interés tienen, cuando entran varios en mi foro, indistintamente, para aleccionar me y provocarme. Esa es una actitud desleal y contrastable con el espíritu de este Club de Escritura. Señal de que se sienten inseguros de sus textos y sus votos, sean los que sean. Agradezco la gentileza y el acierto de sus comentarios. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Sebastián H  Josan Caballero • hace 23 días

Compañero, coincido en lo que decís. Lo que realza un relato es aquello que no está a la vista, aquello que se sugiere, ocultándose entre lo bello y lo siniestro. ¿Quién golpea más fuerte que la retórica de la filosofía? Un Borrador borrado es la expresión sublime que describe, no el sentimiento de soledad frente al vacío, sino la angustia frente a una totalización insoportable que nos lleva a borrar lo escrito, lo vivido, lo sentido. ¿Pero no queda en algún lugar un resto, un desecho, para dar cuenta de que hubieron palabras? ¿No será eso escribir? Ese rejunte de restos que quedan en lo borrado. ¿No permanece una huella en la borradura? Lo que está, en apariencia, de más, lo que sobra y no sobra. Lo que angustia, lo que mata. Tu micro es sencillamente genial. Abrazo.

Jorge Martinez Arnau  Sebastián H • hace 23 días

Enhora buena por tu comentario tan lucido como brillante, al que me adhiero absolutamente. Ya en el comentario que respondí a Fernando Augier Padrón. cito «Lo que realza un relato es aquello que no está a la vista…» Completamente de acuerdo que la micro de Josan es genial, y tu comentario no le va a la zaga

Josan Caballero  Sebastián H • hace 23 días

Eres muy gentil, ya te dije en cierta oportunidad, Sebastián. Te lo vuelvo a repetir, puesto que llegas otra vez con un mensaje alentador y entusiasta, que no coarta o desvirtúa al «Borrador Borrado», sino que lo ensalza y envuelve dentro de un marco implícito, que puede lo mismo hallarse, en b el marco de un taller literario, como dentro de un aula creativa; tal vez en un estudio fotográfico o en la sala de su casa. Eres ese tipo de escritor-lector, que confabula la narración, en favor de su engrandecimiento y sustentación como obra de arte, no formando parte de una especie de cortejo o aquelarre demoníaco, que pretende desmoronar sus valores intrínsecos, y desbarrar de un cuento que sobresale, en todas sus formas y normas contenidistas, formales y lingüísticas. Gracias una vez más, lo saluda, cordialmente, Josan Caballero.

Daphne • hace 25 días

Interesante lo narrado. Pero, disculpa, no se ajusta a la convocatoria. Parece más un relato filosófico.
Sea Buena Tu Jornada

Piky Pelaez  Daphne • hace 24 días • edited

Coincido Daphne.
Es una reflexión y no una actividad o situación que referencie a un taller literario.
Puedes usar metáforas, analogías, incluso hasta filosofar, pero las bases hablan de experiencias, ciertas o inventadas, en el contexto de un taller de escritura…

Leopoldo Vila Ezquerro • hace 25 días

Me parece muy buena tu narración. Es muy concisa. Contiene una idea brillante y la desarrollas de forma perfecta y un tanto inquietante. El comentario de Alberto Suarwez es verdaderamente original….al tocar aun que sea un tanto cogido por los pelos, un tema del que me parece, poco se ha escrito por aquí. Te dejo estrellas, pues pienso que tu relato las vale.

Niurka Galiano Lam  Leopoldo Vila Ezquerro • hace 23 días

Yo también le dejo estrellas a quien busca sanar más que borrar, al escritor que atiende a un personaje que se quiebra de tanto borrar, y no que queda nada que decir o hacer más que ser borrado. Te felicito por tu valentía de enfrentar ángeles y demonios de todos lados, porque el taller lo hacemos todos, desde nuestras casas, barrios, mundo y extratosfera. Esa historia de no estar en un taller fue traída por los pelos de alguien que no se halla contenta(o) con su relato, ni con el tuyo, ni con el mío, si acaso hubiera tenido oportunidad de participar en esta edición. Ellos, esos pocos, quieren que te vayas del concurso, pero si tú tienes los votos suficientes para estar. Huelgan y cuelgan comentarios. Que lo decida el jurado, que es finalmente quien tiene que opinar. Yo lo leo magnífico y tremendo argumento para un largo cuento, sin taller y todo. Congratulations, pana.

Albeerto Suarwez Zubieta • hace 25 días

Buenas tardes, felicitarte nuevamente por tu micro. Como se ha dicho tantas veces por distintos comentaristas, tu texto tiene una idea central que es genial, pero hay tantas posibles interpretaciones, alrededor de este breve y brillante texto que siempre van apareciendo ideas nuevas…que son como satélites alrededor de la idea central que es la estrella de tu breve relato. Hoy casualmente leyendo un artículo en la prensa, que trataba de los malabares que tenía que hacer cierto periodista para esquivar la censura en un país de la vieja Europa, me ha venido a la mente el tema de la censura y de tu micro…., donde el lector trata de escribir, una y otra vez sobre un tema sin llegar a conseguir que pueda llegar a publicarse nunca, pues no encuentra la forma de sortear la censura, su narración, termina siempre en la papelera convertido en un borrador borrado …..

Federico Neja • hace 25 días

Paso a dejar estrellas, a uno de los micros que más me gustó. Éxitos!

Josan Caballero  Federico Neja • hace 24 días • edited

Gracias, mi estimado Federico, ya te llevé igualmente tus merecidas estrellas, pero te has dado cuenta que hay algunos que ahora intentan una cruzada en contra del «Borrador Borrado», diciendo, sin argumentos, que está fuera de la temática expuesta en la convocatoria, sólo porque aumentan las votaciones y ellos se quedan atrás, sin forma de llegar a esos números. Siga usted con su propuesta, que el camino literario, como la suerte, es ancho y ajeno. Saludos y continuidad, Josan Caballero.

Federico Neja  Josan Caballero • hace 20 días

lamento enterarme de eso. En todo caso, a mi me parece un texto brillante. No se si sirve para algo esto, pero de ganar algún premio, uno debe renunciar al derecho de autor a no se que hayan cambiado las reglas. Y en fin, no se si eso es una victoria o no. Saludos.

Josan Caballero  Federico Neja • hace 20 días

No sé esas reglas, amigo Federivo, pero debe ser, porque el premio gana trescientos euros en efectivo, por tanto, el autor debe hacer dejación de su derecho de autor, por el tiempo que se estipule en dicha convocatoria. Eso es lo que pienso. Peto no te sé decir a ciencia cierta. Saludos, Josan.

Igor Mortecino • hace 25 días

Hola, Josan. Buen relato. Yo lo interpreto como un homenaje a una persona indecisa, que le cuesta tomar decisiones y llena de inseguridades. Nunca escribirà nada porque nunca creerà que lo que hace està bien. Te felicito.
Por otro lado, veo por los comentarios que un gran nùmero de personas fuera de este club de escritores se ha inscrito solo para votarte. Si bien eso está permitido, no podràs medir como calò tu relato entre la comunidad regular del mismo. Saludos y toda la suerte.

Josan Caballero  Igor Mortecino • hace 25 días • edited

Estimado Igor, se puede medir todo, máxime cuando un buen relato transgrede los marcos de un sitio en especial, como lo que tú planteas. Yo no escribo sólo para este Club de Escritura, yo creo para el universo, incluso, que hayan entrado personas, seguidores y comentaristas de varios lados del mundo, y hasta de mi blog, esto nutre a la comunidad en sí, que no debería ser un coto cerrado ni una especie de cofradía, como usted me la está poniendo. Muchos de este mismo Club han entrado a comentar y a felicitarme, como igualmente he ido yo a su foro a hacerlo, de la misma manera que lo han hecho mis amigos comentaristas en algunos otros casos de cuentos memorables. Ni creo que haya necesidad de leer mensajes, como los que me encuentro a veces en otros sitios donde entro a comentar, que sólo dicen: «He venido a traerte mis estrellas, buen texto», entre palabras huecas o banales, que no argumentan, ni analizan nada esencial del cuento. Si usted se interna en mi foro, Igor, y además hurga, entre los que van de mis amigos comentaristas, al de otros concursantes, se percatará que son locuaces y atractivos mensajes, analíticos e inteligentes. Eso es lo que verdaderamente me importa e interesa, no pulsar o impulsar una carrera local, para llegar a ser el presidente o el vocal de este Club de marras. Yo soy escritor del universo, como muchos acá, y prestigio este certamen, al igual que los comentaristas que llegan de fuera, a hacer lo mismo. Deberían ganarlos, no restarlos. Incluso, lo que usted está diciendo, podría tomarse negativamente, pero yo lo hago de una forma positiva y amplia, sin discriminar a nadie. Siempre he dicho, que hay carretera y vías de llegar, para todo el mundo. A qué se le teme, cuando se crea en buena lid, y con imparcialidad, sin quitarle el sitio a nadie. Usted mismo ha dicho, que este Club no es restrictivo, y que todo el que desee puede entrar e inscribirse. Inviten ustedes a sus fans, amigos y admiradores, para que ejerzan su función de comentaristas. El árbitro es otro, y decidirá lo que concluyan entre todos, democráticamente, el 8 de enero. Ya de por sí, los que aceptan al «Borrador Borrado», y eligen, han tenido que, para votar por mi cuento, hacerlo por 9 otros, lo cual me parece una tremenda exageración, pero debe aceptarse, sólo, porque se encuentra en las bases del concurso. Saludos, Josan Caballero.

Igor Mortecino  Josan Caballero • hace 25 días

«Yo creo para el universo» «Yo soy escritor del universo y prestigio este certamen»
Ante semejante despliegue de egocentrismo, comprendo que cualquier cosa que yo trate de argumentar caerá en oídos sordos. Por tanto lo que me queda es desearle suerte en la convocatoria. Saludos.

Josan Caballero  Igor Mortecino • hace 23 días • edited

También te deseo la mejor de las suertes, amigo Igor, y que esas «huestes», que traes y atraes para mí, puedas enfilarlas y aprovecharlas para empinar tu texto a la cima, que igualmente lo merece, y precisa de votos más enérgicos. E insisto en el universo, no por egocentrismo, pues decía José Martí, nuestro gran poeta cubano, que «Patria es HUMANIDAD», sin equivocar esta frase, como ha hecho usted, pensando que lo ofendía. Yo no deseo agredir a nadie, y menos a alguien, que entró
respetuoso, en su primer comentario, mas sólo estoy defendiendo mi «Borrador Borrado» de un intento premeditado y alevoso de querer descaracterizarlo y sacarlo de contexto, cuando todos sabemos, que el taller permanece implícito en toda labor de edición y perfección de una obra, cualquiera que ella sea, propia o colectiva, incluso, salvo escasas excepciones, muchos de los que puntean este 30 de noviembre, han entrado a este foro a comentar, con alabanzas o no, mi cuento, como lo he hecho yo, en casi todos los casos. Y sino, dedíquese a hurgar, en el cuerpo de comentarios de acá, y los verá a los dos lados de ambos foros, el mío y el de cada uno de ellos, pues realmente resulta una agradable coincidencia. De la misma manera, en que ahora le dejo, respetuosamente, un conteo expositor, para los que no llevan cuenta justa de los votos, esparciendo humo derrotista sobre este foro, cuando deberían usar sus bríos, en un juego limpio y certero, para continuar y hasta concretarse, en seguir trabajando, por el aseguramiento de posiciones meritorias, como lo hacen estos colegas, amén de ciertos que amedrentan. Siga la lista, en detalle, desde el conteo de 651 escritores participantes, los 21 autores y microcuentos más votados, en dicho certamen, hasta hoy, de manera aleatoria, cuyo cierre parcial se hizo a las 6:00 p.m., en Miami, USA (12 a.m., hora de Madrid, España):
* AQUÍ VAMOS, Alicia Prack: 397 estrellas; 782 lecturas; 325 comentarios.
* ERROR, Arturo Moreno: 330 estrellas; 616 lecturas; 176 comentarios.
* LA INSPIRACION, Starlyn Junior Rosario de la Rosa: 353 estrellas; 428 lecturas; 50 mensajes.
* BORRADOR BORRADO, Josan Caballero: 520 estrellas; 782 lecturas; 237 comentarios.
* CORRECCIÓN DE ESTILO, José Luis Chaparro: 244 estrellas; 644 lecturas; 156 mensajes.
* Y UN LUNES ME LEVANTE POETA, Moraima Feijóo Méndez:
241 estrellas; 563 vistas;
145 comentarios.
* VIDEO KILLED THE RADIO STAR, María Montoya Rodríguez: 259 estrellas; 315 vistas; 161 comentarios.
* MATAR AL PERSONAJE, Piky Peláez: 231 estrellas; 689 vistas; 179 mensajes.
* DODO Y EL VERBO, Hermenegildo Rodríguez:
211 estrellas; 456 vistas;
71 comentarios.
* MIS DRAGONES, Ginimar de Letras: 225 estrellas; 251 vistas; 110 comentarios.
* SOBRAS, Eugenia Zorrilla: 203 estrellas; 399 lecturas; 129 mensajes.
* ERA, SOY, SERÉ, Joaquín Pereira: 199 estrellas; 239 vistas; 102
comentarios.
* INSOMNIO, Ofelia Gómez: 193 estrellas; 239 vistas; 128 mensajes.
* UN TRABAJO BIEN HECHO, Grazalema de Sal: 191 estrellas; 268 vistas; 90 mensajes.
* ME FUI POR LA LIBRE…, Hildegardo Pirapucheta: 177 estrellas; 578 vistas; 144 comentarios.
* CERVANTES EN EL TALLER, JULIUS: 172 estrellas; 244 vistas; 112
comentarios.
* NARRATIVA EMOCIONAL, Enrique Mochón Romera: 170 estrellas; 186 vistas; 73
comentarios.
* LA TAREA, ROBERTO:
166 estrellas; 503 vistas; 95 comentarios.
* BIENVENIDOS A HOGWARTS, Piluchi González S.: 156 estrellas; 381 vistas; 105 comentarios.
* LOS MUERTOS VIVIENTES, Abel Valenzuela García: 155 estrellas; 193 vistas; 45 comentarios.
* CON LAS MANOS, Atalanta: 152 estrellas; 502 vistas; 120 mensajes.
Hecho este primer corte, a 11 días del comienzo de las votaciones, es un primer balance, que no decide nada, puesto que los jurados son quienes tienen la última y definitiva palabra, además de que no hemos llegado a las próximas votaciones, que culminan el 16 de diciembre. Deseo, más que todo, cordialidad y justa emulación entre todos, que eso es lo más grato de un taller global. Gracias. Amanecerá y veremos. Saludos, Josan Caballero.

Jeremías Antonio Soldani Marci • hace 25 días

Crear es difícil, y más cuando se trata de un microcuento, de escasas frases y una idea central coherente, que termina en sorpresa y determina la sustancia del texto. Creo que has logrado un gran relato, que se amplifica por la cantidad de ideas que sugiere y hasta encierra. Me lo guardo para leerlo y releerlo muchas veces. Felicidades, colega. Gran idea y resultado merecedor de un galardón.

Josan Caballero  Jeremías Antonio Soldani Marci • hace 24 días • edited

Ahora dicen que no algunos colegas, señor Jeremías, que no merece nada mi BORRADOR BORRADOR, pues no se ajusta, según estos «ajustadores miembristas», al tema principal del certamen, pero hay opiniones diversas y encontradas. Quieren defenestrarme, por el hecho de ir más rápido numerológicamente, en las votaciones, que muchos de ellos. Pero esto que hacen contraviene una de la cláusulas éticas del Club, manifestadas en sus normas, que es el «Juego Limpio». Y lo que dice usted, entre otras cosas, es lo que importa. Seguir escribiendo y andando, que lo demás lo decide el jurado. Valga que no es ninguno de ellos, entrando al foro y creando malestar e intriga. Esto es una sucia maniobra de pelagatos, que le temen a la justa confrontación de un rival, que no es considerado como un colega, que comparte y promueve una competencia en buena lid. Además, ni que fuera el Nóbel, qué torpeza y poca amplitud de miras, la de estos señores, que no miden tampoco las consecuencias de sus actos denostables. Saludos. Josan Caballero.

(El comentario ha sido eliminado.)

Josan Caballero  Guest • hace un mes • edited

Mis estimaciones para usted, Grazalema, que encuentro en este foro de marras, y que me trae y atrae la gracia divina de la creacción. Sobre la muerte de cuántos textos primigenios levantamos los últimos vestigios de uno prístino y feliz. Nuestro BORRADOR BORRADO es el símbolo preclaro de los tantos caídos, sin superar el enigma de la hoja en blanco y del perfeccionismo a priori, sin medir las consecuencias del miedo y la autocensura, para la obra de arte finalmente. Los talleres lirerarios y de escritura tienen esa magia de la salvación y la conservación de nuestras creacciones, en peligro de extinción, sin pretensión de extensión. Muchas gracias y saludos, Josan Caballero.

Eduardo Olivella Ionescu  Josan Caballero • hace 7 días

Muy cierto, que los comentarios y contra comentarios vertidos en este foro, tienen la virtud de hacer piña entre los talleristas. Seguro que mas de uno habrá sentido el gusanillo de animarse a contar su narración,
Muy bueno tu cuento. Todo un lujo leerte y poder reflexionar sobre esta genial idea que vertebra tu micro
Enhorabuena por este relato que me parece de lo mejor que se ha publicado en esta convocatoria.

Victorie Ortiz • hace un mes

Encantada Josan con tu cuento. Me gustó mucho. Besos y que ganes.

Josan Caballero  Victorie Ortiz • hace 25 días

Escribir es una forma de encantamiento, estimada Victorie, que cada creador sortea y desarrolla de distinto modo. Agradezco sus breves, pero emotivas palabras. Un saludo atento, Josan Caballero.

Marylis, a veces Mary • hace un mes • edited

Josan,

Hermoso cuento! Que gran perdida todas esas obras borradas, olvidadas! Yo las hubiera leido. Felicitaciones y suerte en la convocatoria. Indudablemente un favorito!

Carlos Munoz Fontanills  Marylis, a veces Mary • hace un mes

Nos parece muy bien lo que dices, Marylis, ya que el micro de Josan logra proyectarse a distintos públicos y con diversas significaciones. Esa es la clave de su validez como pequeño cuento, que todo el que lo lee, interpreta un mensaje posible y/o diferente. Eres un narrador excelente Josan Caballero. Tienes muchas opciones de ganar o estar entre los más votados y mejores propuestas del jurado calificador.

Josan Caballero  Marylis, a veces Mary • hace un mes • edited

Muchas gracias, por darme como favorito, a casi un mes del cierre de este concurso, estimada Marylis, pero existen muy buenos textos y narradores por acá, sin embargo, es importante contar con seguidores y fans, que nos devuelvan la certeza y el regocijo de lo creado con beneplácito. Espero que podamos conversar más y mejor, pero no sé si estás concursando con un microcuento acá. Avísame, para ir a leerte y comentar. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Eusebio González Mir • hace un mes

Hace un rato, he votado con 5 estrellas a Josan Caballero y he visto tenia 396 con mis votos…ahora al volver a entrar en el club de escritura veo que figuran 394…donde han ido a parar los dos votos que faltan?
Yo hace ya tiempo sigo a Josan en su blog de wordpress. Le he comunicado le votaba con 5 estrellas y ahora me encuentro con esto, ruego, por favor, a la persona que se encarga de moderar esto arregle este error que no se como ha podido pasar..Gracias de antemano.

Josan Caballero  Eusebio González Mir • hace un mes

Estimado Eusebio, ciertamente que me alarma esto de tener votos a favor, y que luego desaparezcan, sin ton ni son. Es como si por arte de magia se perdieran los votos de tus seguidores o votantes. Espero que haya alguna respuesta o explicación convincente para esto, sin embargo, ello queda ante el arbitrio de los organizadores y técnicos del sitio web, que sabrán demostrarnos qué pasó hoy en este caso. Estaremos al tanto de lo sucedido, y quedamos a la espera de una razón o de algún directivo que nos explique o convenza de este extraño hecho. Gracias por tu notificación y alarma, amigo Eusebio. Te saluda, Josan Caballero.

Marylis, a veces Mary  Eusebio González Mir • hace un mes

Eusebio,

Es posible que alguien lo voto antes, y ahora despues de releer muchos otros cuentos, le haya quitado su voto. O que alguien lo haya votado por error y lo haya corregido mas tarde. Si tu abres el cuento y «ves» que has dado estrellas, eso es lo unico que cuenta.

Eusebio González Mir • hace un mes

Mi enhorabuena por tu excelente narración. Te he dejado estrellas. Tiene muchas ideas y un buen mensaje, Ademas está perfectamente escrito. Dices lo preciso y es perfectamente atendible por todos. Para el que quiera reflexionar, en estas pocas lineas seguro encontrara un abanico de interpretaciones. Genial

Josan Caballero  Eusebio González Mir • hace un mes

Me gustan las narraciones que tengan finales abiertos e incluso varios, y sobre todo que abunden en interpretaciones, amigo Eusebio, por eso me sorprende cuántos giros y vericuetos le han encontrado a mi microrrelato. Eso satisface de veras, y te hace exigirte mucho más. Espero verte por mi blog personal. Bienvenido, te saluda, Josan Caballero.

Joaquín Pereira • hace un mes

Tienes mis estrellas Josan:

Un homanaje a todas esas historias que no fueron mostradas y terminaron auto destruidas.

https://clubdeescritura.com…

Abrazote

@Joaquin_Pereira
0034665073104
casadeescritores.wordpress.com

Josan Caballero  Joaquín Pereira • hace un mes • edited

Estimado Joaquín, ya había ido yo, desde que voté, a ponerte tus estrellas, pues tu microrrelato me gustó e impactó, lo que por falta de tiempo no pude comentarlo, y ahora, que tienes la gentileza de pasar por mi muro, entonces te lo digo y te entrego tu amabilidad y regocijo. Yo tengo igualmente varios blogs, que cumplieron diez años de creados, y me agradaría mucho intercambiar comentarios y colaboraciones. Espero, además, poder entrar nuevamente a tu foro del cuento, para estamparte allí tu merecido comentario. Saludos y abrazos.
JOSAN CABALLERO
www.josancaballero.news
1-7868179261

Jordi Viñals Clavero • hace un mes

Excelente. Tan original como bien escrito. Te felicito por el mensaje que lleva implícito y por todos los niveles de interpretación que se esconden en estas breves lineas. Enhorabuena

Carlos Munoz Fontanills  Jordi Viñals Clavero • hace un mes

Ya he comentado este pertinente, señor Jordi Viñals, puesto que nuestro amigo Josan llega a distintos niveles de comprensión y lectura de su cuento, con lo que se alza como uno de los grandes del microcuento en este sitio que lo vio nacer como narrador y comentarista.

Maria Teresa Arenillas Garcia • hace un mes

Muy bueno,un gusto leerlo, leerte. Enhorabuena.

Carlos Munoz Fontanills  Maria Teresa Arenillas Garcia • hace un mes

Es corto lo que dices, María Teresa, pero muy especial y acertado. Da alegría y ganas de leer a Josan Caballero, tanto en su blog como en este Club de escritores estupendos.

Francisco Mas Molas • hace un mes

El lector ensimismado con la lectura de K. parece que ve y siente a los personajes de la narración.
Se `pone a escribir, tiene cosas que decir y va a escribir una obra maestra,
Coge un boli y en un folio empieza a plasmar su historia: pero cuando van unas cuantas lineas y lee lo escrito…no le convence; lo lee en voz alta a ver si así… pero nada…
Arroja el boli, estruja el folio y vuelve a empezar. la operación se repite una y otra vez, pero no logra ni por asomo encontrar lo que busca. Así va transcurriendo el tiempo…solo esta el y un montón de folios rotos en el suelo,,,
Hay tantas sugerencias en estas pocas lineas que ha escrito Josan . Hay tantas interpretaciones que se pueden llevar al campo de la filosofía de la literatura; de la vida misma…. sino damos un paso adelante, y no nos decidimos a crear nuestra propia obra, no sabremos nunca si somos capaces de hacer realidad nuestro sueño
Al margen de la idea del borrador borrado, existen tantas otras cosas..la búsqueda de un ideal que nunca se acaba de encontrar…el amor perfecto…incluso la busca de la divinidad sinos ponemos muy transcendentales.
Te dejo estrellas, por que tu micro lo vale. Seguro.

Ekthor Castillo • hace un mes

El microcuento del amigo Josan representa a todos aquellos aprendices de literatura que tratan de ser tan exquisitos y concentrados en que les salga bien todo, que de tanto cuidar de lo que escriben y mantener lo mejor van cambiando las cosas y quitándoles una vez y otra, y otra, que pierden el sentido de la Escritura y no les queda nada para mostrar en la hoja de papel. Una buena enseñanza para todos.

Jorge Martinez Arnau • hace un mes • edited

Es para mi la mejor micro-narración que he leído aquí. Te doy mis estrellas, Tu narración creo se lo merece. Por cierto los comentarios que tienes, son en su mayoría buenos y muy buenos. Al igual que en la obra Borgeana donde se dan cita la epistemología contenida metafóricamente en muchos de sus cuentos fantásticos. En la obra del Sr. Josan tras un breves lineas con un mensaje claro y directo sobre la obra no escrita, por parte de un lector que aspira a realizar su primera obra, sin concluirla nunca: veo, y no solamente yo… a tenor de los comentarios vertidos por aquí, que existen un montón de interpretaciones que se pueden proyectar a diferentes áreas del conocimiento, con el intento de provocar el pensamiento reflexivo; Que la literatura no puede abarcar de forma absoluta, pero si plantear con el fin de predisponer al lector a la reflexión ontológica.

Aymara Georgina Justo Rebollar  Jorge Martinez Arnau • hace un mes

Me uno a usted, señor Jorge, al considerar este pequeño cuento de Josan como una obra maestra de finalidad singular. Agrego que esta narración tiene muchos sentidos y posibilidades semánticas increíbles que son la clave de la fuerza y expansión de este texto para diferentes públicos. Estoy feliz de haber podido entrar en este Club de Escritura, con tan buenos narradores y exponentes literarios de talla internacional.

Josan Caballero  Aymara Georgina Justo Rebollar • hace un mes • edited

Agradezco sus comentarios y aseveraciones, Aymara, porque, no sólo nos halaga y defiende, sino que se yergue contra la injusticia de ver, sin entender, que han desaparecido inexplicablemente votos, ya hechos y contabilizados en mi cuenta, y para mi cuento. Además, que parece haber sido notificado su segundo mensaje, y se lo han sacado y borrado de aquí, no como mi BORRADOR BORRADO, propiamente, sino por la falta de lucidez y libertad de expresión de alguien, que se encuentra detrás de este sitio, y lo modera o poda en la oscuridad, infelizmente. Eso no debería ocurrir jamás, pues cuando alguien se toma el tiempo de comentar y votar, debería respetarse sacramente. Ya lo he dicho y sentenciado, en una anterior ocasión, que no viene al caso ahora, y en ese instante, solicité la devolución de mi comentario, aunque la otra persona, luego de ofender, retiró el suyo, mas, en esta oportunidad, retiran su respuesta, no quitando el de la otra persona, a quien usted le contestó muy respetuosamente. Esto demuestra una evidente censura y manipulación, por parte de alguien, que no se puede tolerar, ni aceptar jamás, en una institución artística y democrática de esta naturaleza. Espero que le devuelvan su comentario, como a mí los votos, que tan, cariñosamente, ustedes me han entregado. Vamos a ver ahora quién va a protestar de este comentario. Da pena ajena, que ello ocurra aquí, ya dos veces. Usted puede protestar esa decisión para que le devuelvan su comentario íntegro. Hágalo en mi nombre, por favor. Gracias por su devoción y entrega. La saluda y le pide disculpas por el incidente, Josan Caballero.

Carlos Munoz Fontanills  Josan Caballero • hace un mes • edited

No puede aceptarse por ningún concepto lo que sucedió o continúa sucediendo. Deben llamarse a consenso los que han hecho esto. Valen la pena los votos para Josan puesto que es uno de los más valiosos escritores y blogueros nuestros.

Josan Caballero  Carlos Munoz Fontanills • hace un mes

Estimado Carlos, no te preocupes, que como dice el dicho: «Billete mata galán», en este sitio no creo que eso suceda, por tanto, confío en mi BORRADOR BORRADO, y en los demás votos que estoy obteniendo, además del criterio imparcial de los integrantes del jurado, quienes sabrán definir los valores de todos y cada uno de los participantes en este Club de Escritura, para dar los veredictos que tienen que dar. Gracias por entrar nuevamente y comentar. Saludos, Josan Caballero.

Josan Caballero  Jorge Martinez Arnau • hace un mes • edited

Estimado Jorge, lo epistemológico y lo ontológico obtienen, en mi texto, un acercamiento o fusión singular, debido a que el ser humano creador siempre se halla a mitad de camino, entre el conocimiento y la proyección o reflejo del mismo, en la obra de arte, portadora de los conflictos reales del hombre y el enigma de su creactividad, enfocada al «mejoramiento humano y la utilidad de la virtud», como dijera nuestro gran intelectual cubano José Martí, en el prólogo a su poemario ISMAELILLO, que renovó la literatura en Hispanoamérica, abriendo, desde 1882, la modernidad de las letras hispánicas, demostrando, con ello, que el intento de perfeccionismo y una acentuada espiritualidad ecléctica no están reñidos del ejercicio y la entrega del hombre a un pretendido patriotismo, en favor de nuestra libertad social y política. Por eso, mi BORRADOR BORRADO se propone esa llegada puntual del ser humano a su mejoramiento social, intelectual y creactivo. Gracias por participar y dejarme entrever la doble finalidad de este microcuento de marras. Saludos, Josan Caballero.

Ekthor Castillo  Jorge Martinez Arnau • hace un mes

Evidentemente, Sr. Jorge, usted ha dado en el clavo con su comentario en algo que también pienso, y es con respecto al valor de la autocrítica en la obra de arte, pero también de la mesura y el equilibrio para saber qué se debe dejar en el papel y qué se debe quitar, pues sobra. Josan ha logrado un cuento aleccionador e intenso que proyecta la obra literaria más allá de la creación misma. Lo felicito a usted y a Josan por llegar tan profundo. Gracias a este cuento del genial Josan, Ektor Castillo.

Josan Caballero  Ekthor Castillo • hace un mes

Qué grande es la persona que trata de enaltecer a otros con su sabiduría e intelecto. Me regocijan mucho sus palabras, señor Ektor Castillo. Tiene la elocuencia del sabio pensador, que se entrega a la lectura que sea, y luego de devorarla, nos decora el foro con un comentario delicado y armonioso. Gracias nuevamente. Lo saluda y aprecia, Josan Caballero.

Oliver Santana Macías • hace un mes

Wow, para mí, has resumido esa lucha interna de todo aquel que siente el deseo de escribir, pero no encuentra la decisión para darle rienda suelta a ese sueño de ser escritor/-a. ¡Enhorabuena! Un saludo y mucha suerte!

Josan Caballero  Oliver Santana Macías • hace un mes

Gracias descontenidas, Oliver, porque todos estamos reconstruidos sobre un caldo literario de cultivo, sembrado sobre el dolor, el miedo y la confrontación, de tal manera que hasta sentirnos seguros, que ocurre nunca verdaderamente, no damos rienda suelta a nada y nos debilitados, en vez de fortalecernos. Por eso, debemos tomar experiencia y erguirnos desde la confianza de nuestros «alter egos», «narradores» o «yo líricos», para continuar y conquistar mejores y nuevos cielos para lograr la plenitud de nuestros «borradores», que un día llegarán o podrán ser «escritos verdaderos y certeros». Hace muchos años, escuché decir a alguien esto. No lo he podido corroborar o comprobar, pero, de todos modos, me parece fantástica la anécdota, y que por eso la traigo (y la atraigo) a cuento: Dicen que el magnífico poeta peruano César Vallejo tenía una especie de gavetero, de unas veintidós a veinticinco gavetas, y en cada una de ellas iba colocando sus textos, según arreglaba, editaba, o lo iban convenciendo, pero jamás los desechaba o destruía del todo. Lo que hacía era subirlos o bajarlos, según su sistema de gavetas, pero nunca los eliminaba o botaba esencialmente de su deslinde y sacrificio hermoso. Así fue como pudo salvarse, dicen, su gran poema «Traspiés a dos estrellas», que se encontraba en la gaveta veintidós, susceptible de ser uno de esos «borradores borrados», que muchos conocemos. Aprendamos de los grandes e inventemos la forma, amigo Oliver, de crecer nos ante el miedo y la inseguridad, en la inmodestia agónica de querer ser perfectos, cuando no lo somos, y pecamos de perder un cercano aposento en la posteridad, o al menos, en nuestro futuro aliento. Saludos, Josan Caballero.

Mirta Calabrese • hace un mes • edited

Hola Josan, te encuentro en la página de otro compañero, vine a leerte, me gusta mucho tu micro. Sugiere muchas interpretaciones. Puede ser que buscase la perfección, puede ser que no quería compartir, no quería desnudar el alma delante de nadie, escribía y borraba…Te dejo mis votos.
Saludos.

Carlos Munoz Fontanills  Mirta Calabrese • hace un mes

Bueno que pueda uno ir por los distintos sitios de este Club, para ir leyendo y valorando los más de 650 cuentos, que son los representantes de las diversas tendencias narrativas hispanas y las voces más prometedoras del continente. Me enorgullezco de haber entrado aquí y votado por ellos.

Josan Caballero  Mirta Calabrese • hace un mes • edited

Puede ser todo eso y muchísimo más, mi amiga Mirta. Eso parece ser lo interesante del micro, el cual, sin proponérmelo, ha cubierto expectativas inimaginables, y constituye un buen ejemplo del ser y el no ser del acto literario, del lector-escritor que se coloca en una verdadera encrucijada, sin saber, desde una óptica indefinida y perfeccionista, que por falta de satisfacción, seguridad y entereza, en vez de autocriticarse reafirmándose, se auto anula y empequeñece, hasta llegar a cero, además de perder su personalidad literaria, íntegra y original, en cualesquiera de sus términos. Un gran homenaje, después de todo, a ese auténtico héroe anónimo, que sin revelarse (o rebelarse) mucho, pulula o se esconde, irremediablemente, entre o en muchos de nosotros, tratando de imponer su realidad artística, a pesar de él, de todo y de todos. Un placer, amiga Mirta Calabrese, te saluda, Josan Caballero.

Jordi Clavero Trigueros • hace 2 meses • edited

Realmente el mensaje que transmite la micro-narración, no puede ser mas interesante, para todos aquellos que, aficionados a la lectura deciden en un momento dado dar el paso para escribir su propia narración. La búsqueda del perfeccionismo, es esencial para llegar a ser un buen escritor; porque implica aprender y superarse para que tu creación, sea cada vez mejor. Pero cuando ese deseo acaba siendo un ideal utópico; cuando el lector con deseo de crear su propia obra, no da el paso hacia adelante, que es escribir su propio relato; y nada de lo que empieza a escribir, le parece digno del ideal que busca, es entonces cuando se pasa a la no-creación del borrador borrado. Pero aparte de este mensaje claro que contiene la micro, existen muchísimas interpretaciones posibles o niveles mucho mas profundos de lectura, que pueden convivir perfectamente con la idea central contenida en el relato, y que nos invita a la reflexión: es en mi opinión, lo que lo convierte en un extraordinario microrrelato tan rico en sugerencias. La sabiduría que para mi encierra este texto, es ademas de estar bien escrito y contener una idea importante, convivir con tantas y tantas interpretaciones que encierra, esta para mi pequeña obrita maestra

Josan Caballero  Jordi Clavero Trigueros • hace un mes

Encantado de tu mensaje meritorio, Jordi Clavero, pues indagas en todas y cada una de las circunstancias, tanto del BORRADOR BORRADO, como del escritor, comprometido con su micronarración, y sales airoso al hurgar y asomar diversas variantes que me satisfacen mucho, la verdad. Es un breve cuento polisémico, del que no me puedo quejar, ya que ha generado disímiles y controversiales discusiones sobre el tema, pero nunca una evaluación o valoración en contra, lo cual me agrada especialmente y me obliga a tratar de ser mejor cada vez más. A buena hora se me ocurrió hacerle caso a mi amigo venezolano Alejandro Bozo, quien me envió el link y me invitó a concursar con un microrrelato, que nunca había hecho. Espero estar cumpliendo con las expectativas de todos. Saludos cordiales, Josan Caballero.

Maria Montoya Rodríguez • hace 2 meses

La verdad. ME ha encantado. Un no borrado. Quizá…

Carlos Munoz Fontanills  Maria Montoya Rodríguez • hace un mes

Un salvado para la literatura y una gloria nuestra, Sra. María Montoya. Me gusta este Club que busca a los mejores narradores del momento. Voto además por eso.

Josan Caballero  Maria Montoya Rodríguez • hace un mes

Muy agradecido, María Montoya. Y yo me calzo mis estrellas, pero sigo insistiendo, porque el creador es la suma de sus conquistas y descalabros. Lo que no se propagandiza, no se vende, he dicho desde adolescente. Y es muy cierto, hay que bregar muy duro para estar y mantenerse. Que lo digan los grandes, que también estuvieron al pie de la cima, y hasta se cayeron, como nosotros, pero siguieron y han seguido insistiendo. Vamos juntos, en este recorrido de piedras, que se convierten en estrellas, por nosotros mismos. Un saludo, Josan Caballero.

ROBERTO • hace 2 meses

Hola Josan. Crear borrando, afortunadamente no borraste y nos regalas un buen micro. Suerte, dejó estrellas.

Josan Caballero  ROBERTO • hace un mes • edited

Más que «Crear, borrando», amigo Roberto, es «Crear, enmendando», porque la base del escritor es la edición y la enmienda: el verdadero resultado es más con la goma de borrar, que con el lápiz o la pluma, ya que un creador se hace dentro de esa doble conjunción, pero sin agotarse, ni eliminarse del todo. Dejar sólo la flor, nada de hojarasca. Hay que saber limpiar y podar, con maestría, pero sin reducir lo esencial, no eliminarse o extinguirse en su totalidad. La obra de arte es un resultado, una conjunción de elementos disímiles, que hacen que precipite, en un logro armónico y cerrado. Te agradezco tus estrellas y tus comentarios, amigo Roberto. Valga la salvedad, que mi texto enjuicia y da algo de vida al BORRADOR BORRADO, para que no pase como con los cobardes, que de ellos no se ha escrito nada, sino sólo eso: Que no se ha escrito nada, jajaja…Al menos, mi microrrelato honra a esos «borradores», que se han quedado en el camino, o dejaron de existir, por la inexperiencia o el desaliento de muchos «borrados», que no supieron ser perseverantes y saber contentarse con su logro esencial, en la página en blanco. Aquí está la constancia de que se debe insistir y persistir, para llegar al logro finalmente. La perfección total no existe, ni en los grandes, es una suma de logros tangibles e intangibles. Agradezco tu gentileza y te abrazo, Josan Caballero.

Maritza Gutiérrez Rojas • hace 2 meses

Me gustó mucho. Escribimos para leernos… ¿Quién más? dejo mis estrellas 🙂

Josan Caballero  Maritza Gutiérrez Rojas • hace 2 meses • edited

Qué gran energía y movimiento tiene esta colmena viva de escritores con talento, este Club de Escritura, en donde parecemos abejas obreras o niños acabados de tener y mostrar a otros su juguete nuevo. Eso es lo que más me fascina de este taller creactivo, que nunca perdemos la fe, ni la esperanza de crear, de enmendar lo menos hecho, de reunirnos, y construirnos (y hasta deconstruirnos), como artistas y hombres nuevos. La magia de la Escritura es la lectura, Maritza, por supuesto, pues tanto hay que agradecerle a Michael Ende, en su HISTORIA SIN FIN o INTERMINABLE, si los escritores somos esa dualidad competente del emisor-receptor, siempre pendientes. Y qué maravilla para un escritor sentirse leído, abrigar el sueño realista interminable de ser recompensado con la lectura de alguien, que te devuelve la felicidad de haber escrito. Es un servicio espiritual y armónico que se completa y repleta para siempre. Gracias por colmarme con estrellas, y calmarme, para entender esa magia también de no haber sido un pobre BORRADOR BORRADO, ya que la escritura es agonía primeramente, ante la página en blanco, pero luego se convierte en felicidad plena y rotunda, cuando ves tu acto creactivo realizado, y lo lees. Mucho mejor, y más impactante, cuando te leen y aprecian lo escrito. La base de toda creacción es la humildad, pues te hace crecer y multiplicarse, como los panes y los peces de Pedro y Jesús. Te abraza y felicita, igualmente, Josan Caballero.

EliMSha • hace 2 meses

Josan, aquí he venido a leerte y me encuentro con este micro que me ha encantado. Creo que en algún punto se encuentra con el mío, desde lugares y estilos diferentes, claro. Lo ves así también? Aquí te dejo mi voto y mis felicitaciones! Seguimos en contacto!

Josan Caballero  EliMSha • hace 2 meses • edited

Amiga Eli, claro que sí, confluimos en ciertos puntos, porque todos los que estamos acá siempre le hemos temido al pecado nada original de repetirnos o no contentarnos con lo hecho, y por eso pecamos de ser borradores borrados, pero lo interesante es, que a fuerza de talento e insistencia, vamos bregando de esta falsa dubitación y ascendiendo, hasta ser mejores o hacerlo mejor, pero jamás perfecto, con nuestras piedras o estrellas, cual Sísifos eternos de la Escritura creactiva. Te agradezco tus estrellas, pues ya yo te las había puesto. Encantado y feliz de conocernos, te abraza, Josan Caballero.

Ginimar de letras • hace 2 meses

A veces somos nuestro lector más cruel… Maravilloso micro, Josan. Dejo mi valoración. Un abrazo 🙂

Josan Caballero  Ginimar de letras • hace 2 meses

Ciertamente, Ginimar, que los escritores solemos ser despiadados y crueles, hasta con nuestros propios textos, corriendo el nefasto peligro de convertirnos en BORRADORES BORRADOS. Esta es una alerta para todos. Te agradezco tu aporte y entrada a este foro. Saludos, Josan Caballero.

Ahmed Martel • hace 2 meses

Muy desagradable experiencia. Es increíble que para que mi voto cuente, se me fuerce a votar por otras 9 obras o autores que ni conozco. Ahora me doy cuenta que los votos que veo aquí no son genuinos, sino forzados. En otras palabras, ¡no son votos reales! ¡Que pena! Conozco a Josan y su obra, por eso le di mi voto, pero votar en Club de Escritura, es una tortura China.

Josan Caballero  Ahmed Martel • hace 2 meses

Gracias, amigo Ahmed, destacado intelectual, editor e impresor cubano-americano, de Miami, que has tenido que pasar por esa tortura de que hablas, para validar mis estrellas, ganadas con el sudor de mi amistad y mi frente, jajaja. Valió la pena ajena, amigo. Un abrazo y saludos, tu amigo Josan Caballero.

Pedro Cubelo Rovira • hace 2 meses

Fantástico tu microrrelato, se lee con facilidad, te lleva a reflexionar y enseguida te das cuenta del mensaje tan importante que encierra. Para empezar el título es genial y esa conexión del lector que aspira a convertirse en escritor…. no puede ser mas sutil…pero es que luego el texto, a pesar de ser tan breve tiene muchísimos niveles de interpretación y ser todos coherentes. Felicidades Josan !!!

Josan Caballero  Pedro Cubelo Rovira • hace 2 meses

Fantástico, amigo Pedro, tus palabras enaltecen y contribuyen a subir la cuesta, pues cuesta convertir las piedras en estrellas, para continuar el camino de las letras, sin temor a ser borrados, o simplemente apartados del sendero creactivo y escritural. Gracias por hacernos persistir e insistir. Saludos, Josan Caballero.

Josan Caballero  Pedro Cubelo Rovira • hace 2 meses • edited

Una sorpresa tu segundo comentario, estimada Saida. La verdad, que aquí permanecen y han llegado disertadores, articulistas y comentaristas de lujo, ya que siento que es éste un foro, que no tiene nada que envidiarle al de sitios renombrados de teoría y praxis literaria. Imagínate, que en estos días entro más a este foro, que a los de mi blog personal www.josancaballero.news, al que por cierto podías llegarte, comentar y dar a conocer lo que desees de esas teorías maravillosas que exhibes y de que hablas. Yo leí y escuché muy bien tus palabras habladas cantadas, que tienen mucho que ver con el espíritu y el contenido de las obras que creé para mi grupo TEATROVA DE CUBA, del que fui dramaturgo, director artístico y mánager de 1989 hasta el 2000, y cuyas obras teatrales y musicales, muchas de ellas, daremos a conocer próximamente, en formato papel. Si me haces llegar un correo, te envío fragmentos de ellas, y compartimos las tuyas, junto a comentarios y análisis más apropiados, fuera de este set o foro de artistas. Mi correo es travesiadelcaballero@gmail.com y podemos disertar de todos esos y otros temas. Puedes entrar a mi blog y buscar en la parte derecha las secciones ELOGIO DE MI LOCURA y ESCENOFERIA, entre otras. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Saida T. Contreras • hace 2 meses

Precisamente como no quiero ser un borrador borrado, me encantaría sin ningún compromiso de estrellas, que leyeras mi microrrelato, me dieras tus observaciones e impresiones, soy muy novata en cuanto a publicar, esta es mi primera participación en convocatorias, sin embargo estoy trabajando en una propuesta teórica sobre Cosmología de lo Esencial, presentada en dos libros uno sobre lo que he decidido llamar Procracultura, la conducta generalizada de postergar lo esencial, y el otro sobre su contraparte la Cultura Dysencial, o cosmovisión Dysencialista, la conducta de dinamizar lo esencial, y al decir esencial, me refiero a todo aquello que nos preserva como planeta, como especie y lo que sostiene las leyes y verdades de nuestra existencia, eso que nos hace humanos y nos conduce a un estadio evolutivo realmente superior, en lo concreto,y en lo substancial Con este comentario me permito hacerte saber eso, y al resto del club, porque ¿cuántos silencios que callan lo que estamos haciendo o en qué andamos? Lo que me está sucediendo ahora con respecto a las palabras, las ideas y mi necesidad de plasmarlas es lo que relato en mi micro. Así que si tienes tiempito, dale un vistazo y también escucha mi canto que le acompaña, que curiosamente me di cuenta que la comunidad, los lectores no le hacen mucho caso a los audios o vídeos, y en mi micro los dos vídeos son partes de una canción que compuse justo para esta convocatoria, que interpreto vocalmente y con la guitarra a modo de ilustrar y completar la obra. De verdad estoy abierta a comentarios independientemente que sean positivos o negativos que igual son buenos. Tengo el compromiso de crear estos modelos teóricos. Todo lo que me ayude literariamente a r escribirlos me caerá de maravilla. Les agradeceré logrando su culminación y publicándolos. Un abrazo, no solo para t😄i para todos.

Saida T. Contreras • hace 2 meses

De vuelta a ti y no solo por tu microrrelato. Me encanta leer los comentarios y sus respuestas, en ellos aprendes, como si asistiera a distancia a un taller literario, y en este caso como si estuviera sentada contigo tomando el café en una disertación sobre temas interesantes. Gracias por tomarte el tiempo para responder con substancialidad nuestros comentarios, Te dejo tus bien merecidas estrellas!!! Un abrazo.

Josan Caballero  Saida T. Contreras • hace 2 meses

Estimada Saida, en primer lugar, me encanta tu bondadosa disponibilidad de palabras y tu inteligencia desprendida y rotunda, para saber compartir, conversar e inquietarse con situaciones literarias y extraliterarias, que competen a talleristas y escritores implicados y complicados, con la naturaleza del arte y sus reglas inexplicables, por eso, claro que me agradaría debatir diversos temas contigo alrededor de varios cafés o copas del mejor vino español, italiano o chileno, comprometidos en llegar a resolver al menos lo concerniente a la estabilidad de una escritura seria, más allá de este Club de Escritura, valiendo el pleonasmo y la redundancia de hablarnos o comunicarnos, más que escribirnos, para llegar a una sinergia colectiva y feliz. Un abrazo y seguimos en contacto, más allá de estos predios, querida Saida, te abraza, Josan Caballero.

Miguel Ángel Payá Giménez • hace 2 meses

felicidades, cuantas veces nos censuramos sin dar la oportunidad al aprendizaje, estrellas, suerte…

Josan Caballero  Miguel Ángel Payá Giménez • hace 2 meses

La suerte ya está echada, Miguel Ángel, igual que las estrellas, como si fueran runas o piedras mágicas, que debemos sortear y atravesar, para caer y/o ascender desde alguna parte de nuestro destino, en este planeta o vida inversa, que cuando mejor estamos tenemos que morir, o quizás trascender a alguna otra parte, que no se nos ha sido revelado. Agradezco tu entrada a mi foro y tu votación, por supuesto (y por tu-puerto). Mínimo querría seguir leyendo y votando por otros tantos microcuentos, pero no somos libres de hacerlo, ni en este foro, por supuestos canales y decisiones, o quizás por otros puestos. Un abrazo y saludos, Josan Caballero.

Arturo Moreno • hace 2 meses

¡Interesante texto, Josan!

Mis estrellas.

Un abrazo.

Josan Caballero  Arturo Moreno • hace 2 meses

Agradezco tus estrellas y comentarios, amigo Arturo. Cómo digo en uno de mis poemas, «Monólogo de Sísifo»: Siempre quise llevar a cuestas una estrella. Aún a salvo de caer y rodar por la intemperie…Y es verdad, que siempre estamos a riesgo de caer y levantarnos. Este sencillo, pero prestigioso certamen, me ha dado nuevos aires, y me ha llevado a conocer nuevas personas y talentos, pero creo que el
sistema de votación es un tanto extraño, pues te obligan a votar por otros 9 rápidamente y uno se queda con ganas de seguir conociendo y votando por otros, con los que ya no puede hacer nada. Pero, para adelante, mi amigo Arturo, con la piedra o la estrella en alto. Ese podría ser el comienzo de otro futuro microcuento. Te abrazo y respeto, Josan Caballero.

Ramiro Tas Gutierrez  Josan Caballero • hace 2 meses

Estoy de acuerdo contigo, este sistema de votación no digo que no sea justo, solo que a mi también me resulta un poco extraño, ya que hay muchos textos por leer, y no tienes tiempo de leer y analizarlos todos después de realizada la primera votación…como dice Josan uno se queda con ganas de seguir conociendo otros textos y poder seguir votando, pero hay que adaptarse a las reglas del concurso…..

Josan Caballero  Ramiro Tas Gutierrez • hace 2 meses

Pues bien cierto esto, Ramiro, mas hay que ajustarse y después generar una corriente de opinión que permita los nuevos cambios y ajustes, para que sea más libre y menos apretado el criterio. Cómo vas a votar por alguien que deseas, contra nueve que, aunque puedes haber leído, no tienes, ni quieres el apoyo total, para que sea quien se alce con el galardón. Mínimo, debía ser una votación de 10 estrellas para quien uno piensa que debe ganar el galardón; y ocho para un segundo lugar; cinco para un tercero; y una o dos estrellas, para una mención honorífica. Luego el conteo de estas distinciones, y quien logre el mayor número de estrellas, es el premio del ml público; mientras que el jurado seleccione su gran premio, de acuerdo con ambos argumentos, el de ellos y el del distinguido árbitro, que es el colectivo del taller y la suma de todos los comentaristas. Así sería mucho más justo y abarcador este Club de Escritura. Ya veremos las próximas convocatorias. Gracias y saludos, Josan Caballero.

Carlos Munoz Fontanills • hace 2 meses • edited

Es muy interesante tu texto, Josan, pues hablas de un comienzo y un desarrollo literario, que de tanto decantarse y podarse, editarse y cortarse, quedó en nada, como la misma vida, que luego de morir, se pierde todo, y si no dejamos huella en algún renglón artístico o de historia particular o social, podemos llegar a ser hasta invisibles o anónimos para siempre. Buena suerte a todos los participantes en este concurso.

Saida T. Contreras  Carlos Munoz Fontanills • hace 2 meses

Eso es lo maravilloso de los creadores, que dejamos legados así sea para una sola persona. Nos sembramos para la posteridad con nuestras obras. Ser escritor y cantautora en mi caso, me hace soñar en que al menos mi hijos, nietos…me leerán, me escucharán cuando ya no esté. Me perpetuaré en mis creaciones y les acompañaré en su caminar. Eso me llena de regocijo y me invita a continuar.

Mario Adolfo  Carlos Munoz Fontanills • hace 2 meses

Eso es lo bueno de nosotros siempre tratamos de mejorar el día a día Carlais en la narración de Josan ello es por eso borras lo escrito y lo vuelves a reescribirlo siempre mejorando lo ya expuesto y eso es porque nunca nos conformamos con algo siempre somos como una simple novela escribimos un letra u texto como el expuesto acá con la narración simple y sencilla de Josan la verdad como lectores nos envuelve en su texto.

Josan Caballero  Mario Adolfo • hace 2 meses

Extraño, Mario Adolfo, que este comentario tuyo no lo había visto, ni comentado. Es bueno y claro lo que bn planteas, pues a veces no estamos decididos con algo, y esto nos produce tanta incertidumbre, que no paramos hasta arreglarlo o incluso retirarlo. Esa es la moraleja del BORRADOR BORRADO, que debemos ser intransigentes y perfeccionistas, hasta autocríticos, pero nunca al punto de negarlo o borrarlo todo, quedándonos sin el beneficio de la creación más simple y editada. Gracias, te estima, Josan Caballero.

Jordi vicla • hace 2 meses

Es increíble que tu narración. haya despertado tanto interés y haya sido objeto de tantas formas de darle un significado distinto como trasfondo, la mayoría de las veces perfectamente válido. Eso es una evidencia del interés que ha despertado tu narración y de la riqueza que encierran esas pocas lineas tan llenas de contenido, que no solo evidencian tu capacidad de condensar un montón de ideas hacedoras de tantas interpretaciones, sino que ademas constituyen un mensaje muy diáfano y útil, para la gente que se inicia en el mundo de la creación literaria. En horabuena Josan

Carlos Munoz Fontanills  Jordi vicla • hace 2 meses

Evidentemente señor Jordi, usted es de los valiosos lectores y seguidores de mi amigo Josan Caballero, quien ha hecho que un viejo y catedrático como yo me vuelva a introducir en estos menesteres igual que si fuera un jovencito, sólo para comentar y fomentar la maestría y generosidad de mi amigo, cuando desde su blog y en cualquier publicación nos ha editado artículos, crónicas e historias personales, dando a conocer nuestra obra y mostrando más de una vez nuestros éxitos y logros. Muchas cosas hay que agradecerle y reconocerle a este valioso hombre de las letras y el periodismo, que es Josan Caballero.

Alicia Prack • hace 2 meses

Hola Josan, me ha gustado mucho tu elaborado y concienzudo microrrelato. En el acto me remonté al concepto que tenía Borges sobre sus obras. Él decía que luego de finalizar una obra la publicaba de inmediato, así dejaba de editar y corregir, so riesgo de eliminarla por completo. Lo guardo, y te deseo mucha suerte.

Carlos Munoz Fontanills  Alicia Prack • hace 2 meses • edited

Es bueno que una persona tan capacitada como usted, Alicia Prack, pueda comentar de un cuento como este de mi amigo Josan. No hay que temerle al talento de nadie, si hay hojas en blanco y libertad de publicar para todos. Justa es usted y se merece figurar y brillar.

Josan Caballero  Alicia Prack • hace 2 meses

Gracias por tu lectura y estimación, Alicia, muy sincero y agradable tu comentario, incluso trayendo a colación el pensamiento de Jorge Luis Borges, que no lo conocía, la verdad. Me has hecho más apreciar el sentido y alcance de mi cuento. Espero que tengas igualmente un texto acá, para ir a comentar, con mucho gusto. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Carlos Munoz Fontanills  Josan Caballero • hace 2 meses • edited

Lo que más me agrada de Josan es su sencillez comunicativa, porque él desea que todo el mundo se de a conocer y florezca en este campo literario. Por eso es que lo respeto y lo quiero como un hijo o un nieto. Felicidades Josan. Me gustaría que tu cuento brillara con luz propia y quedara entre los más destacados. Gracias por invitarme a comentar.

Alicia Prack  Josan Caballero • hace 2 meses

Sí, he publicado hace ya un mes y medio. Búscame, si lo deseas, en el buscador de obras. Un abrazo!

Carlos Munoz Fontanills  Alicia Prack • hace 2 meses

Yo también iré a comentar en su cuento, mi’ija. Es tan agradable leerlos a ustedes, que uno rejuvenece y se cree en otra época. Le digo felicidades pues es precioso encontrarse CV on féminas como usted que le enorgullecen el corazón a un viejo como yo.

Josan Caballero  Alicia Prack • hace 2 meses

Pues claro, que iré con mucho gusto en unos minutos. Lo que vi también, que ahí te fue la Piky, que no conocía hasta ayer, con el cuento de mi comentario, por su entrada intempestuosa en mi foro, armando una alharaca de situaciones con respecto a mis seguidores y comentaristas, que si tienen obras o no aquí, cuando lo que tendría es que sumar los y no restarlos. Es del miedo que he hablado yo. Quien tiene tiempo para armar revueltos de esa índole, debe conocer bien a su supuesto contrincante, que no lo soy yo de ningún modo. Sólo le dije lo que tenía que saber de mí, que jamás menosprecio, ni descalifico a nadie a priori, ni a posteriori, incluso. Vi y leí lo bien que le contestaste. Gracias, eso me complace, porque este es un foro con libertad de expresión y participación. Válgame Dios, la Piky, sembrando cizaña por todos lados en vez de ubicar y cosechar con su cuento los lauros que desea. Así solamente va a tenerse que decapitar o matar literariamente ella, antes de que su personaje. Me pareces una persona bien interesante, Alicia. Corro a buscar tu cuento y comentarlo. Adoro estos foros, en donde siempre aparecen situaciones y personajes inseguros como éstos. Yo tengo y mantengo obra, seguidores, lectores y compradores. No me pierdo en esas minucias, aunque claro que molestan. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Vivian Gutiérrez • hace 2 meses

Exceleten cuento!! Es un trabajo lleno de detalles y de creatividad!

Mario Adolfo  Vivian Gutiérrez • hace 2 meses

Vivían creo que Josan también va más allá en si texto literario la verdad te inmersa dentro del mismo y te hace pensar más en ello y la verdad tiene toda la razón un borrador es eso mismo un borrador inmerso a corregirse siempre

Josan Caballero  Vivian Gutiérrez • hace 2 meses • edited

Gracias, mi sobrina Vivita, me agrada increíblemente que hayas podido participar en este foro literario, y mezclarte con autores, lectores y comentaristas, siendo una más entre nosotros, mientras analizas y debates mi microrrelato, que me da tanta alegría y satisfacción que compartas y valores lo que hago, no desde el ángulo familiar, sino a partir de las mismas coincidencias y opiniones que argumentan los demás de mi obra, cual una lectora, artista o literata más. Gracias, te quiero tanto, mi bella sobrina clarinetista. Tu tío, Josan Caballero.

Carlos Munoz Fontanills  Josan Caballero • hace 2 meses • edited

Alegría se siente encontrarme un familiar e Josan aquí, y específicamente su sobrina Vivian, quien conozco de sobra que es una destacada clarinetista en Bolivia, y sin embargo se ha preocupado de comentar en este sitio a favor del minicuento de su tío Josan. Es de admirar esa actitud y la virtud de Josan al crear lazos fuertes de comunicación y cordialidad con quienes son parte de su familia y amigos, rasgo distintivo de este fantástico creador nuestro, que distingue a todos y nos dedica acrósticos, alabanzas y poemas, creando una sinergia muy particular entre todos. Muy bien por Josan y por Vivian su sobrina.

Jordi vicla • hace 2 meses

Ojala Josan que sigas escribiendo cuentos por aquí, pues sería genial que nos hicieras reflexionar y seguir haciendo que nos `planteemos cuestiones capaces de excitar nuestro intelecto. Felicidades y muchísima suerte. En cuanto al título creo que el consenso de los comentaristas es unánime; perfecto

Josan Caballero  Jordi vicla • hace 2 meses

Nueva oportunidad para decirte gracias, estimado Jordi, y componer un discurso laudatorio, por tu manera tan cordial y gratificante de comentar sobre mis poemas y narraciones, tanto aquí, en este Club de Escritura, como en mi blog personal www.josancaballero.news. Me agrada tu forma de comentar y encuentro en tu discurso un camino inteligente y significante, para generar comentarios y pasajes literarios dignos de ser considerados como verdaderos artículos periodísticos, con un valor adicional, al ser creados y desenvueltos, por un gran lector e investigador catalán, que no tiene nada que envidiarle a nadie, en este foro de lujo. Gracias por tu apoyo y colaboración siempre, Josan Caballero.

Ramiro Tas Gutierrez • hace 2 meses

Como continuación de mi último comentario, expresar que cada uno de esos borradores intencionalmente representan una posibilidad de convertirse en una creación literaria, que al parecer nunca llegará a concretarse, es una idea extraña y desesperante, pero al mismo tiempo plausible….cuantos , aspirantes a creadores literarios, habrán intentado crear un relato, sin terminar de acabar una obra, dejando atrás montones de folios rotos, que se quedan solo como un montón de posibilidades que nunca se llegaron a concretar…..

Mario Adolfo  Ramiro Tas Gutierrez • hace 2 meses

Increíble pero cierto lo que dices Ramiro la misma posibilidad de que vuelvan en una creación e inspiración para otros y a conectarte con mismo texto el crear y escribir no es solo así ES DE UNA MENTE BRILLANTE muchas veces compartimos la misma idea pero si la analizamos más a profundidad cómo la narración de Josan

Josan Caballero  Ramiro Tas Gutierrez • hace 2 meses • edited

Cierto que nunca llegaron a perpetuarse en la página en blanco estos proyectos de escritura y talento creativo, amigo Ramiro, pero exactamente BORRADOR BORRADO es el homenaje a esos primitivos y aún ingenuos artistas (lectores o escritores), que no pudieron resistir el paso transicional del texto que podria precipitar y lograr mantenerse, hasta trascender la página en blanco, para constituirse al menos en creación particular, a un paso de ser obra de arte. Esos héroes anónimos incansables y humildes, que jamás ganarán un certamen como éste, porque no pudieron transgredir ni continuar sus logros como escritores, aunque sea aficionados de un taller literario, tan válido y promocional de este nivel. Y por eso agradezco tanto la participación de todos, con sus hermosos y profundos comentarios, enalteciendo el mensaje parabólico y la propuesta conceptual del BORRADOR BORRADO. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Tony Fla • hace 2 meses

Felicitaciones, un relato muy sencillo pero profundo con un excelente título. Relato bien desarrollado, intrigante pero fácil de seguir. Espero que esta obra y tu dedicación sean premiadas.

Mario Adolfo  Tony Fla • hace 2 meses

Muy Cierto lo que dices en tu comentario Tony esa a mi pensar fue la idea básica de nuestro amigo Josan el que nos involucráramos en su texto de narración y dietarlos nuestro punto de vista esto con el enriquecimiento personal de cada lector muy buena la intención y el título bien lo expresa

Josan Caballero  Tony Fla • hace 2 meses

Muy apropiadas y llevaderas tus palabras, amigo Tony Fla, pues comunican el sentir de un sector de la lecto-escritura, que conociendo del hecho lectivo, creativo y /o cultural, abogan por la respuesta valiente y segura de un creador, que rompa con los miedos y extravagancias del perfeccionismo escritural, en favor de la continuidad editora, sin merma o autocensura del texto y su mensaje, con absoluta libertad y espontaneidad. Gracias amigo Tony Fla, por contribuir, igualmente, a clarificarme, incluso, en este microrrelato, y en otros cuantos, que me han inspirado muchas de las lecturas y comentarios de acá. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Jordi Viñals • hace 2 meses

Hacia varios días que no entraba por aquí: he vuelto a leer tu microrrelato. Sigue pareciéndome excelente, y después de leerlo otra vez, vienen a mi mente nuevas y posibles interpretaciones de todo tipo. Pero esta vez me voy a quedar con la mas inmediata, y que tiene que ver, con la busca de la perfección como ideal de una obra acabada; ese ideal del lector que decide pasar a ser escritor, con el deseo de escribir una obra perfecta, maestra, sin darse cuenta, cegado por los cánones de los preceptos que tiene fijados en su mente, que crear una obra, también requiere experiencia, con la que adquirir destreza y pericia, para ir abriendo la senda que le pueda acercar a la consecución de su objetivo. Lo otro es un suicidio de su vocación, inclinación y propósito que lo conducirá a la nada en su objetivo de llegar a escribir. Pienso que mirado así, es un consejo muy sabio del amigo Josan a todos aquellos que deseen iniciarse en el arte de la creación litrariea. Felicidades otra vez por un texto tan breve, como rico en sugerencias y sabiduría

Josan Caballero  Jordi Viñals • hace 2 meses • edited

Incesante, insistente e inquieto Jordi, siempre eres alguien que no se contenta con su último comentario. Y vuelves al foro, como el ratoncito al sitio donde olfateó su penúltimo queso. Me pareces un lector y fan muy especial, pues como mi personaje del microrrelato te impones la perfección y el excesivo y continuado análisis, pero nunca cortando, como él, dicho texto logrado de antemano, en la hoja en blanco, pues tú sí logras salvar el artículo o mensaje, conjuntamente con el valor de tus comentarios, reflejados con exactitud dentro del papel, apareciendo cada vez con tu mejor prueba de que el más apropiado análisis es el último que dejas. Eres incansable y muy enfático, amigo Jordi. Te saluda y agradece, Josan Caballero.

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Jordi vicla  Guest • hace 2 meses

Si, eres muy perspicaz en lo que dices, yo pienso que hay bastante de filosófico en el relato, que nos lleva a plantearnos varias cuestiones…un lector que desea crear una obra sin conseguirlo una y otra vez, probablemente porque busca una perfección utópica que no consigue trasladar en el papel, yo también creo que esconde un mensaje entre lineas, pero ademas está abierto a muchísimas interpretaciones- en cuanto al título no puede ser mas idóneo para la micro. Creo que tu comentario es certero y preciso.

Josan Caballero  Jordi vicla • hace 2 meses

Las perfecciones y percepciones utópicas también frecuentan este sitio, amigo Jordi, un proceso en el que debemos ser y estar precavidos, de modo que vayamos con pluma de plomo, escudriñando aquí y allá, hasta dar con el diamante en bruto, o tal vez con el diamante, aún sin pulir, pero pleno de alma y talento, para prosperar y proseguir. Otro abrazo, Josan Caballero.

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Josan Caballero  Guest • hace 2 meses • edited

Estimada Piky, no me ha agradado nunca entrar en diatribas o discusiones paralizantes, cuando se trata de literatura y creación, menos en el medio o transcurso de un certamen tan simple como éste, que tampoco le resta valor, ni personalidad. Pero debo aclararte, en primer lugar, que no soy un señor principiante de sólo un microtexto y un blog personal, de diez años de duración y mantención ininterrumpida, con alrededor de 2 millones de seguidores asiduos y comentaristas, que siguen y valoran la creacción de un poeta, narrador, periodista, diseñador, editor-publishers, investigador, dramaturgo, director artístico, profesor universitario, lector editorial, conductor de talleres literarios, que ya, con treinta libros editados, tuvo la osadía y la simpleza de participar con el primer microrrelato que escribiera el mismo día, en que comencé a concursar en este prestigioso Club de Escritura Fuentetaja, el 11/1, a instancias de mi amigo periodista y narrador, el venezolano Alejandro Bozo Cohen, que me envió el link de su cuento breve, para que lo leyera y comentara, no sin antes «embullarme» a participar. Si buscas en los comienzos de mi participación, muchos de quienes tienen textos dentro del certamen, entraron a mi foro, después de que yo comenté en el de ellos, y mi persona, aprovechando la herramienta comunicativa y promocional de su blog personal, que se encuentra cumpliendo diez años, desde el 15 de abril del 2019, además del hecho de contar con verdaderos lectores-comentaristas y amigos, que he contribuido a desarrollar, pues me di a la tarea de promover y fomentar mi foro de comentarios, que tampoco es ilegal, ni me convierte en un doble ser vivo, dentro del certamen, ya que todos tenemos el derecho y la posibilidad de invitar a comentar a familiares y amigos, conocidos, seguidores, amores (lectores, artistas o no), para que sean capaces de dar su opinión y exponer sus ideas sobre mi cuento, como el de los demás concursantes. Eso sí, no soy Josancito, el huerfanito de fans, amigos, seguidores y familiares, sino alguien que trabaja y ha trabajado arduo en sus redes sociales, blogs y obras literarias reales, aunque a lo.mejor no tan conocidas, pero sí perpetuas y contundentes, desde hace cincuenta años de vida artística, mi amiga Piky, lo cual tendrías que haber hecho, primeramente, antes de hablar o escribir sin saber, pues para conjeturar y criticar, en verdad hay que indagar, sin establecer resquemores o criterios a priori de alguien, quien, desde que entró en este foro o Club lo que ha hecho es fomentar y establecer válida competencia y productividad de mensajes y debates fructíferos, jamás paralizantes, ni denostadores de ningún concursante u obra en particular. Creo que debes centrarte en tu texto en particular, y en sus valores polisémico e intrínsecos, no en si alguno de los demás que concursan logran mayor tráfico de comentaristas y participantes dentro del debate de sus microcuento, en buena lid, no deshonesta, ni maliciosamente, haciendo el giro del quítate tú para ponerme yo. Te sugiero o exhorto a que te introduzcas en mi blog personal, lo suscribas o no, y leas mi ficha biobibliográfica, llamada ELOGIO DE MI LOCURA, o parte de mi bibliografía activa y pasiva, hasta el año 2009 nada más, pues, inclusive, debo actualizarla, desde que empecé mi blog personal, y que titulé EL PESO DE MI ISLA, CUANDO ESCRIBO…Pero, sobre todo, uno de mis textos fundamentales, que es el descubrimiento de los plagios de Alga Marina Elizagaray, que aparece al inicio del blog, en seis piezas investigativas, de un ensayo monográfico, titulado TANTO VA EL CANTARO A LA FUENTE, donde le demuestro, con investigación irrefutable el latrocinio literario de 36 autores y 44 títulos diferentes. Eso demuestra perseverancia, lectura concienzuda, investigación, y además talento y valentía, lo cual engendra un respeto de los lectores y seguidores, pero también una responsabilidad de mi parte, a la hora de mostrar mi continuidad, sin rupturas. Creo que te he demostrado, brevemente, mi suficiencia, no la autosuficiencia insuficiente, en la que creías al posible «escritorcillo de marras», creador de un solo microtexto hace quince días. Por supuesto, que ahora voy a leerte y a comentarte, que es lo que más me encanta, como a los fans y seguidores que participan conmigo y junto a mí, aunque no tengan casi o ninguna obra, que no es un pecado tampoco de lesa literaturidad. Léete además mi breve biografía de mi perfil, que creo tampoco leiste, lo cual sí es un pecado de lesa ingenuidad, para no usar una palabra o adjetivo más adecuado a tu forma, nada diplomática, de entrar en este debate absurdo, para lograr alguna revancha, que, evidentemente, jamás lograrás. Saludos y abrazos, Sra. PIKY, atentamente, JOSAN CABALLERO, seudónimo literario del escritor cubano JOSE ANTONIO GUTIERREZ CABALLERO.
P.D.: Por el título de tu minicuento, MATAR EL PERSONAJE, me sugieres muchas cosas, y espero no sentirme defraudado, como con tus comentarios, para solicitar o lograr comentaristas y lectores, ganados o arrebatados finalmente, de este foro, para el tuyo, lo cual puede ser, pero no es justo, aunque todo es sencillamente astuto o legal.

Josan Caballero  Josan Caballero • hace 2 meses

Nunca olviden la libertad de expresión y el derecho de réplica. Es la primera enmienda de la Constitución de los Estados Unidos…Gracias, Josan Caballero.

Ramiro Tas Gutierrez • hace 2 meses

Quiero felicitarte desde aquí por este relato tan inquietante y que a la vez, nos hace reflexionar sobre el oficio de escribir, relacionado con el lector al que inevitablemente está vinculado, escondiendo además muchos otros niveles de interpretación que sutilmente se encuentran en estas pocas líneas y que sin duda nos habrá hecho reflexionar a muchos y muchas. Gracias por su relato, que detrás de su aparente sencillez, esconde una complejidad tan grande
Mucha magia filosófica y literaria vertebran cada una de las líneas de este cuento, de ese retorno interminable que representa su borrador borrado. Felicidades Sr Josan y gracias por regalarnos creaciones como esta, muchos ya estamos esperando un nuevo microrrelato suyo!!!

Josan Caballero  Ramiro Tas Gutierrez • hace 2 meses • edited

Por supuesto que le agradezco intensamente su comentario, Sr. Ramiro, que revela profundidad y dedicación a la hora de su lectura y valoración, en alguien que ha demostrado capacidad de estudio e indagación, cuando desentraña los verdaderos motivos de la pérdida irreparable del BORRADOR BORRADO, en su encrucijada como lector, creador y editor, lo cual despierta una profunda tristeza, pero a la vez la más aleccionadora visión de que debemos estar alertas ante el peligro del falso perfeccionismo y la búsqueda de un erróneo profesionalismo, que corta toda espontaneidad y separación del pulso real de nuestro contacto con la vida, condicionando nuestra poda y fatal desarticulación del verdadero sentido movilizativo y crucial de la creacción. Saludos, Josan Caballero.

Algaraca • hace 2 meses • edited

Me encantó este hábil e interesante microrrelato de Josan Caballero, que nos cuenta, a través de un texto tan eficiente como denso, cómo la búsqueda ansiosa de la escritura «perfecta» es el palo en la rueda de un lector que no pudo encontrarse a sí mismo como escritor. Su uso del pretérito indefinido subraya un final demoledor: «no quedaron los manuscritos, ni los relatos de sus pensamientos». El potencial escritor del relato sucumbe a sus prejuicios, a fuerza de mirarse continuamente a través de su propio filtro dicotómico, «perfecto-imperfecto» y de ir borrando inefablemente cualquier germen de escritura, por no cumplir con algún desconocido ideal. Siendo Josan un avezado lector y un escritor experimentado, conocedor y maestro de todas las formas, encuentro en su texto una gentil invitación a los que se inician en el arte de escribir a leer sin adorar las formas y escribir con espontaneidad.

Josan Caballero  Algaraca • hace 2 meses • edited

Qué increíble encontrarse igualmente con un comentarista intelectivo y escritor, que apunta exactamente la palabra adecuada y el análisis certero de lo que quise decir o escribir detrás del tema del BORRADOR BORRADO, que deviene en alegoría del creador que se frustra, por su inexperiencia de contar espontáneamente, quien, tratando de ser perfeccionista, dejó de ser un escritor-lector auténtico, y se anuló a sí mismo del contexto social, literario, cultural y hasta personal. El amigo Algaraca encuentra y dinamiza los aciertos de mi cuento breve, despojando su sentido lúdicro, para mostrar el verdadero valor de la literatura, que es señalar el camino correcto entre lo real y lo ideal, sin perder de vista lo natural y sencillo de la vida, cuya linealidad y sentido recto nos conectará con lo fundamental del ser creativo, que es su espontaneidad y sentido de pertenencia a un mundo existencial y sociológico, en comunidad, sin miedos corrosivos o paralizantes a fracasar. Gracias, amigo Algaraca, tu comprensión y definición de mi microtexto ha sido genial. Te agradezco tu propuesta de análisis y tu profundidad de miras. Saludos, Josan Caballero.

Algaraca  Josan Caballero • hace 2 meses

Gracias Josan. Es un placer leerte y comentarte.

Josan Caballero  Algaraca • hace 2 meses

Encontrarte en esta colmena creactiva es una de las mejores cosas que me ha pasado en la vida literaria que creo y reconozco como propia. Gracias, amigo Andrés, Algaraca…Te quiere y aprecia. Josan Caballero.

Ramiro Tas Gutierrez  Algaraca • hace 2 meses

Excelente el análisis que haces del microrrelato de Josan. Ahi creo yo, esta el quid de la cuestión, la búsqueda de un ideal que no existe: el ideal es una abstracción de nuestra mente y como tal es imposible de aprehender por nuestros sentidos por se incognoscible…como podríamos definir algo ideal, en el momento que lo definieramos dejaría de serlo. Justamente por eso, el relato de Josan es tan inquietante y está abierto a tantas lecturas.
Algaraca coincido completamente contigo en que el relato es hábil e interesante y que ademas tiene un poso de de profundidad filosófica que se esconde en lo mas profundo de su aparente sencillez ; justamente por eso es un texto de una habilidad que yo definiría como exquisita literariamente hablando.

Josan Caballero  Ramiro Tas Gutierrez • hace 2 meses • edited

Ramiro y Algaraca llegan a similares conclusiones sobre mi Borrador Borrado, pero por vericuetos diferentes, definidores de la diversa cultura y el potencial de análisis de cada cual, no en detrimento del texto, sino, por el contrario, en favor del escudriño de la naturaleza cognoscitiva y aleccionadora del microcuento, sin ser moralista o paradigmática. Por el contrario, ambos comentaristas arriban, por senderos disímiles, a la misma conclusión de que se hace necesario detenerse a revisar la postura y la concepción participativa y dinámica del lector-escritor, en el acto literario de creación. Es de agradecer la actitud positiva y persistente de ambos en sus indagaciones. Abrazos, Josan Caballero

Algaraca  Ramiro Tas Gutierrez • hace 2 meses • edited

Muchas gracias, amigo Ramiro. Sí, efectivamente, el relato de Josan es inquietante. Sobre todo, pienso yo, porque nos mueve a afinar nuestra lectura entre líneas y porque invita al potencial escritor a entrar espontáneamente al mundo de la escritura. Ahora, respecto a su amable comentario, realmente creo que un ideal también se puede fundar sobre una aspiración o el deseo de obtener o alcanzar algo muy concreto, como querer escribir un cuento o unas greguerías. Pero leer muchos cuentos o muchas greguerías no basta para desarrollar la capacidad de escribirlos. Lo idealizado allí sería el poder de la lectura por sobre la técnica y la práctica constante de la escritura. Lo que no sabemos, en esta historia, es cuál era el ideal del protagonista del cuento y, en cambio, sí podemos intuir que, independientemente de si se trataba de un objetivo difuso o utópico o uno muy concreto y ambicioso, el resultado sería el mismo: la parálisis. ¿Qué le faltaba a este aspirante a escritor para vencer su embotamiento y realizar su sueño? No lo sabemos y qué bien que esa carencia no quedase definida en el relato porque, a partir de allí, son los aspirantes a escritores los que deben preguntarse cuáles son sus objetivos y de qué modo piensan alcanzarlos antes de caer vencidos por el peso de las primeras líneas.

Rosendo Manas Chepar • hace 2 meses

He visto por aquí, mas de un comentario que hacen referencia a los cuentos de Kafka que se encuentran es su libro «la muralla china», yo lo leí hace ya muchos años y creo que este minirrelato, podría figurar perfectamente en él, sin desmerecer la figura del genio checo: es breve, abierto a muchas interpretaciones, la busca de algo inalcanzable .. un texto que parece no va a poder finalizar nunca, y sobre todo capaz de producir cierto grado de inquietud en el lector.
A mi particularmente me parece tan genial como perturbador.

Algaraca  Rosendo Manas Chepar • hace 2 meses • edited

…»Perturbador» es un buen adjetivo para sintetizar la esencia de este micro relato. Ciertamente, parece que el autor va por una senda asintótica, caminando casi infinitamente, borrón tras borrón, hacia un ideal que, como tal, perderá su sustancia inmaterial si encuentra forma en el papel. De nuevo, creo que Josan invita al escritor novel a perder el miedo a dar forma a cualquier idea, por minúscula que ésta sea y a dejarla germinar con espontaneidad. Felicitaciones a Josan Caballero por su trabajo. Creo que con su micro relato nos ha dado bastante en qué pensar.

Mario Adolfo • hace 2 meses

La verdad es muy cierto lo que dices uno cuando escribe lo haces porque tienes una idea clara de lo que te viene a tus pensamientos y lo palpas en sencillas palabras y lo vuelves a leer y siempre hay algo que encuentras que no se ajusta a tu idea y por eso vuelves al principio y eso es para mí porque siempre surgen nuevas ideas porque eres apasionado en ello te felicito sigue con esos bellos relatos

José María Padial • hace 2 meses

Se trata de un texto sencillo, rápido y que te da que pensar y algo muy importante… te genera curiosidad y ganas de seguir leyendo más. Recomendable para retomar el buen hábito de la lectura. Enhorabuena.

Davionet • hace 2 meses

Añadiré además que mas allá de las intenciones del creador, solamente la rápida lectura del mismo deja sabores en boca, sin necesidad de profundizar e interpretar. Interesante para un amplio espectro de lectores desde las mas tempranas edades. Reitero las gracias por este regalo

Jaime Manuel Alonso Sedanos  Davionet • hace 2 meses • edited

Tocas un tema, que no se había presentado hasta ahora, el del destinatario de este tipo de relatos, y coincido contigo, Davionet, que dicho texto, escrito por Josan Caballero, resulta propicio además para las nuevas generaciones, dado su amplio espectro en cuanto asunto, funcionalidad y lenguaje, tan sencillo y ligero, lo cual le otorga un doble valor a dicho material, excelente para ser aprovechado en la lectura y apropiación por parte de los niños y jóvenes, quienes recibirán un microcuento portador de una historia asequible a cualquier tipo de público, con lo que consigue su autor otro valor adicional para su Borrador Borrado. Excelente contenido y mensaje para todas las edades, apuntado por nuestro amigo Davionet, y, por supuesto, perseguido y logrado, con creces, por su autor Josan.

Albeerto Suarwez Zubieta • hace 2 meses • edited

El microrrelato de Josan esta lleno de ideas y sugerencias abiertas a la reflexión y es un regalo, para todos los creadores, que quieran adentrarse en el maravilloso mundo de la creación literaria. Un estímulo capaz de hacer que nos adentremos, en el mágico laberinto de la creación literaria, sin perdernos en el; saber lo que queremos decir y caminar sin miedo hasta el final de nuestra meta, que es lo contrario al borrador borrado: la obra terminada

Davionet • hace 2 meses

Lo que mas me impacta de este microrrelato es lo versátil, e intimidante. Cuántas veces un borrador borrado superó a la obra definitiva? Quizas también lo veo motor impulsor de muchos tímidos creadores. Si, lo veo de tantas formas, puede que otros compartan mi opinión. Saludos cordiales para Josan, espero nos siga inyectando estas micro-sabidurías

Jaime Manuel Alonso Sedanos  Davionet • hace 2 meses

Inyección que sirve de acicate, tanto a creadores como lectores y comentaristas, estimado Davionet, y disculpa que siga suscribiendo tus comentarios, pues deseo corroborar y apuntar algo más, que es el hecho de que las escrituras de Josan se extienden a la versatilidad y amplitud de temas, contenidos, formas y ritmos en la obra de este multifacético creador cubano, que desarrolla una extensa labor literaria, demostrativa de su interés en generalizar la lectura genérica y temática a todo el amplio público hispano e internacional.

Jaime Manuel Alonso Sedanos  Davionet • hace 2 meses • edited

Me parece muy bueno lo que dices, Davionet, porque la obra de Josan tiene eso, que es impactante y pegajosa; el lector encuentra múltiples maneras de entroncar con el autor y sus personajes enseguida. Hay que felicitar a Josan Caballero por el logro y la maestría de su estilo poético o narrativo.

Jaime Manuel Alonso Sedanos • hace 2 meses • edited

Partiendo del juego de palabras, Borrador Borrado constituye la muy buena carta con que Josan Caballero se estrena y se da a conocer felizmente en este Segundo Concurso del Club de Escritura. Cada línea del breve texto es una flecha directa al blanco narrativo de presentar a un personaje transitivo, con la inseguridad de poner al lector en contacto con su obra, que se ha vuelto inexistente y superflua, por la falta de experiencia, para hacer cristalizar una adecuada y coherente narración, que finalmente venza el reto de la página en blanco. Nos satisface, querido Josan, que hayas creado un relato extraordinario y muy corto, pero con todos los ingredientes para vencer en este certamen de primera. FELICIDADES.

Josan Caballero  Jaime Manuel Alonso Sedanos • hace 2 meses • edited

Siento tanta satisfacción, cuando entro a este Foro del II certamen del Club de Escritura, y me topo con lectores y seguidores de mi propio blog personal josancaballero.news, participando de comentaristas sobre mi microcuento BORRADOR BORRADO, junto a otros que ni conocía, y que los ha presentado y aportado este mismo foro literario y tallerístico. Les agradezco tanto a todos los que se han internado en este sitio para valorar mi creación literaria, como hacen cada día en mi blog, desde hace diez años, de modo que me encuentro con sus opiniones, bien justas y disímiles, que definen y terminan de perfilar este microrrelato, para proyectarlo, no sólo dentro de este concurso, sino además en muchos sitios de internet y en el formato papel. Los saludo a todos y les agradezco infinitamente, por su entrega y colaboración en esta empresa mutua, deslinde y confluencia entre el canal emisor y el receptor, para lograr una perfecta comunicación. Abrazos a todos ustedes, Josan Caballero.

Jaime Manuel Alonso Sedanos • hace 2 meses • edited

El relato Borrador Borrado significa un muy fuerte rival entre los que concursan, gracias a su fuerza literaria y emotiva, en su dicotomía de lector y narrador, cuyo debate es sobrevivir y dejar de existir como artista, ante las inminencias de saber editar o no lo que ha creado. Se salva todo lo que somos capaces de cuidar y que permanezca, sin el miedo a ser censurados o tildados de incompetencia. El cuento del señor Josan pasa la prueba del desgaste y se yergue como un bastión de lectura rápida. Muchas felicidades, tu relato se encuentra entre mis favoritos Josan.

Albeerto Suarwez Zubieta  Jaime Manuel Alonso Sedanos • hace 2 meses

Efectivamente es muy interesante y original ese aspecto del que hablas «dicótomía de lector y narrador, cuyo debate es sobrevivir y dejar de existir como artista ante las inminencias de saber editar o no lo que ha creado,,» poco se ha hablado sobre este punto, siendo algo que da para pensar y reflexionar profundamente. Es increíble que en tan pocas lineas exista tal riqueza de contenidos.
El tuyo me parece un análisis de lo mas interesante, toda vez que tocas un punto del relato, del que muy pocos se han expresado, de ahí la grandeza del texto de Josan del que se pueden extraer tantas ideas. Felicidades por tu análisis y perspicacia

Ioan Peter Molins • hace 2 meses

La lectura de este borrador borrado, me ha impactado…es como la entrada a un acto de creación no consumada, y termina convirtiéndose en un bucle….que nos lleva a la nada. Genial Josan Caballero, no se si si este microrrelato va a tener o no premio, pero en mi personalmente ha despertado mucha inquietud e incertidumbre!!

Jaime Manuel Alonso Sedanos  Ioan Peter Molins • hace 2 meses

Dices bien, amigo Ioan Peter, hablando de la genialidad narrativa de Josan, puesto que hallamos un micro texto de finalidades ilimitadas, al lograr que el lector perciba en su brevedad toda la genialidad discursiva de su creador, pero también la incertidumbre de un personaje indefinido por su propia actitud perfeccionista, que no lo llevó a ningún lado, ni siquiera a ser parte o llenar su primera página en blanco.

Frank Violi • hace 2 meses • edited

«Borrador Borrado» es un pequeño cuento, con mucho fondo y contenido. Aquí el escritor se anticipa a los sucesos y pierde la perspectiva, por lo que borra todo indicio de creación y credibilidad de que existió alguna vez. Me alegra el tratamiento del tema y el personaje, querido Josan, eres sensacional artista, para reflejar una historia tan complicada y tan breve que se lee y se ve. Parece la obra de un genio narrativo, un Cortázar, con sus «Cronopios y Famas»; o un Kafka, con «La Muralla China»; como ya he leído aquí. Congratulations.

Albeerto Suarwez Zubieta • hace 2 meses • edited

Me he leído el texto hasta casi poderlo recitar de memoria….es breve es su continente, pero gigante en su contenido. Felicidades Josan por expresar tanto con tan poco, apenas cinco lineas

Josan Caballero  Albeerto Suarwez Zubieta • hace 2 meses • edited

Elocuentes y breves palabras, que agradezco y consagro personalmente, junto a su disposición de tenerme entre los más recomendables textos de esta edición, señor Albeerto. Creo que hemos logrado un doble dinamismo entre lector y autor. Estoy sumamente agradecido con su participación y comentario. Lo invito a seguir comentando, no sólo en el mío, sino en otros microcuento por el estilo. Encantado con esto, Josan Caballero.

Jaime Manuel Alonso Sedanos  Albeerto Suarwez Zubieta • hace 2 meses

Me sucede lo mismo, estimado Albeerto, pues resulta como parte de una orfebrería narrativa, el texto de Josan, que parece más una pieza de prosa poética, capaz de ejercer su influencia en la memoria afectiva y cognitiva de sus lectores y comentaristas, además de transportarnos a lo mejor de su narrariva y bagaje cultural, dentro de este II Concurso de Microrrelato del Club de Escritura Fuentetaja. Bravo por el certamen y por la maestría literaria de Josan, que tan bien y también tú valoras en tus conentarios.

Josan Caballero  Jaime Manuel Alonso Sedanos • hace 2 meses • edited

Me parece muy interesante el criterio que manejan ambos, Jaime Manuel y Albeerto, al plantear que mi Borrador Borrado se encuentra a mitad de camino entre la narrativa propiamente y la prosa poética, por lo que este microrrelato tiene las características de una historia de la vida real, matizada con moraleja intrínseca de fábula y parábola socio-literaria, que estalla ante la mirada de un lector, con ganas de perpetuarse y perfeccionarse al mismo tiempo, cuya ironía trágica le impide promoverse por su propia incapacidad editora, a la deshora y en el fracaso permanente de una posible publicación. Gracias por vuestro apoyo y análisis, Josan Caballero.

Frank Violi  Albeerto Suarwez Zubieta • hace 2 meses

Es que el mini cuento de Josan es preciso, escueto y directo. No deja lugar a imprecisiones ni divagaciones. Certero y convincente, este relato de Josan nos conquista y refuerza la idea de que no se debe tener a la hora de crear algo, sino por el contrario hay que defender lo que creamos, en vez de saborearlo nosotros mismos, con nuestros miedos y censuras a priori. Mejor que nos lo critiquen, a no tener nada para mostrar, al final, luego de tanto editar y podar, pues solemos perder todo, sin derecho a nada.

Josan Caballero  Frank Violi • hace 2 meses • edited

Tengo que hacer una incidental, para avalar el comentario del amigo Frank Violi, quien se inmiscuye en los valores del texto, como mensaje directo y realista de los nuevos creadores, que pierden la noción de su literatura, al tratar de construirla sobre la base de una equivocada edición y reedición, sin permanecer intactos o como parte de un posible y perenne «borrador», por encima de cualquier contratiempo o inseguridad e imprecisión. Sino, se corre el riesgo de la pérdida o la invisibilidad de su redacción. Gracias y saludos, Josan Caballero.

Josan Caballero  Albeerto Suarwez Zubieta • hace 2 meses

Gracias nuevamente, querido Albeerto, tus palabras resultan gratificantes para mí, debido a que, aunque si bien soy un poeta y periodista de cierta experiencia en estos géneros, nunca me había aventurado, en la vertiente del micror relato, por lo que me agrada mucho el apoyo y vuestra valoración de nuestro cuento. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Rosendo Manas Chepar • hace 2 meses

Completamente de acuerdo con varios lectores que comentan por aquí, este relato huele a ganador; creo que si!!

Jaime Manuel Alonso Sedanos  Rosendo Manas Chepar • hace 2 meses • edited

Huele a ganador y a continuador de toda una secuencia de textos por el estilo, ya que Josan Caballero no solo es exitoso con sus recetas estilísticas, sino también con sus contenidos de actualidad, y la forma tan cercana al lector y sus propias vivencias. Yo votaré por su microcuento y por que logre rápidamente un cuaderno con muchos de esta índole, que seguramente le traerán gran éxito y nuevos logros en su larga carrera artística.

Julio Cesar Brito Cepero • hace 2 meses

Me parece un microrrelato excepcional, con la trama adecuada, para atrapar al lector desde la primera línea del texto. Espero que hagas un buen papel en el certamen Josan. Te mereces ganarlo, pero falta un largo trecho aún.

Josan Caballero  Julio Cesar Brito Cepero • hace 2 meses • edited

Es meritorio para mí, Julio Brito, entrelazarme con ustedes, mis lectores y amigos, porque siempre voy a encontrar respuestas y contrarrespuestas a mis creacciones, demostrándome de lo que puede ser capaz un texto literario, que permite arribar a diferentes mensajes y lecturas, desde una misma perspectiva de análisis o no. Te congratulo, por tu manera de expresarte, y cómo llegaste a compenetrarse con el microrrelato. Saludos, Josan Caballero.

Julio Munoz • hace 2 meses

Estimado amigo Josan, eres un caballo. Tremendo cuento, vas a ganar. Me gusta mucho tu idea del mini cuento. Felicidades.

Jaime Manuel Alonso Sedanos  Julio Munoz • hace 2 meses

Amigo Tony, se ve que usted conoce bien a este creador, pues con qué desenfado ha felicitado y enmarcado a su amigo escritor en este foro de artistas. Me agradaría mucho conocerlo igualmente, ya que siento que este Josan es entregado y humilde, una de las cualidades que, junto a la honestidad, hacen de un artista que sea el hacedor de sus propios sueños y conquistas. Lo felicito a usted también, amigo, por contar con tan buen regalo literario y camaraderil.

Josan Caballero  Julio Munoz • hace 2 meses • edited

Epale, amigo Tony, me sorprendiste, con un mensaje simpático y arrollador. Gracias, por tu participación, en este foro de artistas y comentaristas. Un abrazo y saludos, Josan Caballero.

Rosendo Manas Chepar • hace 2 meses

Veo que el microcuento creado por Josan Caballero, sigue despertando mucho interés, cosa que me alegra, pues a pesar de ser muy conciso, la idea que contiene es además de interesante, muy inquietante… tantas obras que pudieron ser ..posiblemente se habrán perdido para siempre en el limbo de la literatura. Creo que esta es la magia de estos breves relatos,: la reflexión como antesala `para la creación de otros nuevos.

Josan Caballero  Rosendo Manas Chepar • hace 2 meses • edited

Es un orgullo y sorpresa, para mí, estimado Rosendo, que muchas personas se hayan interesado en este microrrelato, y que se hayan inscripto, hasta para comentar y entrar en el debate sobre el mismo, porque ello denota el sentimiento positivo y simpatía que genera, tanto en quienes concursan, como en los lectores y comentaristas en general. Muy ágil y ameno tu comentario. Encantado con él, Josan Caballero.

Eduardo Jesús Pintado López  Rosendo Manas Chepar • hace 2 meses • edited

Inquietante es también tu comentario, amigo Rosendo, pues articulas muy bien el discurso, y dejas entrever un análisis armonioso y certero. Me entusiasma que sea sobre este preciso microcuento, que si es verdad que ha despertado buenos comentarios y criterios, aún le queda por recorrer un arduo camino, para saber si, tanto el público lector, como los participantes y jurados, le daremos el beneficio de las estrellas, cuando decidamos votar por el BORRADOR BORRADO. Hasta entonces, nos encontramos en la época de los amoríos y las falsas especulaciones. Espero impaciente por esos días, en donde se definirá todo, para, igualmente, darle mi voto, como el mejor de todo este grupo, al microcuento de Josan Caballero.

Josan Caballero  Eduardo Jesús Pintado López • hace 2 meses

Qué bueno que ya se ha logrado un debate entre ustedes mismos, señor Eduardo Jesús, ya que han generado un dinamismo y crecimiento analítico, que posibilita aprehender e interiorizar más en dicho cuento; y hasta yo encuentro aristas del relato, que ni me había propuesto, pero que deben estar ahí, pues muchos la encuentran. Estoy muy complacido con este desarrollo y ampliación de comentaristas y participantes en el Club de Escritura. Bravo por todos, Y saludos, Josan Caballero.

Mario Adolfo • hace 2 meses

Felicitaciones por el relato expresas muchas de las verdades con una nos enfrentamos a diario una perspectiva diferente que es lo importante una Fábula un cuento una imaginación que nos transporta y haces que te involucres en el tema también es en enriquecimiento cultural para los lectores felicitaciones sigue adelante saludos cordiales

Josan Caballero  Mario Adolfo • hace 2 meses

Amigo Mario, tu mensaje es muy oportuno, en este momento, porque reconoces la polisemia de sentidos, presente en un microrrelato, que puede ser reconocido como fábula, cuento o parábola, lo mismo que ya ha comentado otro gran lector y comentarista, muy atinado, el señor Jordi, quien ha hecho muy buenas valoraciones, como la tuya, acá en este foro, que se les agradece sobremanera. Saludos y abrazos, por su aporte a mi foro y al del Club de Escritura, propiamente, Josan Caballero.

Mario Adolfo  Josan Caballero • hace 2 meses

Es bello saber cómo el escritor te envuelve con ir leyendo cada palabra en el tema y cada vez haces que te involucres en el tema y creo que uno escribe y después lo vuelve a a borrar porque siempre surgen nuevas ideas una nueva visión un pensar diferente lo importante es ello captar la atención de los lectores en este caso el mío lo vuelves a borrar porque surgen nuevas ideas sientes que le falta algo a lo que escribiste y por eso lo hace uno hasta que finalmente te convences de lo que escribiste y allí lo dejas Felicitaciones Josan

Rosendo Manas Chepar  Mario Adolfo • hace 2 meses • edited

Pienso que en el verbo involucres dices mucho de lo que despierta este relato….eso justamente es lo importante, que es capaz de despertar en los lectores tantísimas cosas.

Josan Caballero  Rosendo Manas Chepar • hace 2 meses

Lo que me maravilla en este foro, Rosendo, es cómo los lectores y participantes han hecho suyo mi relato breve y lo defienden y patrocinan, cual so fuera de ustedes mismos. Espero cubrir con creces el puesto y preferencia, que ustedes le depositan a mi texto, dentro de este magnífico concurso. Abrazos, Josan Caballero.

Rosendo Manas Chepar  Mario Adolfo • hace 2 meses

Estoy completamente de acuerdo contigo Mario Adolfo, que gratificante es encontrarnos con textos que nos proporcionen diferentes puntos de vista que exciten nuestra imaginación e intelecto: El texto de Josan lo consigue con creces!!!!

Josan Caballero  Rosendo Manas Chepar • hace 2 meses

Admiro la manera en que todos los participantes comentan, como es el caso tuyo, Rosendo, que acopias energías y desarrollas un análisis certero, no sólo de mi cuento, sino de otros comentarios, que afinan con tu criterio, pero que, igualmente, perfilan un estilo de pensamiento particular, que se amplía a los demás. Espero poder contar con vuestro apoyo y colaboración, para las votaciones, igualmente, que comienzan el 19 de noviembre, y que condicionarán el ulterior avance de cada uno de los participantes en este certamen. Por hoy, mi agradecimiento y alegría en este trayecto creativo. Saludos, Josan Caballero.

Roger Mejia • hace 2 meses

Brillante, otro genero en el cual Josan se destaca…

Josan Caballero  Roger Mejia • hace 2 meses • edited

Mi Roger, no sabes cómo agradezco esta colaboración tuya, de internarte en este foro de multitudes, y dejar tu apoyo solidario y enaltecedor, para votar y comentar sobre mi mensaje del BORRADOR BORRADO. No creas que he visto como un reto esta participación mía, en este Club de Escritura, pues soy más poeta, periodista e investigador, incluso bloguero, que narrador de cuentos o novelas. Pero aquí ya están mis pinitos, para mostrar mi desarrollo en el microrrelato igualmente. Saludos amigo, te aprecia y agradece, Josan Caballero.

Eduardo Jesús Pintado López  Roger Mejia • hace 2 meses • edited

Estimado amigo Roger, me alegra mucho, que hayas podido romper con todos los protocolos habidos y por haber, para entrar a este sitio, y dejar tu aporte sobre el microcuento de nuestro amigo Josan Caballero. La amistad se valora de muchas formas, y me siento muy agradecido por ese gesto de humildad y desprendimiento. Un narrador y comentarista deportivo nicaragüense, que no tiene mucho que ver con la literatura, aunque la aprecia bastante, y helo aquí, dejando su huella para el relato de nuestro común amigo Josan Caballero.

Josan Caballero  Eduardo Jesús Pintado López • hace 2 meses

Ya este foro se ha convertido, como un sitio de encuentro y reunión de amigos y colaboradores de Josan Caballero. Eso me está gustando bastante, amigo Eduardo Jesús, pues ustedes han alimentado este foro, con sus opiniones y valoraciones no sólo de mi aporte narrativo, sino del de muchos, que como yo, han creado piezas importantes, para este Club de Escritura, en su segunda entrega. Saludos, Josan Caballero.

Albeerto Suarwez Zubieta • hace 2 meses

Me encanta este micro relato, Un genial cuento de menos de seis lineas donde se plasma la frustración del lector-escritor que quiere escribir…desea crear un relato y no encuentra la satisfacción en lo escrito en el papel, lo intenta una y otra vez, pero no hay forma, no sale nada que le satisfaga….que piense que es digno de ser publicado y leído, el mismo se erige como juez, y el mismo dicta sentencia en su contra el resultado es el papel en blanco, la no creación y mas frustración.
El miedo a fracasar, a no gustar, e aquí el resultado de la falta de decisión y de la auto confianza en uno mismo.

Josan Caballero  Albeerto Suarwez Zubieta • hace 2 meses

Me parece una valoración bien académica y apropiada la suya, señor Albeerto, ya que consigue dar con el meollo del asunto, que me llevo a escribir el microrrelato. Le agradezco su colaboración y entrega, dentro de este foro creativo. Saludos, Josan Caballero.

Rosendo Manas Chepar • hace 2 meses

Felicidades por tan magnífico relato. Es uno de los dos mejores relatos que he leído por aquí, y eso que hay bastantes de muy buenos. Tu micro relato es claro y conciso, se nota que tienes un gran dominio como escritor…este micro relato podría figurar perfectamente, dentro del libro de textos breves que conforman la genial obra de Kafka la muralla china. Felicidades nuevamente

Josan Caballero  Rosendo Manas Chepar • hace 2 meses

Oye, amigo Rosendo, apretaste, con lo de LA MURALLA CHINA, de Franz Kafka, porque, aunque me halaga lo que dices, creo que te excedes en compararme, con semejante «escritorazo» y su gran aporte al subgénero del microrrelato, ya en su última etapa de desarrollo narrativo. Espero poder cubrir, igualmente, las expectativas de muchos otros participantes, comentaristas y del propio jurado, que es quien, en definitiva, dirá y dará la última palabra, dentro de este segundo certamen del Club de Escritura Fuentetaja. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Esperanza Caridad Gutiérrez • hace 2 meses • edited

Un micro cuento, que muestra el acercamiento a un lector-escritor, que se pierde él mismo en los laberintos de su desesperación por lograr ser y escribir mejor, de manera que logra anularse y desaparecer del contexto que quiso fomentar y engrandecer. Te felicito por la síntesis y el logro de un texto integral y muy armonioso.

Albeerto Suarwez Zubieta  Esperanza Caridad Gutiérrez • hace 2 meses

Es tan cierto eso que comentas Esperanza…sin duda es un relato un bastante kafkiano…lo de los laberintos de la desesperación, que frase mas perfecta para este micro relato, y como se podría interrelacinar con la obra del escritor checo

Damian Mosquera • hace 2 meses

Excelente microrelato muy contexto de la literatura da gusto leer este texto sigue así

Josan Caballero  Damian Mosquera • hace 2 meses • edited

Qué hermoso resulta leer el análisis de un amigo cercano, como Damián, quien, desde Colombia, me hace saber su alegría por la lectura de mi breve relato. Este Club de Lecto-Escritura me ha traído muchas satisfacciones, en tan poco tiempo, en especial, la de toparme con amigos entrañables, que han entrado, para hacerme saber que me siguen, me respetan y están al tanto de mis logros. Los aprecio a todos. Gracias, y continuaremos encontrándonos en este magnífico foro. Saludos, Josan Caballero.

Esperanza Caridad Gutiérrez  Damian Mosquera • hace 2 meses • edited

Gracias, amigo Damián, regocija que los amigos fortalezcan sus lazos culturales y de lectura con uno. Espero que sigas comentando y participando en foros como éste, como lo haré yo también.

Teresa Blanca Martinez • hace 2 meses

Querido amigo Jose, me gusta y sorprende la manera en que desarrollaste tu minicuento Eres especial literariamente, y creo que has escrito uno de los mejores microrrelatos del certamen. Atentamente, Teresa Blanca.

Esperanza Caridad Gutiérrez  Teresa Blanca Martinez • hace 2 meses • edited

Leo un buen microrrelato, que para mi gusto está muy bien construido y complementado por el autor. Llego por Josan a entender que el miedo a ser criticado, a veces nos lleva a anularnos y evitar la confrontación que desarrollaría la propia obra de un autor. Sin presión, podemos conseguir una obra buena y original. Lo felicito Josan Caballero.

Josan Caballero  Teresa Blanca Martinez • hace 2 meses • edited

Súper agradecido, con tu comentario, amiga Teresa. Siento especial predilección por este microrrelato. Hasta el punto de haberlo elegido, por encima de otros dos, que escribí al mismo tiempo, pero que ahora han quedado rezagados del análisis global, en espera de otra oportunidad como ésta, o dentro de un posible cuaderno de minicuentos. Pienso que, si entraste acá hoy, podré verte más a menudo en dicho sitio, comentando y participando, cual una narradora o lectora más. Embullate, y hasta crea tu microrrelato, para participar. Hay lugar para todos. Besos, Josan Caballero.

José María Padial • hace 2 meses

Muy buen microrrelato enhorabuena. Ha logrado con pocas frases transmitir la pérdida de literatura, de pensamientos por buscar algo perfecto. Es un texto que da que pensar.

Esperanza Caridad Gutiérrez  José María Padial • hace 2 meses • edited

Cierto que con muy pocas palabras, y menos frases, Josan crea el mundo particular de un lector, que de tanto leer y editar su narración, pierde su misma identidad y el resultado de su creación literaria. Si lo tomamos en cuenta, desde la escritura misma, se anula como propuesta creacional, y se pierde sin llegar a postular ningún texto específico, que podría facilitar la participación de este posible «borrador» en la literatura. Un mal no necesario, borrar y borrar, para no permanecer con nada, y Errar en el intento de Narrar. Muy buen micro cuento, Josan. El texto siempre dará que pensar, Josef María, porque es la propuesta y la presencia de un profesional narrador, como Josan, que se desea quedar con una historia natural, sin muchos elementos para adornar. Sólo aflora y desflora el temor de quien quiere perdurar, y se pierde, de tanta probar y borrar.

Josan Caballero  José María Padial • hace 2 meses • edited

Estimado Josef, amigo desde hace quince años, encontrarte aquí es acercar la literatura primigenia de la mocedad, al momento actual, en que aún nos debatimos, por crear alternativas de vida literaria permanente, y subsistir, en un medio, donde, constantemente, hay que estarse reinventando, para sobrevivir y llegar a establecer lazos más fuertes y concretos, que nos permitan avanzar y promovernos, por nosotros mismos, ya que los editores y editoriales no caen en paracaídas, ni aparecen del aire. Este significa un magnífico medio, para formarnos, informarnos y prosperar, dentro de un ambiente, con un caldo de cultivo propicio, para constituirnos, en una comunidad fuerte de narradores, capaces de generar una corriente alterna de creactividad y debate fructífero, que puede más, que un congreso de escritores y artistas. Gracias, por los aplausos. Me has dado la idea de llevar, cada semana, unos cuantos ejemplos de estos microrrelatos, a mi blog personal www.josancaballero.news, que, precisamente, se encuentra en su décimo aniversario, y puede ser un segundo aire, tanto, para sus lectores y seguidores, como para los participantes y comentaristas de este magnífico Club de Escritura Fuentetaja. Saludos, Josan Caballero.

Jordi Viñals  José María Padial • hace 2 meses

Eso es lo bueno de este microrrelato que nos hace reflexionar, yo lo he podido relacionar con cosas muy diversas y perfectamente válidas, coincido contigo amigo Jose María

Josan Caballero  Jordi Viñals • hace 2 meses

La maravilla y trascendencia de cualquier texto es eso, posibilitar las disímiles interpretaciones y propuestas, de acuerdo con la idiosincrasia, formación cultural e intelecto de cada lector y/o comentarista, e incluso escritor aficionado o connotado, quienes valorarán cada uno de los microrrelatos, con la impronta de sus sabidurías y sensibilidades, facilitando una movilización de la atención, en torno al ser y el deber ser de la escritura, y de este subgénero narrativo, que ha logrado un auge considerable, a partir de certámenes, como el que nos ocupa en la actualidad. Agradezco, sobremanera, que mi amigo venezolano Alejandro Bozo, me haya invitado a participar y comentar en este foro, que tanto bien me ha hecho y hace. Un abrazo, Josan Caballero.

ESTHER JIMENEZ OLMO • hace 2 meses

Muy buen texto, Enhorabuena!

Josan Caballero  ESTHER JIMENEZ OLMO • hace 2 meses • edited

Muy halagado, con tu mensaje, Esther. Nos acercamos a un estadio, en el que todos somos buenos escribanos y lectores, pero nos falta el imperceptible resquicio del escritor-autor consagrado, con el sello distintivo de no tener que repetirse o repetir recetas, modas y modos, para despuntar, más allá de un estilo único, diferenciado del resto del taller escritural. Me agrada esta disyuntiva de creernos y crearnos un universo de semejanzas y diferencias, para luego confluir, dentro de un taller o club de escritura, que nos acercará, reunirá, enmendará y distinguirá, sobre todas las cosas de este magnífico programa, con doble finalidad, en torno a la apreciación y la redacción literaria en comunidad. Un saludo, Josan Caballero.

Federico Neja • hace 2 meses

El colmo del escritor. El gran pecado del perfeccionismo. Y en el medio, como quien no quiere la cosa, esa piedrita en el zapato que todos sentimos al leernos.
Nunca contamos las batallas pérdidas, pero acá hay un hermoso resumen del lado oscuro de quien escribe.
Josan nos llevas desde el ego del escritor, al fracaso de las hojas en blanco. Un aplauso.

Josan Caballero  Federico Neja • hace 2 meses • edited

Los supuestos creadores o escritores-artistas estamos fabricados, sobre la base de innumerables colmos, y pocas calmas, mi amigo Federico. No enumeramos tampoco las batallas perdidas o borradas, por amor propio, más que por ego, ya que lo que posee o se yergue en el supuesto «borrador borrado» es un anti ego, que lo.contamina todo, y lo confunde, hasta el punto de auto reprimirse y desvirtuar toda escritura, que surge de sus manos y su mente, de modo que el miedo al fracaso o a la crítica desmesurada, lo llevan a auto corregirse y autocensurarse demasiado, aspecto negativo, que se vuelve en su contra, y hacen perecer, aún antes de empezar, al lector-escritor-editor borrado. Es un pecado cíclico y natural de todo proyecto fracasado, y en ello podemos incurrir y concurrir todos, si no tenemos una buena dosis de riesgo, valentía, en un punto medio, entre la humildad y el perfeccionismo. Tampoco tiene por qué existir conmiseración, ni burla, retracción o detracción, en ambos extremos polarizados de una agonía, que debe llegar a desaparecer, cuando logramos confiar en nosotros mismos, tomando de la mano nuestra sabiduría, talento y sensibilidad, junto al hecho de estar alertas, mientras nos proponemos, imponemos y arriesgamos, a fuerza de no ser, ni parecer perfectos. Tenenos que ser suficientes, pero nunca autosuficientes insuficientes, para reconocer y admitir un error, o detectar una falla, y superarla, con autocrítica y humildad, por natural o leve que ésta sea. No hay por qué autodestruirse o autodegradarse, en ninguno de los términos y/o posturas polares y bipolares. Hay oportunidades, en que nuestro ego nos puede salvar, como igualmente matar o desarticular todo. Convienen la mesura y los límites, en cada decisión. Dicen que de buenas intenciones está hecho también el camino del infierno. Gracias por hacerme reflexionar más de la cuenta, sobre estas cosas del quehacer y el devenir literarios. Saludos, Josan Caballero.

Federico Neja  Josan Caballero • hace 2 meses

Linda reflexión, yo creo que un doble aplauso te mereces, por haber logrado el texto tan resumido. Jajaja saludos!

Josan Caballero  Federico Neja • hace 2 meses

Gracias, Federico, por estimularme con mi texto; espero que continuemos avanzando, en este Club de creaciones, para encaminarnos a las finales, con buenos bríos. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Josan Caballero  Federico Neja • hace 2 meses

Especiales tus palabras, igualmente, Federico, pues te sientes en tu elemento y lo disfrutas. Continúa participando en espacios alternativos, como éste, para desarrollarte cada vez más. Entra en mi blog personal y suscríbete, para interactuar y conocernos mucho más ampliamente. Un saludo, Josan Caballero.

Josan Caballero  Federico Neja • hace 2 meses • edited

Muchas gracias nuevamente, estimado Federico. Estamos en el camino de forjar un destino en la literatura, con mayúsculas, y lo que importa es crear un espacio polivalente, que nos posibilite la crítica sana y la autocrítica, para generar mejores obras y mayores confrontaciones, en sitios como éste, que nos permitan el debate y la reunión más cálida y duradera. Gracias por continuar y revelarte, en esta justa comunal de narradores. Otro abrazo, Josan Caballero.

Jordi Viñals  Federico Neja • hace 2 meses

Cuanta razón tienes en lo que dices,, efectivamente Federico ese ego exagerado de querer buscar el perfeccionismo en lo que se escribe, termina aveces convirtiéndose en un absoluto fracaso, cuyo resultado es la nada…es decir las hojas en blanco. Muy bueno e interesante tu comentario, te felicito

Josan Caballero  Jordi Viñals • hace 2 meses • edited

Cuánta elucubración se puede encontrar un lector, lo mismo que un escritor, en torno a su texto creado, pero no debe, ni enfriarnos, ni hacernos sentir mal, sino, por el contrario, nos hace enfocarnos más y centrarnos, en la idea y finalidad de nuestro microrrelato, propiciando el reconocimiento de los múltiples aspectos y la trascendencia, más allá de las interpretaciones particulares o generales de cada uno de los textos presentados en este Club de Escritura. Me agrada la naturaleza polisémica de mi microrrelato, y es una de las virtudes y finalidades, que le encuentro a cualquier texto, susceptible de ser comprendido e interpretado de diversos modos, tanto, por lectores y escritores, como por los mismos editores y jurados. Saludos nuevamente, Josan Caballero.

Jordi Viñals • hace 2 meses

Sobre el texto Borrador Borrado, se han vertido numerosos y atinado comentarios, casi siempre relacionados con el miedo a no saber expresar adecuadamente los sentimientos, ideas, sensaciones del que escribe…que piensa no va a poder plasmar adecuadamente, …en el fondo se trata del miedo al fracaso, la intolerancia a la frustración, la inseguridad etc.
Pero mas allá de esta idea evidente y precisa, se me ocurren otros niveles de interpretación que puede tener el texto de Sr. Josan; Yo pienso que se podría entroncar con las ideas del llamado teatro del absurdo y el, existencialismo, y más concretamente con la obra esperando a Godot de Samuel Beckett, obra clave en este género, donde Vladimir y Estragón, los dos personajes principales de la obra se pasan su tiempo esperando a Godot, personaje que nunca llegará a aparecer….Al igual que en la obra, donde en realidad no pasa nada, evidenciando así lo absurdo de la existencia. en el borrador borrado, al lector-escritor, le pasa algo parecido, en su busca de la perfección, una y otra vez se queda en nada, Godot no llega a aparecer nunca, haciendo un símil, sería como decir que la obra tampoco llegará a ser escrita nunca!!! la acción-inacción se ira repitiendo hasta el infinito. En el fondo se expresa una crítica a una sociedad, a la falta de valores y a la inacción que se produce como consecuencia a la falta de valores.

Evidentemente, esto solo es un punto de vista, como tantos otros a los que nos podríamos referir …pues esa es la grandeza de este tipo de texto que sin llegar a cinco líneas, pueda ser tan sugerente y nos pueda hacer reflexionar sobre cosas tan distintas, despertar la imaginación del lector, estimular su reflexión y sobre todo excitar intelectualmente a quien lo lee. Como he leido en algun comentario, ya el título borrador borrado, es un juego de palabras que me parece genial y que a mi personalmente ya me predispone a leerlo con mucho interés. Bravo Josan!!!

Jordi Viñals  Jordi Viñals • hace 2 meses

Es de una gran lucidez lo que dices aquí. Para mi hay tres palabra claves, «miedo», «riesgo» y «asunción» y que deberemos asumir: lo voy a intentar razonar en la medida que me sea posible. El miedo al fracaso es un elemento clave en todo esto, pues el riesgo que subyace al presentar una obra al público, es algo que debemos asumir, pues en el fondo es un miedo ante lo desconocido (no sabemos como va a reaccionar el lector). Pero a mi modo de ver, la confianza en uno mismo es un factor clave, como lo es el hecho de tener claro lo que que se desea expresar-comunicar y como, estas son a mi modo de ver las dos herramientas claves e imprescindibles, para que nuestros textos no terminen convirtiéndose en un borrador borrado

Josan Caballero  Jordi Viñals • hace 2 meses

Una vez más me encuentro con otro mensaje tuyo, amigo Jordi, en torno a las herramientas usadas por el narrador, para la perfilación y brevedad del «Borrador Borrado», de manera que desarrollas, coherente y lúcidamente, un mensaje inteligente y certero, sobre la naturaleza lúdicra y directa del microrrelato, permitiendo un análisis concreto y especializado del mismo, toda vez que reconozco tu virtud y maestría, para desentrañar y explicar mis textos, con profunda destreza y seriedad. Gracias, amigo entrañable, Josan Caballero.

Josan Caballero  Jordi Viñals • hace 2 meses • edited

Estimado Jordi, cada vez que te leo, tienes la virtud de encontrar aristas en mis textos o poemas, más allá de lo que realmente transmiten al mediano lector. Eres un agudo y muy listo comentarista, que escrutas aquí y allá muchos más elementos de los que cualquier persona normal, podría visualizar y determinar. Por eso me gusta leerte y encontrarme con un análisis tuyo, el cual, por descabellado que parezca, siempre tiene un núcleo de razón y veracidad, dada tu cultura y profundidad, en el tema del que vas a tratar. Me alegra mucho encontrarte por acá, ya que es placentero ver un comentarista de tu talla confluir.en un espacio de esta naturaleza, pues nos refleja el alto nivel de participación y la riqueza de escritos valiosos y memorables, que enaltecen el cúmulo de obras presentadas a este certamen hispano de microrrelatos. Esperando en Dios, que sigamos recibiendo este analisis interactivo, que nos permitirá un mayor desarrollo y despliegue escritural. Gracias por tu participación y despliegue como un comentarista de cierta cultura y parsimoniosidad. Saludos, Josan Caballero.

Josan Caballero • hace 2 meses • edited

Gracias nuevamente, estimada Saida, eres una ruta y un camino conductor y selector de buenos textos. Cada vez que voy a tu blog o perfil de comentarista, me topo con un mensaje tan inteligente, sensible y agradable, que me conduces, y me fuerzas, sin esfuerzo, a leer el relato que comentas. Los tuyos son comentarios comunicantes y vivificantes. Eres especial en eso, porque no te contentas, con lo leído y escrito, sino que te presentas, para dilucidar, participar, y hasta aportar, en todo lo que lees o tocas. Ese es un gran don, el que tienes. Ya lo sabías? He ahí la clave, para no borrar, ni ser borrado. Y tú has dado con ella, sin saberlo, o proponértelo, quizás. No romper algo, no significa estar contento o placentero, con el hecho creado, sino, dejarlo detenido, adormecido un tiempo, para luego volverlo a retomar, y darle con todo, hasta que sea mejor y más duradero (y hasta, placentero, por qué no). Quiero saber, y leer y escuchar todo de ti, Saida T. Contreras. Me atrae mucho tu forma de escribir y de pensar. Ya tienes uno u otro fan. Te agradece tanto, Josan Caballero.

Saida T. Contreras • hace 2 meses

Lo vuelvo a leer… suelo hacerlo con las obras que me gustan, porque son creaciones, obras…Una serie de preguntas me llegan, ya mas para interpelarme: ¿Cuántas creaciones en silencio tan solo por el temor de no gustar? ¿Quién define la linea entre un buen o mal escritor? ¿Acaso escribir no es ofrecer en lo concreto eso que está en lo abstracto que clama simplemente existir primero en palabras para luego hacerlo en nuevas palabras, en ideas, en sentires, pensamientos y hechos? Tan solo hace unos pocos meses, consideré la idea de que soy escritora…ahora sé que lo soy, aunque aun no haya publicado…lo soy. Gracias por darme la oportunidad con tu micro de expresar una de mis tantas verdades, que gritan silentes como lo digo en una de mis canciones. Mucho éxito!

Rosendo Manas Chepar  Saida T. Contreras • hace 2 meses

Muy interesante lo que dices aquí Saida, y creo que dices algo que está muy en sintonia con el microrelato de Josan y que da que pensar «¿Acaso escribir no es ofrecer en lo concreto eso que está en lo abstracto que clama simplemente existir……».

Jose Gomez • hace 2 meses

Todo escritor trata de exigirse un poco más pensando que lo que ha escrito no es lo suficientemente bueno y realmente eso es una decisión errónea y es el lector el que debe hacer esta evaluación porque sino es donde ocurre lo del Borrador. Borrado y nunca llega a ningún lado

Josan Caballero  Jose Gomez • hace 2 meses • edited

Amigo José, esta noche recién, me entero por ti mismo, que eres el José Gómez, que hace tres dias ha comentado en el foro de mi minicuento, y me ha causado no sólo alegría, sino también regocijo, por la contundencia, con que realizaste tu comentario, que denotan capacidad de lectura, acercamiento atinado al tema, y discurso apropiado, en torno al género o subgénero literario, que hemos venido desarrollando muchos de los que participamos en este Club. Agradezco doblemente tu esfuerzo y gratitud, por demostrarme tu amistad y participación, dentro de este foro narrativo. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Josan Caballero  Jose Gomez • hace 2 meses • edited

Exactamente, tocayo José, pues yo me llamo José Antonio Gutiérrez Caballero. Y el Josan nació, como el manuscrito del «Borrador borrado», de ese mismo modo. Es la unión del «Jos», de José, con el «An», de Antonio. Y el Caballero de mi segundo apellido. No debemos temer a nada, amigo. Hay que saber ser sincero y auténtico, simplemente. Y tener o mantener mucha sensibilidad, sabiduría y fiabilidad en sí mismo. No confiarse mucho, pero sí confiar en uno mismo. Tener o lograr una buena dosis de seguridad y confiabilidad. Así pasamos de narradores o creadores en sí, a narradores o creadores para sí. Nada es suficiente bueno o malo, para perderse o borrarse. Hay que insistir e insistir hasta perdurar. Al menos, así hago yo, y ese es mi consejo, amigo. Saludos y continuidad, que es lo que resta y queda. Un abrazo. Josan Caballero.

Ofelia Gómez • hace 2 meses

Hola Josán. Un microrrelato especial, con un autor que de tanto borrar nunca llego a serlo. Una buena lección para quienes nos gusta escribir, no ser tan exigentes consigo mismos e insistir, porque lo que nos parece mal puede ser solo una exigencia exagerada.
Te guardo.
Saludos.

Josan Caballero  Ofelia Gómez • hace 2 meses • edited

Muy cierto y certero lo que nos dices, Ofelia. Es, en el ser o no ser, y en el hacer o el no hacer, donde está el equilibrio del supuesto escritor-lector-editor, quien encara una diatriba, en la que deberá vencerla el más equilibrado y ecuánime de los tres, o la más atinada de las actitudes de esta triple personalidad, que si no se vuelve paranoica o bipolar, podremos conseguir una media, que nos permita experimentar un consenso adecuado y regulador del oficio o «Manía de Ángel» del escritor, según digo en el título de un poemario, que publiqué en 1987. Un yo lírico o narrador, que no se permite errar, ni equivocarse, como si esto no fuera nada más, que un debate, entre el ensayo y el error, de un ser, que vive o sobrevive mucho más del quehacer, que del ser. Me agrada tu manera de pensar, Ofelia, en que el escritor se acerca más al insistir, que al desistir, y perderse entonces en el existir o no existir. Parafraseando a Descartes, con su «cogito, ergo sum», sería algo así, como «escribo, luego existo», pues éste es el centro de nuestra creacción. Un saludo, Josan Caballero.

Ofelia Gómez  Josan Caballero • hace 2 meses

Paso a dejarte mis votos para tu especial micro. Saludos!

Josan Caballero  Ofelia Gómez • hace 2 meses

Compartidos los votos y halagos. Gracias, Ofelia.

Josan Caballero  Ofelia Gómez • hace 2 meses

Gracias, Ofelia. No sé si lo merezco del todo, pero te lo agradezco. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Josan Caballero  Ofelia Gómez • hace 2 meses

Gracias por contar con tus estrellas, Ofelia. Yo también te voté a ti, así que ya tenemos una reciprocidad mutua. Espero que podamos estar entre los finalistas del jurado. Gracias y saludos, Josan Caballero.

Ricardo R. • hace 2 meses

Enhorabuena por este relato. Creo que expresa de manera concisa lo que muchos sentimos: ser nuestro peor crítico y asesor. De numerosos proyectos no queda al final más que un borrador. Muy bien el tema y el juego semántico: lector – escritor, borrador – borrado, leer -borrar, … Me ha gustado.
Un saludo.

Josan Caballero  Ricardo R. • hace 2 meses • edited

Lo mejor del microrrelato, como subgénero, es eso mismo, la concreción. Yo, que soy esdrújulo, por naturaleza, al menos encuentro y consigo en algo, la concisión
Hasta en la poesía, me resisto de ser escueto y conciso, de ahí que me guste tanto el texto creado, y que tú le veas ese rasgo distintivo. El juego semántico es la tríada más fuerte del microrrelato, pues, siendo una misma persona, se desdobla en tres oficios composturales convergentes y divergentes a la vez: un lector, que puede ser escritor, borrador y/o editor a la vez. Tres posturas, que pueden ser borradas, por una acción coyuntural e imprecisa, incluso, por una decisión, marcada por el miedo al fracaso, o a la falsa valoración y la mala interpretación. Saludos y agradecido, mi amigo Ricardo R. Enhorabuena contigo, igualmente, Josan Caballero.

Adelfa Negra • hace 2 meses

Creo que todos hemos limpiado un borrador hasta dejarlo en blanco, o tirado hoja tras hoja a la papelera, o dudado de nuestro talento. Se necesita unas dosis de seguridad en si mismo y cierta tolerancia al fracaso y al error, sino todo terminaría en hoja en blanco. Me gusta mucho el tema y como lo has expresado. Saludos

Josan Caballero  Adelfa Negra • hace 2 meses

Que maravillarey, mi querida Adelfa Negra, encontrar una opinión, que coincida o se ajuste a la nuestra, pues realmente somos los iniciadores iniciados en estas lides, en donde escribir es casi lo mismo, que borrar; y hasta, incluso, convengo contigo, en que el editor y el escritor están más cercanos al de la goma de borrar, que el que se empeña en escribir y reescribir. A menudo, somos susceptibles de crear borradores y más borradores, mientras nos constituimos en verdaderos borradores borrados. No pensé que un aparente juego de palabras podría convertirse en la clave de nuestro ejercicio escritural, hasta el punto de sobrevivirnos y despertenecernos. Un saludo y gracias por tu gentileza de comentar, Josan Caballero.

Arielle Navarra • hace 2 meses

Borrador borrado…no podré dormir unas horas pensando en tu juego de palabras Josan. Gracias

Josan Caballero  Arielle Navarra • hace 2 meses

Un juego de palabras, no sólo lúdicro e intencional. Una verdadera función de la literatura, según Jakovson y los formalistas rusos, mi estimada Arielle. Permanecemos incólumes ante algo que no nos proporciona un reto o un regocijo. Este microrrelato significa un desafío para quienes gustan de la intertextualidad y las derivaciones o retruécanos poéticos. Me gusta y suelo ser un.prestidigitador del.idioma, retozando con la poesia más cercana y verdadera. Gracias por comentar, mi amiga Arielle. Saludos, Josan Caballero.

Davionet • hace 2 meses

Borrador borrado, a diario, lo que hacemos, pensamos, decimo… En fin, ya no se cuentas veces he escrito y borrado…

Josan Caballero  Davionet • hace 2 meses • edited

El proyecto del hombre perfeccionista perfeccionado. Leer y escribir, para luego borrar y reescribir, pero mientras más lo haces, vas perdiendo la energía y el sentido de la propia lectura y escritura. En una ráfaga de creatividad, se pierde el camino de vuelta al pensamiento lectivo o creativo. Es una certeza y un espejo, en el que todos podemos reflejarnos y encontrarnos, sin marcha atrás. Gracias, amigo Davionet, por devolverme esa imagen de salida y llegada, o viceversa. Un placer, igualmente, encontrarme contigo por acá. Saludos y abrazos, Josan Caballero.

Jordi Viñals • hace 2 meses

Siguiendo con e micro texto de Josan, según mi opinión, tiene muchos niveles de interpretación y reflexión. Anteriormente hable de una forma muy breve sobre lo mas evidente, la cantidad de escritos y posibles obras que se pierden, por el hecho de buscar una perfección que no existe. El hecho de escribir y borrar, y escribir y borrar, yo lo entroncaría con la filosofía-religión budista, donde lo que importa no es la acción en si misma, sino en el modo y actitud de como se realiza,
es decir actuamos siendo nosotros mismos, extrayendo de nuestro ser una forma de actuar que es la que nos corresponde, siendo lo que somos y como somos, sin pretender otra cosa que ser nosotros mismos, lo otro sería una impostura, que equivaldría un poco a negarnos. Caer en la simplicidad de hacer una abstracción del castigo condenatorio a la repetición de la acción sin más, que pudiera pensarse en el enigma mortal de Sisifo, me parece una obviedad, que lastra al propio texto, más que ensalsarlo y promoverlo como algo distintivo.

Josan Caballero  Jordi Viñals • hace 2 meses • edited

Muy contundente tu afirmación, además de la agudeza de tus planteamientos, en torno a mi micro texto, como dices, ya que la búsqueda de perfección, si bien es un acto de crecimiento y consagración humana, puede convertirse en una falta de continuidad, con la ruptura de la propia identidad, que nos hace manifestarnos, sin poder encontrar la rebuscada perfección,
junto a la inconsecuente potencialidad creativa. En verdad, el asunto de nuestro microrrelato, en vez de remedar a Sísifo o Ícaro, tiene mucho más que ver, con la Penélope, de «La Odisea», de Homero, quien cada día teje, lo que en la noche vuelve a destejer, a escondidas, hasta que regrese su amado a Itaca, y le devuelva su identidad y su amor, perdidos o borrados, desde su irremediable abandono, por marchar a la guerra de Troya. Todo puede ser la suma del ingenio intertextual o del propio, pero simplemente, si queremos explorar, explotar y elucubrar sobre todo esto, lo podemos hacer, y llegaremos a sitios diversos o convergentes, porque la literatura y el arte, en general, son así, polivalentes y multiaspectuales, se califican a sí mismas, y a muchas otras cosas más. Agradezco tu incidencia y anuencia en este sitio literario especial. Otro saludo, Josan Caballero.

Vivian Cristina Gutiérrez Quin • hace 2 meses

Genial tío!!! Siempre nos regalas excelentes trabajos!! Un abrazo!! Y muchos éxitos en esta linda profesión!!

Josan Caballero  Vivian Cristina Gutiérrez Quin • hace 2 meses

Una verdadera sorpresa, que mi sobrina clarinetista, Vivian Cristina, que vive en Bolivia, aparezca en este foro, leyendo y comentando sobre mi microrrelato. Es algo increíble lo que la literatura puede hacer con nuestras propias vidas. Pudimos ser borrados, igualmente, cuando nos desprendemos de nuestro suelo patrio, y prácticamente fuimos borrados, por no compartir el mismo ideal, o tratar de romper, con la injusticia de una sociedad, que cercena los derechos inalienables de los hombres y su pueblo, vilipendiado por los mismos que le juraron favorecerlo y defenderlo. Es un honor tenerte aquí conmigo, mi sobrina adorada. Besos, Josan Caballero.

Jordi Viñals • hace 2 meses

El borrador borrado, me parece un mini relato genial, porque te hace reflexionar sobre la inmensa cantidad de obras que se habrán perdido, ideas que habrán desaparecido en el limbo de las ideas…esto me hace pensar en Frank Kafka que pidió a su mejor amigo antes de morir, que destruyera todas sus obras….por suerte no lo hizo!!
Yo que soy un seguidor de este autor, del que vienen cantidad de poesías, artículos y demás en su blog
https://josancaballero.news he podido constatar de su gran talento para escribir y su enorme capacidad de creación; es un gran poeta, tienes muchos poemas y libros realmente geniales

Frank Violi  Jordi Viñals • hace 2 meses

Este cuento es una muestra de lo que puede suceder a todo aquel que se manifiesta temeroso y dubitativo de crear, pues luego va a romper con lo mismo que antes escribió, sólo por autocensura y falta de seguridad en sí propio. Me fascina su comentario, amigo Jordi. Ejemplar este cuento de Josan Caballero.

Jaime Manuel Alonso Sedanos  Frank Violi • hace 2 meses

Comparto tu opinión, amigo Frank, ya que el mini texto de Josan tiene mucha hoja de papel por donde cortar, de manera que aquí estamos, conectando el arte narrativo de este experimentado escritor, que también es poeta, periodista y bloguero, por lo que vale la pena comentar sobre las variantes de ssd u obra. Recorrer las casi escasas seis líneas del minirrelato es entrar en contacto con un texto compacto y bien perfilado que alerta sobre los perjuicios de atentar contra la obra personal, si no se tiene una noción seria del valor del quehacer literario, a expensas del miedo y la autocensura, correlato de una pérdida irreparable en torno a un texto que nunca aparecerá ni se leerá jamás. Excelente Josan, y muy bien por ti también, Frank, muy acertado tu comentario.

Julio Cesar Brito Cepero  Jordi Viñals • hace 2 meses

Me gustan sus palabras y aseveraciones, señor Jordi, ya que usted demuestra contundentemente cómo es de positivo y aleccionador el microcuento de Josan Caballero, donde un lector se anima a escribir, pero tiene tanto miedo de fallar y de darse a conocer, con sus descalabros, que termina eliminando todo el rastro de su creación. Es un relato, con moraleja intrínseca, que nos lleva a reflexionar sobre el origen de la creación y sus consecuencias. Me agrada mucho el cuento de Josan y la manera suya de considerarlo y ponderarlo.

Jaime Manuel Alonso Sedanos  Julio Cesar Brito Cepero • hace 2 meses

Este certamen, señor Julio Brito, nos ha hecho entrar en contacto con escritores, lectores y comentaristas de muchas partes del mundo, y en especial me aferro y comparto la valoración y magnificencia de un texto como BORRADOR BORRADO, del cubano Josan Caballero, pieza alegórica que representa la realidad trágica e irónica de un escritor, que quiso ser tan perfeccionista, quien de tanto editar y enmendar su texto, se borró a sí mismo, y ya no pudo presentar nada de lo suyo jamás. Una doble lectura parabólica, que nos enorgullece y reconforta. Me lo llevo, entre mis mejores muestras de los presentados al concurso.

Frank Violi  Julio Cesar Brito Cepero • hace 2 meses

Disponer de un discurso particular es lo que desea todo escritor y pienso que Josan Caballero logra esto con su narración, que resulta de un proceso que combina pericia y filosofía de la vida, lo cual apreciamos en su microrrelato, razón para que esté contento nuestro amigo escritor. Me gusta este debate de altura, sobre el cuento de Josan.

Josan Caballero  Julio Cesar Brito Cepero • hace 2 meses

Excelente que hayas entrado hoy a comentar de este microcuento, que hice de un plumazo el mismo día 1 de noviembre, amigo Julio César. Cierto que el miedo y la precaución pueden llevar a un principiante de escritor, hasta a negarse y eliminar su sendero de creatividad. Pero, debe servir, más que de escarmiento, de lección y discernimiento de lo que se debe hacer, en este tipo de casos, para que no perdamos la perspectiva de qué es lo que debemos y queremos hacer, para conseguir un camino fructífero y en ascensión, tanto, como creador, que igualmente, como lector, promoviendo el encuentro diáfano de ambas partes del canal de comunicación, entre el emisor y el receptor, ya que de ambos depende la respuesta o satisfacción comunicativa. Me complace la lectura y aporte de tu comentario. Gracias, Josan Caballero.

Frank Violi  Josan Caballero • hace 2 meses

Me parece muy digno comentar sobre su cuento, Josan, porque veo extremadas cualidades en su narrativa, la cual es sencilla y corta, pero eso no resta valor a su contenido y mensaje subliminal. Me parece que he leído uno de los más grandes relatos breves de este concurso. Felicidades una vez más.

Josan Caballero  Jordi Viñals • hace 2 meses • edited

Que beneplácito encontrarme contigo por acá también, estimado Jordi, uno de los mejores lectores que conozco, fan de mi blog hace casi un año, y seguidor asiduo de mis creacciones. Tu conoces bien esa clase de lector-escritor, si lo has vivido en carne propia, tratando de frutecer el mejor discurso, para que perdure. Diatriba, que nos compete a todos, y nos sofoca una que otra vez, sin atormentarnos del mismo modo a cada cual, pues igualmente sucumbiriamos, sin remedio. Pero, felizmente, hemos transgredido el universo de lo imposible, hasta hacerlo posible y llevadero, conquistable y frecuente, de tal manera, que hemos perdido el temor a la confrontación con la página en blanco, y nosotros mismos, que nos hemos vuelto desfachatados, para crear un alter ego y unos cuantos yo líricos, que nos permitan subsistir y coexistir, en esta confusión de planos, que es la literatura, con y desde la realidad más sempiterna. Gracias por comentar y aparecer, en la vida y mi literatura, unas tantas veces, que me permiten crecer y hasta estirarme, desde mis raíces, pero nunca retirarme de mi propia voz y mi intelecto reverdecido y surtidor. Gracias siempre, un saludo, Josan Caballero.

Alejandro Bozo Cohen • hace 2 meses • edited

Excelente micro relato y que me trae a la memoria el mito de Sísifo. Esa es la maravilla de la intertextualidad en la literatura y este es un ejemplo perfecto.Reinventas el mito y creas algo nuevo. Sísifo que, por castigo de Zeus y Hades tiene subir la piedra por una montaña, para que después de llevarla a la cima esta vuelva a caer y que dicho ciclo se repite ad infinitum, en tu microcuento Sísifo escribe, cambia la piedra por la pluma pero el castigo es el mismo. Abrazos y suerte.

Josan Caballero  Alejandro Bozo Cohen • hace 2 meses • edited

La maravilla del pensamiento humano y las coincidencias, junto a la intertextualidad, mi amigo Alejandro. Tú le ves intratextualidad con Sisifo y yo se la veo más con Icaro, el de las alas prestadas, pero igual, no hay nada nuevo verdaderamente bajo el sol, aunque sólo realmente los escritores modelamos la sintaxis y creamos parábolas distintas de los mitos e historias seculares, para diseñar un nuevo discurso y una nueva propuesta poética o narrativa. De todas maneras, me halagas con tu comentario enaltecedor, pues Sísifo es uno de los héroes fundamentales de ml mitología personal, sobre todo lírica. Y quizas, como dice uno de tus ídolos, Ernest Hemingway, «el verdadero estilo de un escritor es la torpeza que tiene de repetirse». Quizás esté pasando esto conmigo, que estoy trasladando uno de mis temas o asuntos favoritos, de la poesía a la narrativa, y estoy transponiendo y remodelando el mito al pobre lector-escritor borrado. En realidad, intenté más reflejar la falta de perfeccionismo, de un ser inseguro e incapaz de serlo, en su propia naturaleza imperfeccionista, como ocurre con muchos, que pululan en nuestro ambiente cultural. Si fuera así, como dices, mi lector se hubiera crecido y levantado una y otra vez, con la piedra, desde sus hombros o su estómago, para no ser borrado ni hundido jamás. Aún así es una nueva versión o planteamiento, para otro microrrelato, s tomar en cuenta, en una próxima y magnífica oportunidad, como esta. Gracias y saludos, amigo Bozo. Te aprecia y admira, Josan Caballero.

Dominique Heathcote • hace 2 meses

Josan, seguro que tu protagonista no es del todo consciente de lo bien que escribe. suerte y un saludo!

Josan Caballero  Dominique Heathcote • hace 2 meses • edited

Ciertamente, Dominique. Es una lástima, que tantos proyectos de lector-escritor se hayan perdido y se pierden, por la falta de seguridad en sí mismos. A todos nos ha pasado y nos pasa, pero hay que saber y lograr romper con ese espacio de miedo, que nos conduce más al fracaso, que a la confrontación. Preparé otro microrrelato, para enviar, pero éste me satisfizo y convenció más, por la cercanía que guarda con todos nosotros, pendientes de opiniones y justeza, que tienen más que ver con la seguridad interior y ulterior, que con lo demás, también en nuestra batalla personal, por reafirmarnos. Todos somos susceptibles de ser «borradores borrados». Sólo tenemos que estar alertas y volar, con nuestras propias alas de palabras con cera, sin acercarnos demasiado al sol, en sus inicios…Un saludo y gracias por comentar, Josan Caballero

Saida T. Contreras • hace 2 meses

Fue sólo un borrador borrado… bonito juego de palabras… cuántas creaciones que nunca fueron conocidas, cuantos borradores borrados…curiosamente me identifico con este micro relato. Saludos, Lo guardo!

Josan Caballero  Saida T. Contreras • hace 2 meses

Encantado con tu comentario, Saida. Así han sido y somos la suma y la duda de infinidad de lectores, que no se atreven a despuntar; y hasta borradores borrados, que se perdieron en el maremágnum de la zozobra y la desolación. Es el tétrico homenaje a esos seres con luz, pero con miedo de fracasar, y no «pegarla», como se dice, cuando «de los cobardes lo único que se ha escrito, es eso: Nada.». Gracias por tu aliento y sensibilidad. Un abrazo, Josan Caballero.

ROBERTO • hace 2 meses

Hola Josan, triste ser uno mismo, el único lector de lo que escribe, bien por el micro. suerte, te guardo

Josan Caballero  ROBERTO • hace 2 meses • edited

Gracias, Roberto, más difícil es matar lo que hace uno mismo, pensando que es imperfecto; y la imperfección se halla en el miedo a presentarse como uno es, a no saber entregarse y borrar lo auténtico de nuestra creatividad. Eso es lo que nos borra en el propio intento de nacernos. Admiro tu comentario y lo agradezco con creces. Abrazos, Josan Caballero.

Extracto y Selección: José Antonio Gutiérrez Caballero

Miami, 6 de enero del 2020.